Presidente de Bolivia denuncia plan de boicot contra estabilidad económica de la nación
El presidente de Bolivia, Luis Arce, denunció que su Gobierno se encuentra en medio de una guerra económica por los precios, con un contexto político marcado por los ataques de la troika que integran los exmandatarios Evo Morales y Carlos Mesa y el líder golpista Fernando Camacho, a través de los cuales se intenta debilitar y acortar su gestión.
“Intentan meter a la cabeza del boliviano que la canasta familiar sube, suben productos muy puntuales como el arroz, aceite, pollo, ¿quiénes producen eso? ¿quiénes especulan con los precios? En el fondo, esta guerra económica tiene un trasfondo político”, expresó Arce durante el ampliado de emergencia de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), desarrollado en la ciudad de Sucre.En su discurso, el Presidente boliviano detalló las dificultades a las que se enfrentó su Gabinete después de comenzar el proceso de recuperación económica en la nación.
Asimismo, hizo referencia a la guerra de precios especulativos de ciertos productos como el arroz, el aceite y el pollo, aunque el costo de los alimentos de producción agrícola que ofrecen los productores de pequeña escala no aumenta.El mandatario indicó que se produjo un ataque por parte de una troika que integran Camacho, Mesa y Morales, con el objetivo de debilitar al Gobierno, y mediante la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), se inició el “estrangulamiento” del financiamiento externo y proyectos beneficiosos para la población.“Se empezó a alargar los plazos para la aprobación de leyes, en un claro boicot de gestión y estrangulamiento que venía desde la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde hubo una troika, un matrimonio de tres, entre Camacho, Mesa y Evo Morales, lo decimos con claridad, esa troika apuntaba a estrangular, a debilitar, a desgastar al Gobierno nacional”, subrayó.
De acuerdo con el Presidente boliviano, la troika pretendía provocar desorden para adelantar las elecciones generales y permitir postularse a políticos que no pueden en estos momentos.Arce afirmó que el ataque contra el Gobierno también apuntó a las entidades sociales, a las que se intentó desgastar por “intereses personales”.Por otra parte, rememoró que el 26 de junio de 2024, el Gobierno se enfrentó a un intento de golpe de Estado fracasado por un grupo militar.Sin embargo, resaltó que el Gobierno implementó soluciones a desafíos estructurales del país, incluyendo la disminución de las reservas de gas.
De igual manera, “hemos hecho trabajos, desde el primer momento hemos invertido en exploración, que fue el error de no cuidar la nacionalización, porque no solo es nacionalizar, implicaba invertir en exploración para garantizar la producción de gas y tener ingresos, y garantizar una parte del combustible”, añadió.Resaltó que con el objetivo de reducir progresivamente la dependencia de la importación de combustibles, el Gobierno estableció en Santa Cruz una planta de biodiésel ya en funcionamiento y una segunda planta en El Alto que comenzará a operar en los meses venideros.
Igualmente, afirmó que durante su mandato comenzó el proceso de industrialización que disminuirá la dependencia de las importaciones en la nación.El pueblo de Bolivia vivirá las elecciones de Gobierno y Asamblea Legislativa en el próximo mes de agosto y la derecha basa su fracaso en el modelo económico actual.
Fuente: teleSUR
Foto: @LuchoXBolivia/X
