Fascistas por los caminos del mundo (Parte I)
Por Raúl Antonio Capote */ Colaboración Especial
Resumen Latinoamericano
En el año 2021, representantes de partidos políticos y de organizaciones no gubernamentales, académicos, exmilitares y líderes religiosos de diversas regiones de América Latina, realizaron una reunión virtual con el objetivo de crear el ultraderechista Frente Hemisférico por la Libertad (FHL).
La reunión, presidida por el exsenador y actual presidente de la Comisión Mexicana de Derechos Humanos, René Bolio y el diputado costarricense Dragos Dolanescu, tuvo como propósito central coordinar las “fuerzas anticomunistas del Continente y a los grupos de pro libertad y democracia”, para enfrentar con “firmeza a las nuevas corrientes “totalitarias”, “antidemocráticas” y “neo populistas”.
El Acta de Constitución de la organización planteó la necesidad de enfrentar a los “regímenes” comunistas de Cuba, Nicaragua y Venezuela, aliados de China, Rusia e Irán y señalan como evidencia de esa alianza el Foro de Sao Pablo, creado según ellos, para desestabilizar a los gobiernos de la región.
Resultó electo como secretario general Dragos Dolanescu y el contrarrevolucionario cubano Orlando Gutiérrez Boronat, líder del denominado Directorio Democrático Cubano (DDC), terrorista de vieja data, como coordinador.
Entre paréntesis, el DDC recibió, del 2006 al 2019, más de 6 millones de dólares del Departamento de Estado y la USAID, según Tracey Eaton, periodista estadounidense que desde 2010 investiga sobre programas del gobierno de Estados Unidos relacionados con Cuba.
Boronat ha militado en las organizaciones terroristas Abdala, Frente de Liberación Nacional Cubano, Organización para la Liberación de Cuba y Jóvenes de la Estrella, esta última autora de la colocación de decenas de bombas en Miami. Así mismo, está vinculado con los servicios de inteligencia estadounidenses.
Este contrarrevolucionario aconsejó aplicar contra Cuba la técnica criminal del Mayor Roberto D’Abuisson, el jefe de los Escuadrones de la Muerte salvadoreños, a quien considera su ídolo, “Hay que seguirlo a él para acabar con Cuba”, sugirió.
Una de las tareas en las que trabaja el FHL, es la contribuir a extender el esquema subversivo diseñado para Cuba por el Gobierno de EE. UU, Bolivia, víctima reciente de un intento de golpe de Estado, encabeza la lista de naciones donde, según la Casa Blanca, debe aplicarse el patrón subversivo.
Una ONG argentina llamada Cultura Democrática sirve de plataforma para su implementación. Así lo prueba un documento de esa organización titulado “Apoyo a la Sociedad Civil cubana como método de presión a gobiernos totalitarios. Su posible aplicación a Bolivia”, el cual pone de relieve su papel en esta trama.
El documento señala que “a partir del análisis del enfoque político de EE. UU. en el fortalecimiento de la democracia y el uso legítimo de los agentes de cambio en la sociedad cubana, donde la cultura democrática juega un papel significativo en el apoyo a la oposición cubana, proponemos una visión similar para su aplicación en Bolivia”.
Tal engendro subversivo describe con detalles la manera en que, desde la alta dirección política estadounidense, se organiza y promueve, contra Cuba, el sistema de medidas financieras y económicas del bloqueo, la formación de agentes de cambio, el trabajo contra la juventud, etc…, y lo útil que sería aplicar esta experiencia contra otros países de la región.
Por otro lado, menciona a los implicados directos, o sea, a algunos de los operadores de “experiencia”, como Orlando Gutiérrez y Micaela Hierro, esta última fundadora y presidenta de la asociación Cultura Democrática.
La relación de este proyecto con el intento de derribar por la fuerza, al Gobierno de Luis Arce en Bolivia, las acciones violentas contra el proceso electoral en Venezuela y otras acciones similares ocurridas en los últimos años, que involucran a los mismos operadores que trabajan contra Cuba, puede que a algunos les parezca casual; sin embargo, no podemos pasar por alto que la extrema derecha Continental ha creado un frente único, para actuar contra los países a los que considera enemigos de la “democracia”
El FHL, además, ha establecido alianzas con grupos de extrema derecha en muchas regiones del mundo, con “militantes anticomunistas” estadounidenses, taiwaneses, ucranianos, de los países bálticos, noruegos, suecos y finlandeses.
Miembros de los grupos de ultraderecha latinoamericanos combaten hoy en las filas de las legiones ucranazis, junto a sus iguales de otras partes del mundo, llevan con orgullo los símbolos fascistas y proclaman, aunque parezca inaudito, el triunfo de la raza aria.
La Internacional fascista se integra y fortalece delante de la mirada cómplice de muchos gobiernos del mundo y el beneplácito de las grandes transnacionales que ven en su regreso, amplias posibilidades de ganancias.
(*) Escritor, profesor, investigador y periodista cubano. Es autor de “Juego de Iluminaciones”, “El caballero ilustrado”, “El adversario”, “Enemigo” y “La guerra que se nos hace”.