Gail Walker: Es nuestro deber defender a Cuba y a todos los oprimidos del mundo
Buenas tardes. Mi nombre es Gail Walker y soy la Directora Ejecutiva de IFCO, la Fundación Interreligiosa para la Organización Comunitaria y su ministerio especial, Pastores por la Paz.
Estamos aquí hoy en el espíritu de mi padre, un feroz defensor del evangelio social, un defensor de los marginados y un crítico acérrimo de las políticas que promueven la desigualdad y la injusticia.
Amigos, hoy necesitamos construir la coalición más amplia posible, de personas de fe y personas de conciencia, para luchar por poner fin a la guerra económica draconiana que se libra contra el pueblo cubano.
Todos nosotros, juntos, debemos demostrar que la fe y la justicia pueden unirse para lograr un cambio social real. Debemos actuar como campeones de los derechos de los oprimidos y desafiar los sistemas injustos, y luchar por crear un mundo donde prevalezcan la paz, la justicia y la igualdad. Un mundo donde se señalen las sanciones y los bloqueos que estrangulan a la gente inocente. ¡Donde actuamos audazmente contra las leyes que causan daño!
Hoy, los amigos de Cuba se reúnen aquí en la capital de los Estados Unidos para participar en este fin de semana de actividades que piden el fin del bloqueo de los Estados Unidos a Cuba y exigen que el Presidente Biden retire a Cuba de su lista de Patrocinadores Estatales de Terrorismo.
Hay momentos en que las comunidades de fe están llamadas a tomar posturas proféticas y a levantarse y hablar en contra de la injusticia. Ahora es uno de esos momentos. Pedimos el fin del bloqueo económico del gobierno de los Estados Unidos a Cuba, la eliminación de Cuba de la lista de Patrocinadores Estatales de Terrorismo y la normalización de las relaciones entre los Estados Unidos y Cuba.
Como personas de fe y personas de conciencia no podemos ni vamos a quedarnos sentados sin hacer nada mientras nuestros representantes del gobierno utilizan vergonzosamente nuestro nombre para causar un sufrimiento insoportable a nuestros vecinos cubanos.
Es nuestro deber defender a Cuba y a todos los oprimidos del mundo.
En el legado de mi padre, continuaremos firmes porque el amor no puede ser bloqueado.