Marco Rubio debe mirar hacia su país y no a Cuba.

Por Arthur González

El actual secretario de Estado, nacido en Estados Unidos después que sus padres salieron de Cuba huyendo de los crímenes y desmanes que cometía la tiranía de Fulgencio Batista, hizo carrera política alineándose a los batistianos que se asentaron en la Florida después de 1959, muchos de ellos asesinos, torturadores y ladrones que conformaron los grupos terroristas organizados por la CIA para intentar derrocar a la Revolución cubana, algo demostrado en un documento  desclasificado elaborado por el Coronel Jack Hawkins, jefe de la sección de personal paramilitar en el centro de operaciones de la Fuerza de Tarea de la CIA, en la denominada como “Operación Cubana”, el que afirma sin pudor:

“Durante el período comprendido entre octubre de 1960 y el 15 de abril de 1961, se perpetraron alrededor de 110 atentados dinamiteros contra objetivos políticos y económicos, se colocaron más de 200 bombas. Se descarrilaron 6 trenes, se dejó inactiva la refinería de Santiago de Cuba durante una semana, como resultado de un ataque sorpresivo desde el mar.  Se provocaron más de 150 incendios contra centros estatales y privados, incluyendo 21 viviendas de comunistas y 800 incendios en plantaciones de caña” […] “Solamente desde el 28 de septiembre de 1960 hasta el mes de abril de 1961, la CIA introdujo ilegalmente en Cuba 75 toneladas de explosivos y armamentos, mediante 30 misiones aéreas, más 46,5 toneladas en 33 misiones de infiltración marítima, para abastecer a grupos urbanos y bandas de alzados en zonas montañosas”.

Esto prueba quien es el verdadero país patrocinador del terrorismo, que no es precisamente Cuba como quieren los Estados Unidos hacerle creer al mundo.

Si Marco Rubio mirara bien para dónde enfocar sus ojos, se daría cuenta la compleja situación que vive su país en el tema de los médicos y el personal de la salud, y dejaría de perseguir la colaboración internacionalista de los médicos cubanos que solo salvan vidas, en países que carecen de médicos, enfermeros y técnicos de la salud. Por supuesto que a este señor no le interesa que la gente muera por falta de atención médica, pues su acoso a la colaboración cubana responde al intento de cortar la entrada de dinero a la Isla, como parte del incremento de la guerra económica impuesta desde 1960 por el gobierno yanqui.

Entre las problemáticas que vería Rubio, está el incremento de la salida de médicos estadounidenses hacia Canadá para escapar de la administración del dictador delincuente Donald Trump, debido al ambiente de violencia y crueldad que se vive en Estados Unidos. Uno de los profesionales que ahora trabaja en Canadá afirmó a la prensa que en estos momentos Estado Unidos ha retrocedido y pisotea a las personas más débiles y vulnerables. Por ese motivo, hay un creciente interés del personal de la salud, especialmente médicos, en obtener la licencia en Canadá, donde funcionarios canadienses encargados de la concesión de licencias y empresas de contratación, afirman haber autorizado a un número mayor de médicos a ejercer su profesión, algo que se incrementa mensualmente.

El Consejo Médico de Canadá confirmó mediante un comunicado: “El número de médicos estadounidenses que han creado cuentas en physiciansapply.ca, el primer paso para obtener la licencia en Canadá, aumentó más del 750% en los últimos siete meses, en comparación con el mismo período del año pasado, número que hoy pasó de 71 solicitantes a 615, desde la llegada del dictador Trump a la Casa Blanca.

Esta situación ha sido corroborada por las organizaciones responsables de conceder las licencias médicas en las provincias más pobladas de Canadá, las que aseguran que los médicos argumentan que se mudan a Canadá por la situación que confrontan los estadounidenses, debido a las políticas impuestas por el actual dictador. John Philpott, CEO de CanAm Physician Recruiting, quien recluta médicos para Canadá, confesó a la prensa que los médicos que huyen de Trump, lo primero que dicen al llegar es: ‘Tengo que irme de mi país, pues ya no es lo que era y muchos hasta se avergüenzan de decir que son estadounidenses”.

A diferencia de los Estados Unidos, en Canadá existe un sistema de salud universal financiado con fondos públicos y resulta una buena opción para los médicos formados en Estados Unidos, de trabajar con un sistema de salud mucho más humano que el de su país.

Aunque existen diferencias en los niveles de formación médica entre los dos países, las provincias canadienses han flexibilizado algunas normas para conceder licencias a los médicos graduados en Estados Unidos.

Las políticas aplicadas por el régimen de Donald Trump afectan la economía de los estadounidenses, debido a la guerra irracional que ha impuesto con el incremento de los aranceles, incluido a Canadá a pesar de tener un tratado de libre      comercio, situación que amenaza la soberanía de otros estados, incluso la de sus aliados.

Trump ordenó desviar fondos destinados a enfrentar pandemias, a la atención de la salud en casos de afirmación de género, demoniza el uso de flúor y apoyó los recortes al seguro Medicaid.

Ante la fuga de médicos de Estados Unidos hacia Canadá, Philpott, fundador en la década de 1990 de CanAm Physician Recruiting, dijo: “El movimiento transfronterizo de médicos estadounidenses y canadienses ha fluctuado durante décadas de acuerdo a las circunstancias políticas y económicas, pero el actual interés por radicarse en Canadá nunca había sido tan fuerte como ahora”.

Para tener una idea más clara de la situación, vale señal que el registro de médicos estadounidense en Canadá aumentó el 65% entre enero y abril del 2025, alcanzando la cifra de 15 solicitudes diarias, incluso Rohini Patel, reclutadora de CanAm y médica, expuso que muchos de los solicitantes están dispuestos a aceptar salarios más bajos con tal de mudarse rápidamente.

Igualmente, el Colegio de Médicos y Cirujanos de Ontario, responsable de otorgar licencias en la provincia más poblada de Canadá, dijo en un comunicado que registró a 116 médicos formados en Estados Unidos en el primer trimestre de 2025, un aumento de al menos 50% con respecto a los dos trimestres anteriores.

British Columbia, otra de las provincias canadienses de mayor población, también ha tenido este año 2025, un incremento de solicitudes de licencia de médicos de Estados Unidos, según reportes del Colegio de Médicos y Cirujanos que aprobó, 28 médicos desde el mes de febrero de este año, y todos argumentaron que es debido a la política del dictador Trump.

Ante esta situación con los médicos, una pequeña empresa que ayuda a los médicos estadounidenses a ejercer la medicina en otros países, nombrada Hippocratic Adventures, cuya cofundadora es Ashwini Bapat, una doctora formada en Yale, se mudó a Portugal en 2020 porque “le aterrorizaba que Trump volviera a ganar” y ahora atiende a los médicos que desean emigrar.

Pero Marco Rubio, obcecado con los médicos cubanos e intentar cortar la entrada de dinero a Cuba, no mira que su país pierde aceleradamente personal profesional de la salud, debido a las políticas erráticas de su actual jefe, situación que debiera ser el centro de su atención y no si su vecino del sur ayuda a salvar vidas en otros países.

No se equivocó José Martí cuando afirmó:

«Debe ser penoso inspirar desprecio a los hombre desinteresados y viriles”.

Tomado de El Heraldo Cubano