BRICS+ puerta hacia un mundo mejor
Por Hedelberto López Blanch */ Colaboración Especial
Resumen Latinoamericano
La XVI Cumbre de los BRICS+ celebrada del 22 al 24 de octubre en Kazán, Rusia, ensanchó las puertas hacia un nuevo mundo donde las naciones integrantes pueden compartir intereses, comercio y desarrollo de sus pueblos en un ambiente mucho más favorable que el actual.
La Cumbre acaparó la atención de millones de personas del planeta que observaron la enorme posibilidad que ofrecen los BRICS+ para romper con el unipolarismo de Estados Unidos, en aras de refrendar un nuevo orden mundial alejado de la hegemonía, sanciones e imposiciones de las potencias Occidentales que ha caracterizado el deambular del planeta en los últimos decenios.
Entre los puntos relevantes de la Declaración Final del cónclave aparecen: un multilateralismo y orden mundial más justo; cooperación en materia de seguridad mundial y regional; necesidad de reformar la arquitectura financiera internacional; apoyo a la reforma integral de la ONU.
A la par se analizaron varias propuestas como una plataforma de inversión para los países del Sur Global y del Este; mecanismo para resolver disputas comerciales; una bolsa de cereales BRICS; plataforma para metales preciosos y diamantes, entre otros aspectos para que los países obtengan una mejor soberanía sin dependencias externas.
En una de sus intervenciones ante los asistentes al cónclave, el presidente Vladimir Putin significó que todos los países que integran el BRICS abogan por la igualdad, por la buena vecindad y el respeto mutuo, el establecimiento de buena vecindad, por la prosperidad y el bienestar común, muestran responsabilidad por el futuro del mundo no con palabras sino con hechos, tienen un impacto verdaderamente positivo en el desarrollo de la seguridad y estabilidad mundial y contribuyen significativamente a la solución de los graves problemas regionales. Esta es la esencia de la estrategia del rumbo del BRICS en la arena mundial que responde a las aspiraciones de la mayor parte de la comunidad internacional.
En la reunión se reveló que el Grupo, integrado actualmente por 10 miembros y con la nueva aprobación de otros 13 países como socios, podrá establecer mecanismos para resolver disputas comerciales y crear una nueva plataforma de inversión como poderosa herramienta de apoyo a las economías nacionales.
También se intensificará la cooperación en tecnología, educación, desarrollo eficiente de los recursos, el comercio y la logística, las finanzas y los seguros así como multiplicará la inversión de capital.
Los líderes analizaron el impulso que está teniendo la utilización de monedas nacionales en las transacciones entre miembros y socios comerciales de acuerdo con la Iniciativa de Pagos Transfronterizos conocida por las siglas BCBPI.
Además se proyectaron por estudiar la creación del sistema transfronterizo independiente de pagos y depósitos, o sea, el BRICS Clear, que complementaría la infraestructura financiera actual del Grupo, basado en un intercambio de información entre bancos centrales, independientes de instrumentos internacionales que imponen restricciones por razones políticas y violan los principios de la economía mundial.
Este mecanismo incrementaría la posibilidad de disminuir considerablemente el uso del dólar en los intercambios dentro del BRICS y a la par limitaría el poder económico que conserva Estados Unidos en el comercio internacional.
Y es que la compleja situación política se incrementa por el hecho de que el billete verde se utiliza como arma para cambiar las condiciones de vida de la población lo que también afecta al sistema internacional, es decir, su credibilidad e integralidad.
Otro tema analizado en profundidad resultó el impacto negativo que provocan las sanciones ilegales que imponen Washington y sus aliados occidentales en la economía y comercio globales.
En la Declaración Final se expresa que ese tipo de medidas socavan la Carta de Naciones Unidas, el sistema comercial multilateral, el desarrollo sostenible y los acuerdos medioambientales y son contrarias a las normas de la Organización Mundial del Comercio.
Las sanciones ilegales, agrega el texto, impactan negativamente en el crecimiento económico, la energía, la salud y la seguridad alimentaria, lo que lleva a un empeoramiento de la pobreza y los problemas ambientales.
En el plenario los jefes de delegaciones se pronunciaron sobre la situación y la estructura actual de las Naciones Unidas y señalaron que se debe adaptar a la realidad del siglo XXI por lo que se hace necesario ampliar con países de Asia, África y América Latina la representación de estos en el Consejo de Seguridad y en otros órganos.
Sin dejar de reconocer la importancia que han tenido varias organizaciones internacionales y regionales como el Movimiento de Países No Alineados, la Asean, el G-77, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, la Comunidad de Desarrollo de África Meridional (SADC) entre otros muchos, en esta ocasión, los BRICS reúnen a grandes potencias económicas y militares junto a naciones en desarrollo, todos del Sur Global que están dando un vuelco a las amarras que Occidente ha mantenido en el orbe desde tiempos coloniales, neocoloniales, capitalistas, y neoliberales.
Los BRICS+ abren esa puerta hacia un mundo mejor mientras Estados Unidos y Occidente observan atónitos cómo se va diluyendo, poco a poco, el sistema unipolar.
(*) Periodista cubano. Escribe para el diario Juventud Rebelde y el semanario Opciones. Es el autor de “La Emigración cubana en Estados Unidos”, “Historias Secretas de Médicos Cubanos en África” y “Miami, dinero sucio”, entre otros.
Imagen: Adán Iglesias Toledo