A 26 años del encarcelamiento de Gerardo, Ramón, Antonio, Fernando y René, los Cinco Héroes antiterroristas cubanos
Por Laura V. Mor / Resumen Latinoamericano – Cuba.
Hace 26 años los conocidos mundialmente como los Cinco héroes cubanos fueron detenidos injustamente por el FBI por defender la soberanía de Cuba y evitar nuevos ataques terroristas planeados desde Estados Unidos.
El 12 de septiembre de 1998, Gerardo Hernández Nordelo, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González Llort y René González Sehwerert fueron detenidos en Estados Unidos, acusados de conspiración para cometer espionaje.
Los Cinco habían sido enviados a Estados Unidos para monitorear las actividades de organizaciones terroristas radicadas en Miami, las cuáles llevaban décadas perpetrando atentados violentos contra Cuba, que incluyeron el sabotaje de aviones civiles y ataques contra instalaciones turísticas. Esas organizaciones, como la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA), el Consejo por la Libertad de Cuba (CLC), Hermanos al Rescate, Movimiento Democracia y Alpha-66 son algunas de las que han emprendido a lo largo de la historia de la Revolución Cubana actos terroristas contra el pueblo cubano.
La detención de los cinco cubanos se produjo casi tres meses después de la visita a La Habana de una delegación estadounidense a la cual se le entregó material con abundante información, documental y testimonial, acerca de planes terroristas organizados contra Cuba, financiados por la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), radicada en Miami (organización responsable de servicios a la contrarrevolución del terrorista Luis Posada Carriles, protagonista de hechos como la voladura en pleno vuelo de un avión con 73 personas a bordo frente a las costas de Barbados en 1976).
El material que Cuba les entregó incluía investigaciones detalladas actos terroristas planeados entre 1990 y 1998, pruebas contundentes como la fotografía de armamentos y explosivos; así como 51 páginas del listado del presupuesto de la FNCA destinado a varios grupos para actuar dentro del país. En ese entonces, el FBI recibió los expedientes de 40 terroristas de origen cubano (la mayoría de ellos residentes en Miami) junto con los datos para localizarlos; así como grabaciones de conversaciones telefónicas con Posada Carriles donde se daban instrucciones precisas para cometer los sabotajes.
La delegación estadounidense se llevó consigo también muestras de las bombas desactivadas en el Hotel Meliá Cohiba en abril de 1997 y en un ómnibus de turistas en octubre de ese mismo año; así como el artefacto explosivo confiscado a dos guatemaltecos en marzo de 1998 y las grabaciones de sus declaraciones, que detallaban sus vínculos directos con Luis Posada Carriles. Ninguna de esas evidencias fueron utilizadas por la parte estadounidense para arrestar a estos criminales o abrir alguna investigación al respecto; sin embargo, los Cinco fueron apresados, permaneciendo sin fianza durante 33 meses y confinados en celdas destinadas a prisioneros violentos durante 17 meses.
Luego de la acusación (y aunque según consta en el acta habían penetrado pacíficamente y sin armas en grupos terroristas anticubanos con el objetivo de dar a conocer sus intenciones criminales), fueron condenaron en un prolongado y amañado juicio, y consiguientemente declarados culpables.
Las condenas recibidas por los Cinco oscilaron entre 15 años y dos cadenas perpetuas, sin que se pudiera comprobar que representaran un peligro para la seguridad nacional de Estados Unidos.
¿Cuáles fueron los cargos y sentencias?
Gerardo Hernández fue sentenciado a dos cadenas perpetuas por conspiración para cometer asesinato en primer grado y conspiración por espionaje, así como 15 años por cargos de conspiración para cometer delitos contra Estados Unidos, documentación falsa y agente extranjero.
Ramón Labañino fue condenado a cadena perpetua por conspiración para cometer espionaje, a lo que se sumaron 18 años por conspiración para cometer delitos contra Estados Unidos, documentación falsa y agente extranjero.
Antonio Guerrero fue sentenciado a cadena perpetua por conspiración para cometer espionaje, así como 10 años por conspiración para cometer delitos contra Estados Unidos y agente extranjero.
Fernando González Llort fue sentenciado a 19 años de prisión por conspiración por cometer delitos contra Estados Unidos, documentación falsa y agente extranjero.
René González Sehwerert estuvo privado de libertad durante 15 años por conspiración para cometer delitos contra Estados Unidos y agente extranjero.
La promesa del “Volverán”
El injusto encarcelamiento de los Cinco dio origen a una amplia campaña de solidaridad a nivel mundial, exigiendo su libertad. Organizaciones sociales, partidos políticos y movimientos de solidaridad en América Latina, Europa, Asia, África e incluso en Estados Unidos, se unieron en una sola voz de denuncia ante la injusticia. Personalidades, académicos, religiosos, juristas, parlamentarios, artistas, grupos de amigos solidarios con Cuba y hasta mandatarios de diferentes países, unieron sus voces para denunciar una y otra vez este hecho.
Innumerables campañas y marchas se realizaron alrededor del mundo cada 12 de septiembre. Miles de personas marcharon con sus fotos exigiendo el fin de la injusticia y denunciando las atrocidades cometidas por Estados Unidos en materia de terrorismo e injerencia hacia Estados libres y soberanos. Cientos de cartas fueron presentadas ante las Embajadas estadounidenses en los diferentes países, acompañadas de firmas de importantes personalidades del mundo de la política y la cultura.
“Solo les digo una cosa: volverán”, había enunciado Fidel en aquel histórico acto del Primero de Mayo de 2001. El 17 de diciembre de 2014, esa promesa se hizo realidad: Gerardo Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero fueron liberados y regresaban a Cuba, recibidos con los brazos abiertos por Raúl y la algarabía del pueblo cubano, que ya los consideraba héroes.
Gracias a la incesante lucha del líder histórico de la Revolución Cubana, junto al pueblo cubano y a la presión internacional, los últimos tres de los Cinco Héroes que seguían en prisión fueron liberados como parte de un acuerdo entre los Gobiernos de Cuba y Estados Unidos.
Con anterioridad, en 2013, René solicitó modificar las condiciones de su libertad supervisada y la permanencia en Cuba fue aceptada a cambio de renunciar a su ciudadanía estadounidense. Fernando, tras cumplir una condena de 17 años y nueve meses había sido liberado el 27 de febrero de 2014.
En enero de 2015, fueron condecorados por Raúl Castro con el título de Héroes de la República de Cuba, en reconocimiento a su sacrificio y lealtad inquebrantable hacia los ideales revolucionarios.
Hoy se cumplen 26 años de su encarcelamiento, un hecho que sigue siendo recordado con respeto y admiración en Cuba y alrededor del mundo; ya que representan en sí mismos un símbolo de resistencia, dignidad y un compromiso inclaudicable, aún ante las situaciones duras que han vivido durante los años de cautiverio.
Las sucesivas administraciones estadounidenses por su parte, continúan financiando planes subversivos contra Cuba por medio del uso de redes y programas informáticos para alterar el orden constitucional y generar subversión y desestabilización interna.
Fotos: Archivo ACN / Ismael Francisco / Cubadebate
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