Internacionales

Bolivia: un golpe de Estado para la desestabilización y elecciones anticipadas forzadas

Por Fernando Esteche*.

El intento de golpe de Estado, de esta semana en Bolivia ha sacudido no sólo al país sino a todo el continente, causando sorpresa incluso en Eurasia.

Esto se debe a que el gobierno boliviano representa un camino hacia la independencia, la autodeterminación y la industrialización en el llamado patio trasero estadounidense. Muy poco después de su fracaso, surgieron voces en el país que afirmaban que en realidad se había producido un golpe de Estado autoinducido en el país. El reclamo, declarado por primera vez por el propio general golpista, afirmaba que el propio presidente Arce había inducido el acto para aumentar su popularidad.

Hablamos sobre el golpe, su fracaso, las fricciones dentro del frente popular y las razones y dimensiones de la crisis en Bolivia con Hugo Moldiz, ex ministro del Interior durante la presidencia de Evo Morales, experto en relaciones internacionales y con varios libros publicados sobre la Revolución boliviana.

Fernando Esteche. – Tras el motín liderado por el general Zúñiga, varios actores de un sector del MAS (Movimiento al Socialismo, partido político boliviano con mayoría en el parlamento que respaldó la elección del actual presidente Luis Arce) y el propio golpista denunciaron un auto- golpe inducido. ¿Cuál es tu reflexión sobre el tema?

Hugo Moldiz. – Hasta ahora son 17 entre los militares activos, militares pasivos y algunos civiles que han sido detenidos en menos de 24 horas por su participación en el golpe fallido. Las investigaciones conducen hasta ahora a ubicar el origen de planificación del golpe en mayo de este año, y a identificar algunos actores, sobre todo del servicio pasivo, que tuvieron participación en el golpe de 2019 contra Evo Morales y que tienen alguna relación muy activa con la Embajada de los Estados Unidos.

Ahora, hay tres elementos para considerar sobre las declaraciones del general Zúñiga, el ex comandante del ejército, cuando estaba en Plaza Murillo. Uno; pidiendo la liberación de los presos políticos, Jeanine Áñez, Fernando Camacho y otros. Dos; declarando contra la democracia boliviana, de que no había democracia, que había malestar. Tres; señalando que la gente del pueblo estaba en sus casas, que lo que empezaba a moverse hacia la Plaza Murillo no era el pueblo, sino bandas masistas. Cuatro; podríamos decir el quiebre.

Zúñiga revela que el golpe no prosperó porque la policía no se incorporó a pesar de un acuerdo preliminar y que otras unidades motorizadas del ejército no llegaron hacia Plaza Murillo tal como estaba acordado.

Así que hay varios elementos que conducen a desmontar la falsa hipótesis del autogolpe. Lo que pasa es que hay que entender que quienes hoy hablan de autogolpe fueron los primeros, estuvieron más bien horas antes expresando su rechazo al intento de golpe de Estado, su llamado a defender la democracia. Pero cuando se dieron cuenta de que el golpe no iba a triunfar, y que de ahí iba a salir fortalecido Luis Arce, por lo menos en un corto o mediano plazo, dependerá de cómo procesa esta victoria, pues habrán pasado a la hipótesis del autogolpe. de desacreditar y afectar ese nivel de fortaleza con la que ha salido Luis Arce de este intento de golpe.

FE – Podría describir la situación socioeconómica del país, ¿cuáles son los problemas que enfrenta?

HM – entonces factores externos, Bolivia tiene esos factores externos que están influyendo sobre la economía boliviana, a la que se suman los efectos del gobierno de facto, de un año de gobierno de facto donde prácticamente no se hizo inversión pública y luego la disminución drástica de la producción y los volúmenes de exportación de gas a Brasil y a la Argentina que eran la principal fuente de ingresos del país, así que combinando factores externos, factores internos, evidentemente Bolivia debería estar en una crisis económica muy profunda, alta hiperinflación, un gran crecimiento del desempleo, en fin, felizmente eso no ha sucedido.

Inflación controlada, es la primera o la segunda economía en América Latina con menos inflación, el desempleo más bien ha disminuido un poco y los niveles de pobreza también han disminuido en relación incluso hasta antes del 2019 con el golpe de estado, es decir, que los efectos del modelo económico han dado resultados, más bien el modelo económico ha demostrado ser bueno tanto para momentos de bonanza como para momentos de dificultades como las que se están enfrentando. Ahora, en ese contexto dos son los problemas a resolver, uno el tema de la poca disponibilidad de dólares y segundo el desabastecimiento de diésel y gasolina. Esto último está en vías de solución luego de la visita del presidente Arce a Vladimir Putin, un encuentro bilateral por la cual Rusia está colaborando, Rusia como miembro de la OPEP, está colaborando para que Bolivia pueda resolver el tema de la gasolina y el diésel.

El tema de los dólares es más complicado, hay un proceso de especulación, la agroindustria que creció mucho durante el gobierno de Evo, no meten ni saca dólares a través del Banco Central y ciertamente pues eso en momentos en que había mucha plata no se notaba, pero en momentos en que hay una disminución de los ingresos por la exportación de gas ya se nota mucho, así que ahí hay un tema a resolver más la especulación que está haciendo la banca y la agroindustria que por fuera están prácticamente subastando los dólares que hay en el país, están subastando al mejor postor en una clara expresión no sólo de entre comillas liberalización económica sino que además de eso de especulación y lo hacen fuera del país.

FE – La asonada de Zuñiga pretende naturalizar cierta inestabilidad institucional, esta inestabilidad ¿cómo se manifiesta más allá de la asonada, en los distintos poderes y en la gobernabilidad?

HM – Bolivia está enfrentando unas dificultades económicas que creo que es demasiado prematuro y políticamente intencionado señalar que es una crisis, por lo menos entendiendo crisis como algo estructural. Tiene dificultades derivadas de causas externas, internas en las causas externas, y está clarísimo los efectos de la pospandemia que en mayor o menor medida han golpeado las economías del mundo, particularmente América Latina, crecimiento del desempleo, altas tarifas.

Coinciden en objetivos, sobre todo entre la facción Evista y la facción de ultraderecha liderada por Fernando Camacho, que está en la cárcel por el golpe del 2019, y entonces hay una construcción política de que en el país hay una crisis estatal o por lo menos una crisis de institucionalidad que tiene que ver mucho con el tema del órgano judicial, otros países llamado poder judicial, e incluso del órgano electoral y los problemas que tiene el vicepresidente de conducir la asamblea legislativa plurinacional, porque por constitución en Bolivia el vicepresidente es el presidente nato de la Asamblea Legislativa Plurinacional. Entonces, y claro, y esto se suma al tema de las Fuerzas Armadas, por lo tanto, la hipótesis es que Bolivia está trabajando en una crisis institucional cada vez más profunda y obviamente que la salida es de carácter político, lo que no se atreven a decir de manera explícita y sistemática, aunque han soltado por ahí algunas ideas, y que esta salida política implica el adelanto de elecciones, que ya no sean 2025, sino sean este año.

Así también hay que entender un poco lo que ha sucedido con el intento de golpe, que es una de las formas que se están utilizando para desestabilizar al gobierno legal y legítimamente constituido. Señalar que no se ha renovado el órgano judicial mediante voto popular, como establece la Constitución boliviana. responsabilidad del gobierno, que es un poco la narrativa que se vende dentro y fuera del país, sino por responsabilidad legislativa plurinacional que fue incapaz de ponerse de acuerdo, de consensar una ley de convocatoria y de elecciones para el año pasado, pues estos tenían que haber sido cambiados el 31 de diciembre y como eso no sucedió y como no puede haber un vacío institucional sobre todo en el campo de la justicia, en realidad en ninguno, el Tribunal Constitucional emitió un fallo o una resolución judicial por la cual todos los miembros del órgano judicial, incluido ellos mismos, se mantenían en sus funciones hasta que haya elecciones, elecciones que deberían ser este año, eso en cuanto al órgano judicial que es un poco de lo que más se habla.

En síntesis, esta asonada golpista estába siendo planteada por sectores de la derecha clásica, pero también de lo que se llama esta nueva derecha, o que políticamente se ponen en posiciones de derecha. como una expresión de una crisis, o como de una profunda crisis institucional.

 

FE- Con las acusaciones actuales pareciera ser muy dificultoso pensar en una unidad de los sectores populares expresados a través de Evo y Lucho… ¿es posible construir esa unidad? ¿Cuáles serían los caminos posibles? Esa Unidad ¿resolvería la amenaza electoral de las propuestas neocolonialistas?

HM –Las posibilidades de la unidad están cada vez más lejanas. Hay algunos puentes que se están estableciendo entre ambas facciones, pero todo indica que desmontar las diferencias entre una facción y otra, sobre todo con la facción de Evo, que ha empezado no solamente a desacreditar al gobierno del presidente Luis Arce, sino incluso a descalificar a los dirigentes de las organizaciones fundadoras del MAS, pues eso ha ensanchado más bien las diferencias y las ha profundizado. Sin embargo, hay dos elementos centrales que podrían dar lugar a un reencuentro en condiciones… actuales, no es que se van a caer a besos ni a abrazos, pero que pueden actuar juntas en caras a las elecciones de 2025 y con eso abrir la posibilidad de continuar con el proceso de cambio y continuar con la profundización del Estado plurinacional y el camino hacia la industrialización.

Estas dos condiciones, una es resolver las diferencias en el marco del Estatuto del MAS, eso implica que un Congreso debe ser convocado por la dirección política, que hasta ahora ante el organismo electoral es la de Evo Morales, junto y en consenso, como establece el Estatuto del MAS, en consenso con las organizaciones fundadoras, tres más importantes del país, Campesinas Interculturales y Bartolinas, que en consenso deben convocar a un Congreso, un Congreso de unidad. Eso pasa porque Evo reconozca que algunas organizaciones que él ha creado, organizaciones paralelas, no tienen ni legalidad, ni representatividad, ni legitimidad, y que por lo tanto debe estar con las tres fundadoras, organizaciones fundadoras, la Central Obrera Boliviana, que están respaldando al presidente Luis Arce. Y la segunda es una elección democrática de los candidatos. No imponerle idea o por las buenas o por las malas, sino que, de acuerdo a encuestas, o a una consulta nacional abierta o cerrada, o una combinación de ambas cosas, se pueda elegir al candidato que mejor represente y que mejores posibilidades tenga para las próximas elecciones generales.

FE – Luego de las declaraciones de la encargada de negocios norteamericana en el país, y del regreso de Arce de su viaje a Rusia, ¿podemos pensar que la posibilidad de un afianzamiento del perfil autonomista de Bolivia aceleró planes destituyentes de parte del Comando Sur?

HM –Evidentemente, Bolivia tiene recursos, litio, las reservas más grandes del mundo, y tierras raras que son de interés de los Estados Unidos, además del interés que representa su ubicación geográfica, estar en el corazón, básicamente, de Sudamérica. Y tener movimientos sociales que, aunque están golpeados desde ya antes del golpe del 2019, debido a una suerte de domesticación que se hizo desde el Estado, a pesar de eso, siguen siendo sectores sociales muy politizados y fundamentales para cualquier proceso político emancipador.

Entonces, Estados Unidos tiene concentrada su mirada en el litio, en las tierras raras y en los recursos de Bolivia y esto se ha profundizado en los últimos años. Lo que sí incomoda a Estados Unidos es que, a diferencia incluso de lo que pasó durante el gobierno de Evo Morales, Luis Arce ha estrechado relaciones con China, con Rusia y con Irán. Es algo que ciertamente le incomoda bastante a Estados Unidos y, obviamente, al Comando Sur. Y sí, hay que entender que esos planes destituyentes de Estados Unidos se han acelerado por la posición política demostrada por el gobierno de Luis Arce a través de su política exterior.

FE – ¿Podes enumerar y describir algunos de los distintos acuerdos que hubo en el congreso de sectores del MAS con la oposición golpista y que atacaron la gobernabilidad y la economía? (bloquearon acuerdos comerciales o de inversiones)

HM – En noviembre del año pasado se produjo una renovación de las directivas de diputados y de senadores. La facción evista llegó a un acuerdo con Creemos y con Comunidad Ciudadana, es decir, con la ultraderecha y con el partido del señor Mesa, que es de derecha, que fueron los dos partidos que estuvieron en el golpe contra Evo Morales. Y en los nueve puntos establecían uno que es importantísimo, que es la liberación, el debido proceso a los presos políticos, es decir, lo que hacía el senador Andrónico con ese acuerdo, acuerdo sacramentado por Evo Morales, era reconocer que en Bolivia hay presos políticos. que es un concepto con el que Estados Unidos, la OEA y otros hacen injerencias hacia gobiernos revolucionarios, progresistas y de izquierda y convierten a los delincuentes comunes en presos políticos como una bandera de agitación, movilización y de presión internacional. Este acuerdo se ha traducido en un bloqueo económico hasta ahora al gobierno del presidente Arce. Hay muchas leyes económicas, entre ellas créditos, que tienen que ser aprobados por la Asamblea Legislativa y esto ha sido bloqueado.

Se han aprobado algunas leyes producto de sectores que se iban a beneficiar con su implementación, por ejemplo construcción entre carreteras entre una provincia y otra, o entre un departamento y otro, pero luego de varios meses, con lo cual evidentemente apuntaban, no sin razón, a que fuera el ejecutivo el que pagara los platos rotos, porque la gente pensaba que era el gobierno, o piensa, que es el que no quiere ejecutar tal o cual proyecto, cuando en realidad el mecanismo de financiamiento está prácticamente congelado y bloqueado en la Asamblea Legislativa Plurinacional.

Luego, durante varios meses, se guardaron en los archivos de la Asamblea Legislativa la ley de adhesión al MERCOSUR. No solo que se guardaron, sino que además de eso, primero lo rechazaron y recién hace no más de dos semanas se aprobaron, se aprobó la ley de adhesión al Mercosur. Entonces, hay una coordinación.

Y para el tema de las elecciones judiciales, trataron de imponer una ley que se lo impidió la bancada que trabaja con Arce, la llamada bancada arcista, básicamente para lotear de nuevo a los magistrados y locales del órgano judicial. Entonces, hay una acción conjunta, incluso una similitud de la narrativa que se utiliza contra el gobierno, gobierno corrupto, gobierno protector del narcotráfico, gobierno que atenta contra la propiedad privada. Imagínense, es decir, el movimiento al socialismo como parte de una narrativa, de una narrativa propietarista privada que se usa contra el gobierno de Luis Arce.

Yo quiero cerrar señalando cuatro o cinco aspectos que a mi juicio fueron fundamentales para derrotar el intento golpista, además de lo señalado en el primer punto.

Primero; la rápida movilización del pueblo para defender a su gobierno legal y legítimamente constituido, no sólo en La Paz, donde la gente se empezó a volcar hacia la plaza Murillo, sino además en varias partes del país donde se hicieron mitines, concentraciones y marchas de respaldo al presidente y de defensa a la democracia.

Segundo; la actitud de Luis Arce, que a pesar de que incluso le ofrecieron un helicóptero para salir de Casa Grande, que es el palacio de gobierno en Bolivia, él decidió quedarse y enfrentar a los golpistas. Bajó, incluso, hasta la puerta del Palacio Quemado, contiguo a la Casa Grande, para ordenar al general sublevado que retire a las tropas; éste le dijo que no lo iba a hacer. No se amilanó en ningún momento y ciertamente el hecho de que no se haya ido, el hecho de que no haya salido y el hecho de que lo que menos haya pensado es en renunciar, evidentemente es un valor y es una fuerza moral y política que expone el presidente Arce.

Tercero; la rápida reacción de la comunidad internacional, de gobiernos progresistas, de izquierda, incluso de otros que no son ni lo uno ni lo otro, haciendo conocer sus plenos respaldos a la democracia y al gobierno legal y legítimamente constituido, y, a ver, bueno, las organizaciones sociales que se accionaron también rápidamente convocando un bloqueo nacional de caminos y una huelga general indefinida hasta que se vaya el golpista en caso de que se hubiera consumado el golpe. En el caso de que hubieran tomado el poder político por la fuerza.

 

 

(*) Dirigente político, profesor universitario y director general de PIA Global

Este artículo fue elaborado especialmente para ser publicado en ingles en el portal UWI Data

Fuente: Noticias Pia

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