Concluye en Guantánamo el VIII Seminario Internacional por la Paz y la Abolición de las Bases Militares
Por Yaimi Ravelo / Cobertura Especial para Resumen Latinoamericano-Cuba.
Guantánamo, 5 de mayo de 2024.- Con el apoyo popular del pueblo de Caimanera concluyó este domingo el VIII Seminario Internacional por la Paz y la Abolición de las Bases Militares tras la lectura de la Declaración Final de este importante evento antiimperialista.
“Un mundo de paz y de justicia social es necesario” fue el reclamo unánime que defendieron más de 80 delegados de 30 países en la conclusión del encuentro, que se caracterizó por el amplio debate desde las voces de los pueblos que defienden el derecho a la vida y la paz frente a la amenaza de las potencias imperialistas que agreden la soberanía de las naciones.
La última jornada de ponencias estuvo presidida por Fernández González Llort, Héroe de la República de Cuba y presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP) y Víctor Fidel Gaute López, vicepresidente del ICAP.
Los delegados de Cuba, Puerto Rico y Venezuela expusieron en la sesión de la mañana a la ciberguerra y el ciberterrorismo como una de las nuevas armas por las que apuesta el imperialismo para agredir y socavar la soberanía de los pueblos.
Kirenia Nariño, Presidenta de la Asociación de Informáticos de Cuba en Guantánamo, sostuvo que la ciberseguridad en la isla tiene que continuar avanzando en la investigación desarrollo y la innovación.
En su intervención recordó que el gobierno de los EEUU ha expresado que “responderían con armas convencionales” a quienes los ataquen desde el ciberespacio. Ataque que puede originarse por ellos mismos e incluso desde un tercer país, por lo que “la Base Militar que ocupa más de 100 km² de la provincia guantanamera es sin dudas una amenaza real para Cuba.
“Quien domina el ciberespacio garantiza su hegemonía, lo que está calificado como el nuevo campo de batalla del siglo XXI”, calificó Luís Fidel Escalante, delegado de Puerto Rico.
La ciberguerra es un modelo de conflicto en un contexto bélico, ocasionando ataques silenciosos que proporcionen el escenario propicio para atacar un país con el consenso de la opinión pública internacional manipulada a través de los medios.
El investigador boricua expuso ejemplos de ataques ciberterroristas en todas las regiones del mundo que confirman la amenaza real para la paz mundial de este modo de guerra.
En este sentido, -el vicepresidente del ICAP- Víctor Gaute López afirmó que Cuba es atacada diariamente en el ciberespacio. El ciberterrorismo constituye una variable más de la fórmula de guerra silenciosa que pretende arrebatar la tranquilidad de los cubanos.
“El imperialismo ha entrado en una fase frenética de acciones desesperadas que identificamos como “hiperimperialismo”, donde se aferra a su poderío militar para contrarrestar el declive de su hegemonía mundial”, remarcó Carlos Ron, presidente del Instituto Simón Bolívar para la Paz y la Solidaridad entre los Pueblos.
El dirigente venezolano alertó que el imperialismo con el apoyo de la OTAN y su gran capacidad tecnológica busca asegurar la presencia militar de sus tropas en América Latina. El peligroso acercamiento de algunos países de la región -como Argentina- “constituyen una amenaza para la paz y soberanía de los pueblos de la región”, afirmó.
El “Impacto militar sobre el clima y el imperialismo verde” fue el eje central de la ponencia de Paola Renata Gallo, copresidenta del MOPASOL, Argentina.
La investigadora argentina destacó que “durante el gobierno de Alberto Fernández -luego de la declaración de estrés hídrico del país y de haber sufrido en el año 2022 la peor sequía jamás experimentada por el país austral- se firmaron acuerdos con Israel para la gestión del agua en varias provincias”.
Denunció categóricamente que el gobierno argentino no solo exporta armas y entrenamiento para la ocupación y el exterminio genocida del pueblo palestino, sino también, tecnología de espionaje y control social de avanzada.
“La triada Estados Unidos-Israel-Colombia fue hasta el gobierno del Pacto Histórico un proyecto de guerra a escala continental”, afirmó.
“Nos es urgente construir un movimiento popular regional que permita en términos concretos, la salida de Colombia, Brasil y Argentina de la alianza con la OTAN”.
“Hoy el mundo debate su futuro en Palestina. Seguiremos luchando por construir herramientas de paz, a eso dedicamos el don de la vida. Palestina es humanidad!”, exclamó Paola Gallo.
Al finalizar su ponencia la académica argentina entregó 20 banderas palestinas a los estudiantes de medicina -del atacado país- que participaron en el evento.
“Si muere Palestina, muere la humanidad”, reafirmó Murid Abukhater al recibir las banderas que fueron enviadas y donadas por la compañera Adriana Doncel del Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos desde Argentina.
Los estudiantes palestinos en nombre de su pueblo rechazaron la limitación de las fronteras de Palestina con el estado sionista de “Israel”, -aprobadas por la ONU en 1967- formulación que incumple el gobierno genocida de Netanyahu al invadir la Franja de Gaza bajo los crímenes de guerra más horrorosos que ha presenciado la humanidad.
El genocidio perpetrado por “Israel” en Gaza ha dejado en evidencia las vulnerabilidades del derecho internacional, las Naciones Unidas y los organismos internacionales. Mecanismos multilaterales atados de pies y manos sin el consentimiento y apoyo del imperialismo norteamericano.
En la conclusión de las ponencias el presidente del ICAP agradeció el aporte de los participantes del VIII Seminario Internacional por la Paz y la Abolición de las Bases Militares Extranjeras, que condujeron al intercambio de estrategias que contribuyan el fortalecimiento de un frente mundial antiimperialista en defensa de la paz y soberanía de los pueblos.
Este encuentro ha sido de una elevada calidad y es fruto del contenido de todas las intervenciones, un aporte fundamental que caracteriza este VIII Seminario”.
Aprobación por el pueblo de la Declaración Final en Caimanera
El pueblo de Caimanera recibió en la tarde a los delegados del VIII Seminario Internacional por la Paz y la Abolición de las Bases Militares Extranjeras para acompañarlos en la aprobación de la declaración final del evento internacional.
El acto político en la primera trinchera antiimperialista estuvo presidido por Yoel Pérez García, Primer Secretario del PCC de Guantánamo; Fernando González Llort, Héroe de la República de Cuba y presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP); Víctor Fidel Gaute López, vicepresidente del ICAP, Iraklis Tsavdaridis, Secretario Ejecutivo del Consejo Mundial por la Paz (CMP) y Alis Azaharez Torreblanca, Gobernadora de la provincia.
La lectura de la declaración final del evento fue expuesta por la joven colombiana Sara Palmezano.
Los luchadores por la paz reunidos en Guantánamo se comprometieron a:
-Denunciar las políticas agresivas e injerencistas del actual Gobierno de Estados Unidos y de sus aliados de la OTAN, que persiguen el objetivo de dominar el mundo con ayuda de la extensa red de bases, instalaciones y enclaves militares existentes, así como el peligro que representa la incorporación de nuevos miembros a esa organización belicista.
-Trabajar en la construcción de la paz continental, implica que de manera urgente Colombia, Brasil y Argentina abandonen su estatus de socio global y aliados extra OTAN.
-Demandar el cierre de las bases e instalaciones militares extranjeras de Estados Unidos y la OTAN en todo el mundo.
-Denunciar el incremento de gastos militares de la Unión Europea y la OTAN que contribuyen al fortalecimiento de la carrera armamentista.
-Seguir exigiendo la devolución del territorio ilegalmente ocupado por la Base Naval de Estados Unidos en Guantánamo, así como la eliminación de la cárcel existente.
-Incrementar el apoyo al derecho legítimo del pueblo de Cuba, en su lucha contra el bloqueo expresado en medidas coercitivas y económicas unilaterales.
-Continuar alertando a los pueblos del mundo sobre los peligros de una conflagración nuclear global de incalculables consecuencias para la humanidad convocándonos a movilizarnos de forma permanente.
-Fortalecer la demanda del cierre de las bases, instalaciones y enclaves militares foráneos y el retiro inmediato de las tropas de ocupación extranjera en los países donde se encuentran desplegadas por constituir el instrumento de la política hegemónica del imperialismo y del capital financiero internacional. Igualmente rechazar todo proyecto de imposición de nuevas bases o instalación de equipos cibernéticos.
-Convocar cada año alrededor del 23 de febrero “Día Mundial de acción contra Bases Militares Extranjeras” se realicen acciones e iniciativas en todos los países en contra de estas instalaciones.
-Ampliar la divulgación del contenido de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz dada su actualidad y vigencia en el contexto político latinoamericano y caribeño y exigir a los gobiernos que honren el compromiso que la misma establece.
-Fortalecer la lucha contra el terrorismo bajo cualquiera de sus formas y seguir denunciando el vínculo de ese flagelo con el imperialismo, artífice de la lista arbitraria y unilateral del Gobierno de los E.U sobre países presuntos promotores del terrorismo, donde Cuba nunca debió estar. En este contexto exigimos que de manera inmediata Cuba sea eliminada de esta ilegal lista.
-Multiplicar las acciones de la Campaña Internacional por un mundo de Paz, sin armas nucleares, químicas, biológicas y revelar su presencia en bases e instalaciones militares extranjeras.
-Continuar expresando la más amplia solidaridad con los países y pueblos bajo ocupación y dominio colonial en El Caribe inglés y francés, Sudamérica, África y Medio Oriente, donde hay presencia militar extranjera como en Guyana, Puerto Rico, Argentina en Neuquén y las Islas Malvinas, Georgia del Sur y Sandwich del Sur, Siria, Palestina, Sahara Occidental y Chipre.
-Expresar la solidaridad con el pueblo peruano al tiempo que condenamos el incremento de bases militares estadounidenses en su territorio tras el golpe de estado al Presidente Pedro Castillo.
-Rechazar el uso de la controversia de la Guyana Esequiba como pretexto para promover la presencia del Comando Sur en nuestra región, afectando la zona de paz que caracteriza a América Latina y el Caribe. Asimismo, apoyar el derecho del pueblo venezolano de celebrar elecciones el próximo 28 de julio, en paz y sin intervención extranjera.
-Expresar nuestra solidaridad con los pueblos indígenas y comunidades africanas de América Latina; a la vez que exigimos la reparación de daños causados por el colonialismo y la esclavitud a estas poblaciones.
-Manifestar nuestro apoyo al pueblo de los Estados Unidos que lucha por la paz y rechaza la expansión de las bases militares y las acciones injerencistas de su gobierno.
-Denunciar las acciones imperialistas contra Nicaragua y reforzar la solidaridad con su pueblo.
-Expresar solidaridad con el pueblo y gobierno colombianos. Se hace un llamado por la implementación de los Acuerdos de Paz, y el respeto a la vida y a los derechos humanos, al tiempo que apoyamos el programa de paz total que impulsa la política del actual gobierno.
-Incrementar las denuncias sobre las amenazas de uso de las armas nucleares que sólo conduciría a una guerra generalizada de dimensiones globales, y a su vez contra cualquier tipo de atentados hacia científicos del Sur global
-Alertamos sobre la militarización del Ártico y del uso del espacio exterior con fines belicistas.
-Rechazar las campañas de ciberguerra y desinformación comunicacional emprendidas desde Estados Unidos y la OTAN.
-Condenamos enérgicamente el rol de Estados Unidos y la OTAN en la militarización de Ucrania y el apoyo de estas potencias en el actual conflicto ruso-ucraniano, el cual debe cesar.
-Haití sufre una grave situación humanitaria y de seguridad, que agudiza la inestabilidad social y la pobreza causada por siglos de saqueo colonial y neocolonial, subdesarrollo e intervención extranjera.
-El pueblo haitiano tiene derecho a encontrar una solución pacífica, sostenible y duradera a los enormes desafíos que enfrenta, sobre la base del pleno respeto a su autodeterminación, soberanía e independencia, por lo que expresamos nuestra solidaridad con el pueblo haitiano; nos oponemos a cualquier intervención militar en este país y apoyamos un plan de desarrollo social que beneficie a esta hermana nación.
En relación al genocidio que se comete contra el heroico pueblo palestino por parte del estado sionista de Israel en complicidad con el imperialismo norteamericano y la Unión Europea los participantes acuerdan lo siguiente:
-Una solución amplia, justa y duradera al conflicto exige, inexorablemente, el ejercicio real del derecho inalienable del pueblo palestino a la libre determinación y a construir su propio Estado Independiente y soberano dentro de las fronteras anteriores a 1967 y con su capital en Jerusalén Oriental. Si Palestina muere, muere la humanidad.
-La historia no perdonará a los indiferentes y no estaremos entre ellos. Es tiempo de poner fin a la filosofía del despojo, del robo y de la explotación, para que muera por falta de incentivos la filosofía de la guerra.
-Denunciamos la represión y persecución en nuestros países contra los activistas que apoyan el cese del fuego en Palestina y su liberación.
-Más allá de alentar el uso de la fuerza y proseguir enviando ayudas financieras millonarias, mediante equipamiento militar de última generación, todas las partes tienen la responsabilidad de contribuir a encontrar una solución, en aras de la paz mundial, con apego a las normas del Derecho Internacional y la Carta de Naciones Unidas.
-El mundo necesita un sistema internacional multipolar, libre de armas nucleares, solo así podría avanzar la agenda de la paz en solidaridad, cooperación y respeto a la soberanía de los pueblos.
-Las organizaciones pacifistas, progresistas, antiimperialistas, reiteramos la condena a la injerencia en los asuntos internos de las naciones, el reordenamiento imperial del planeta bajo los designios de Estados Unidos y la OTAN que ponen en peligro a la especie humana y nos coloca a las puertas de una nueva confrontación mundial.
-Redoblemos esfuerzos todos por resolver pacíficamente conflictos mundiales, fortalezcamos los mecanismos de integración, la defensa de la paz y los principios de igualdad. Luchar por la paz significa salvar la humanidad.
-Trabajemos en nuestros países por incorporar cada vez más a los jóvenes en las acciones a favor de la paz, futuros continuadores del Movimiento Mundial por la Paz.
-Exhortamos a trabajar de manera articulada las acciones en defensa de la paz mundial con los Movimientos de Solidaridad con Cuba en todos los países.
-Expresamos nuestra solidaridad con el pueblo cubano que continúa su gran esfuerzo por alcanzar una sociedad socialista más justa, próspera, democrática y sostenible; así como transmitimos un saludo fraternal y el reconocimiento al pueblo de Guantánamo y a sus autoridades por la cálida acogida dispensada y las facilidades extendidas para la exitosa culminación del evento.
-Se convoca a darle seguimiento y divulgación a esta declaración, que será un punto de referencia para continuar fortaleciendo el trabajo a favor de la paz y contra las bases militares extranjeras.
Este seminario se desarrolló en el contexto cada vez más complejo caracterizado por el incremento de la agresividad del Capitalismo a nivel global y del injerencismo de todo tipo del imperialismo estadounidense, de la Unión Europea y la OTAN en sus empeños de imponer sus dictados desmedidos, mediante una guerra comunicacional, desatando conflictos bélicos de distinta intensidad en diversas partes del mundo.
El pueblo de Caimanera abrazó a los delegados del VIII Seminario Internacional por la Paz y la Abolición de las Bases Militares Extranjeras con un mar de alegría y resistencia a solo unos metros de la primera Base Militar imperialista en América Latina.
Fotos: Yaimi Ravelo / Irene del Río.
