Presidente Maduro dirige carta a líderes del mundo: «Defender a Venezuela es defender la paz»
El canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Yván Gil, encabezó este lunes 22 de diciembre, un acto oficial desde la Casa Amarilla «Antonio José de Sucre» para dar a conocer una denuncia remitida por el presidente Nicolás Maduro a los jefes de Estado del mundo y a la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
En el documento, Venezuela alerta sobre una escalada de hostilidades por parte del gobierno de los Estados Unidos que, bajo el pretexto de operaciones antidrogas, ejecutó actos de piratería estatal y violaciones sistemáticas al derecho internacional en aguas del Caribe y el Pacífico.
La misiva detalla que, desde el pasado 14 de agosto, Washington ordenó el mayor despliegue naval y aéreo en la región de las últimas décadas, incluyendo la presencia de un submarino nuclear frente a las costas venezolanas dentro de la denominada «Operación Lanza del Sur».
El Gobierno Bolivariano denunció que esta movilización no tiene justificación alguna y constituye una amenaza directa del uso de la fuerza, vulnerando la declaración de América Latina y el Caribe como Zona de Paz y el Tratado de Tlatelolco, que prohíbe armas nucleares en la región.
El punto más alarmante de la declaración revela que, entre el 2 de septiembre y el 18 de diciembre de 2025, fuerzas estadounidenses perpetraron 28 ataques armados contra embarcaciones civiles. Según los datos presentados por la Cancillería, estas acciones han dejado un saldo trágico de 104 personas ejecutadas extrajudicialmente, muchas de ellas en condiciones de indefensión tras naufragar.
Venezuela calificó estos hechos como una transgresión flagrante a los Convenios de Ginebra y a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, señalando que el uso de fuerzas estatales para atacar buques civiles y su carga define una práctica de piratería moderna.
«Si se tolera el uso unilateral de la fuerza, la ejecución de civiles, la piratería y el saqueo de recursos de Estados soberanos, el mundo se encamina hacia un escenario de confrontación global de proporciones imprevisibles», advierte el texto leído por el canciller Gil.
El presidente Maduro, a través de la voz de su canciller, alertó que estas agresiones trascienden las fronteras venezolanas.
El bloqueo y la piratería contra el comercio energético venezolano impactan directamente en el suministro de petróleo, incrementando la inestabilidad de los mercados internacionales. El Gobierno venezolano fue enfático al señalar que «la energía no puede convertirse en arma de guerra», ya que este asedio golpea con mayor fuerza a las economías más vulnerables de la región y del mundo.
En la misma línea, la misiva realiza un llamado urgente a las naciones del mundo para condenar explícitamente estas acciones y activar los mecanismos del sistema multilateral para sancionar a los responsables. La carta, enviada por nota diplomática a los 194 países que integran la Asamblea General de las Naciones Unidas, reafirma la vocación de paz de la nación, pero también su determinación inquebrantable de defender su soberanía y recursos ante cualquier intento de intimidación militar o expolio colonialista.
Fuente: teleSUR.
