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Argentina: La ultraderecha reunida y de fiesta en Córdoba

Por Melisa Molina

Milei fue el orador principal y reivindicó «la batalla cultural, de gestión y de poder institucional» que está haciendo lo que llamó «el mejor gobierno de la historia». Críticas a Villarruel.

Pasadas las ocho de la noche, el Presidente Javier Milei ingresó junto a su hermana Karina al hotel Quorum de la ciudad de Córdoba y sobre el escenario gritó: «Tenemos tres frentes de batalla: el de la gestión, el del poder institucional y el de la batalla cultural. Hasta nosotros, el mejor gobierno de la historia había sido el primer gobierno de Menem, pero en términos de estabilización este plan que organizó el mejor ministro de Economía de la historia, Toto Caputo, lo superó». Dijo al tiempo que criticó a su vice, Victoria Villarruel, a la que llamó «bruta traidora». Además, adelantó que ya firmó los vetos en contra de los jubilados, los discapacitados y las universidades y que «saldrán próximamente», y vaticinó que «muchos se van a sorprender con los resultados de octubre». 


 Luego, Milei se tomó varios minutos para hablar de la «batalla cultural». «Con ella tenemos que lograr que estos cambios sean a largo plazo, para que todos los que tengan ojos empiecen a verla», dijo y agregó: «En el frente de la gestión partimos de tener que enfrentar a los degenerados fiscales. Un Estado que odiaba a sus ciudadanos. Pero nosotros sí venimos a cambiar las cosas de raíz y esa es la segunda pata que explica por qué somos el mejor gobierno de la historia. A este plan de estabilización se suman las reformas estructurales». Después de elogiar a Federico Sturzenegger opinó: «En un año y medio hemos borrado 100 años y no vamos a parar hasta ser el país más libre del mundo». Por último, mientras en el público gritaban: «Motosierra, motosierra», él vociferó: «Esto no es suficiente, ahora nos toca trasladar todas las victorias de la gestión al frente institucional. Somos reformistas extremos y estamos orgullosos de serlo». Pero antes de cerrar, le dedicó unos minutos a Villarruel, con quién se viene peleando desde hace meses, y la llamó: «Bruta traidora».

 
«Esta es la fiesta de la derecha anti zurdo. La política y la ideología es una porquería y se tiene que acabar. La libertad es no vivir bajo el control del estado, la libertad es cuando nadie te pone el pie encima y te permite ser quién sos. No es cuando te dicen ‘yo te pago para moldearte y que seas trans’, eso no es ser libre», dice Carlos, un militante de LLA que vino desde Buenos Aires hasta Córdoba para participar de «la Derecha Fest». 

Al lado de él, hay un señor de unos 70 años, que es de un pueblo del norte de la provincia de Córdoba. «En los pueblos estamos mal. Mi mujer gana 60 mil pesos», dice y después cuenta que la entrada se la regalaron, «sino imaginate.. salía 40 mil», razona. No dice quién se la regaló, pero habla bien del diputado de LLA Gabriel Bornoroni y agrega: «La gente se cansó y se dio cuenta». 

 
Después se queja de que «hay laburo, pero la gente no quiere laburar», y denuncia que el problema es que todos «quieren vivir del gobierno». De manera casi inmediata cuenta que él es jubilado y que trabajó toda su vida en la salud pública. «Siempre fui radical y ahora soy libertario», admite y aclara que «soy cualquier cosa antes de ser peronista». Él no sabe quién es el Gordo Dan, ni tampoco Laje, pero repite: «Lo único que quiero es que no se olviden de nosotros porque no tenemos nada».

En la entrada del evento había venta de libros y merchandising. Stickers de caricaturas de Cristina tras las rejas con traje naranja, otros de Milei con la banda presidencial y otros de Trump. También uno de una motosierra con la consigna «Las fuerzas del cielo», y había un puesto de la fundación Faro. El director de esa fundación es Agustín Laje, el orador que habló antes de Milei. Allí también trabaja Francisco Caputo, hermano de Santiago Caputo, el asesor estrella del Presidente. Él funciona como nexo entre la fundación y los empresarios que les habilitan los fondos. 

 
Entre los libros que hay sobre las mesas del hotel Quorum aparecen la biblia, otros de autoayuda que se titulaban: «sufriste por amor alguna vez?», o «Cómo vivir sin ansiedad» y varios de Nicolás Marquez, otro de los oradores, que se titulan: «el impostor: Evo Morales: De la pacha mama al estado narco», «Perón: la biografía del tirano argentino» , y también, claro, su biografía de Javier Milei. También había otros libros que consignaban: «Cómo fabricar a una feminista y cómo rescatarla de la prisión de falsa libertad que se le prometió».

El salón alfombrado, a la espera del Presidente, estaba a oscuras. Lo único iluminado era el atril del centro. Sobre los asientos había papeles con descuentos para comprar libros que decían: «lee lo que no quieren que leas a 20 por ciento off». Afuera, mientras tanto, en un buffet estaban esperando antes de que arranque el evento el diputado Gerardo Millman, conocido por anticipar el intento de magnicidio de CFK, y la diputada Juliana Santillán. Alrededor del hotel hubo un gran operativo de seguridad y dentro del salón trabajó el personal de Casa Militar. Según trascendió en la previa del evento privado, el gobierno usó aviones de la fuerza aérea para trasladar funcionarios y militantes hasta Córdoba. 

 
Antes de Milei habló Agustín Laje. Según él, «la batalla cultural tiene una serie de sub batallas». Y que la disputa de magnitud es «influir sobre la opinión pública para configurar el sentido común». La teoría de Laje es que «el capitalismo es el sistema que libera las condiciones del ascenso social y económico y haciéndolo vuelve envidiable al que lo logra porque su éxito ya no depende de su nacimiento, sino de su capacidad para servir al prójimo en el mercado a buenos precios». 

Esto opina Laje, que «para mucha gente es intolerable y ahí es donde aparece la izquierda y le dice: si a vos no te fue bien es culpa del que sí le fue bien. El problema no está en vos y no te tenés que superar, sino que me tenés que dar a mi el poder para que yo baje a aquel que te produce este mal, que es la envidia», y por último agrega: «Te dicen: ´Tranquilo, no vamos a decir que es envidia, sino que es justicia social´.

 
Antes de ellos, disertó el abogado y biógrafo de Milei, Nicolás Márquez. «No crean que estamos en una democracia noruega, estamos en guerra. A nuestros enemigos tenemos que exterminarlos políticamente, ideológicamente, espiritualmente», dijo sin pelos en la lengua. Después empezó con las críticas a la vicepresidenta Victoria Villarruel y expresó: «Espero que para el segundo mandato del Presidente Milei haya un compañero a la altura de las circunstancias». Los militantes cantaban: «Traidora, traidora».

Después de que echaron a este diario del evento, Márquez aprovechó para criticarlo: «Hoy hay muchos periodistas, fundamentalmente de los medios opositores que quieren saber de qué se trata todo esto», indicó y mencionó a Página/12. Habló de una nota en la que «se proponía regular las redes sociales por el odio que se vislumbra en ellas», y vociferó: «Desprecian la libertad». Para concluir disparó un mensaje: «Hay gente que puede decir que no le entusiasma o apasiona la política y es válido, el problema es que si no me meto en política la política se va a meter conmigo, con mi familia y con mis hijos».

Quién es quién en la «Derecha fest»

«Estamos en guerra y, por más repetitivo que suene, la historia ha demostrado que la única forma de vencer al mal organizado es con el bien organizado», concluyó Milei en el escenario de la Derecha Fest que se hizo en la ciudad de Córdoba. Antes de él hubo distintos paneles. El primero fue de tres pastores evangélicos, un sector cada vez más cercano al gobierno de La Libertad Avanza. Después hubo uno de «periodistas que odian a los periodistas». Habló el twittero Daniel Parissini, alias «Gordo Dan», y hasta un asesor de Donald Trump con la bandera de Estados Unidos de fondo.

Las entradas para esta Derecha Fest no fueron gratis. Salían cerca de 40 mil pesos –con los gastos de servicios– y muchos de los asistentes se tuvieron que endeudar para poder comprarlas. Otros llamaban a los organizadores diciendo que querían ir, pero no las podían pagar y, consultado acerca de ese tema, el influencer y uno de los dueños de la Derecha Diario, el español Javier Negre, dijo: “A la gente que no podía pagar los 35 dólares les hicimos el 50 por ciento de descuento”. 

 
Al ser consultado sobre qué hacen con el dinero que recolectan en estos eventos, Negre argumentó que era para pagar los gastos: “No es para ganar dinero, con empatar nos alcanza porque el objetivo es que nuestras ideas lleguen, no solo a Buenos Aires, sino a todas las provincias de la Argentina”. Sí tomaron la definición de dejar ingresar gratis a integrantes de las Fuerzas Armadas, fuerzas de seguridad y veteranos de la Guerra de Malvinas. La prensa estuvo encerrada en un corralito y con la orden expresa de no ingresar cámaras de foto ni de televisión. Página12, por más que pagó su entrada, fue echada del evento por orden del gobierno en medio del evento.

Esta derecha fest tampoco será la última, los organizadores aseguran que comenzarán a replicarla en distintos lugares del país. La próxima, dicen, sería en Neuquén. “Queremos que la Derecha Fest se transforme en un faro de pensamiento”, expresan los organizadores.

 
Los evangélicos
Quienes disertaron por el sector evangélico fueron Rigoberto Hidalgo, un joven de Costa Rica que se presenta como “director de Reasonable Faith (fe razonable)”. Como si fuera un predicador showman, vestido de traje y con el pelo en la cara, gritaba, levantaba los brazos, y decía: «Hay un principio que es el del tercio excluido o el de las cosas son o no son», y agregó: «No puede haber un medio ser. Solamente hay dos sexos y 50 formas de hacer el ridículo. O eres hombre o eres mujer». Mientras hablaba, sonaba música épica y detrás de él se reproducían imágenes del big bang.

También habló Evelin Barroso, una referente de “Cita con la vida”, una de las iglesias evangélicas más grandes de la provincia de Córdoba, que está vinculada al sector del diputado de LLA Gabriel Bornoroni. Ella dijo «la familia ha sido vulnerada y es nuestra primera y última trinchera. Luego, añadió que iba a hacer una «defensa de la mujer», y expresó: «Nuestro cuerpo no está fallado, mujeres. No vamos a permitir que nos borren, que nos rediseñen, que nos quiten la belleza, lo femenino y tampoco que le digan a nuestras madres y abuelas que fueron inferiores intelectualmente porque formaron familias, civilizaciones y patria». Por último, elogió a Karina Milei «nosotras nacimos para cuidar, para ser leonas, como el jefe, como Karina, que da lo mejor de ella para construir en esta Argentina algo nuevo», puntualizó.

 
Ese panel lo completó Gabriel Ballerini, un pastor evangélico de la Iglesia Evangélica Bautista Vida y Esperanza, antiaborto y antifeminista. «El diablo es nuestro adversario y la izquierda nuestro enemigo», disparó. Y subrayó que «era obvio», que el evento de la derecha fest arranque con «la batalla espiritual», porque «Siempre la derecha fue cristiana». «La izquierda –añadió–, cuando nace, nace atea. La izquierda es anticristo. Es un sistema de valores contrario a los buenos cristianos». También utilizó citas bíblicas para decir que «estaba bien militar».

A sus espaldas, mientras tanto, apareció una imagen enorme de mujeres en una marcha feminista a favor de la interrupción voluntaria del embarazo y el pastor gritó: «Hay buenas militancias, buenas causas para militar y hay malas milicias y militancias como esta», los presentes chiflaban. 

 
También estuvo el estadounidense Alex Bruesewitz, un consultor de 27 años vinculado a la campaña de Donald Trump, que se desempeña cómo director de comunicación digital en la Casa Blanca. El día anterior a este evento Bruesewitz estuvo en Casa Rosada y allí fue recibido en el “salón de los patriotas”, exsalón de las Mujeres, por el twittero devenido en Director Nacional de Comunicación Digital, Juan Doe.

Sobre el escenario en Córdoba, Bruesewitz dijo en Inglés: «Hay muchas similitudes entre La Argentina y Estados Unidos. La energía aquí nos recuerda a estar en un rally de MAGA en los Estados Unidos». Además, añadió mientras atrás flameaba en pantalla la bandera de Estados Unidos: «Hay muchos kilómetros entre nuestros países, pero estamos conectados por tres cosas: estamos aquí por nuestra fe por Dios, por Jesucristo. Creemos en fronteras seguras y cerradas para proteger nuestras comunidades y familias y queremos oportunidades económicas prosperidad, y que no se meta el gobierno en nuestros bolsillo». Por último, antes de que empiece a sonar YMCA de Village People, pronunció jocoso: «Además, lo más importante es que tenemos grandes presidentes como Trump y Milei, que son los líderes contra la batalla woke, están haciendo al mundo mejor y, además, los dos tienen un gran cabello». 

 
¿Quién es Agustín Laje?
Agustín Laje es el organizador de esta fiesta y director de la Fundación Faro. Él odia a la mayoría de las mujeres, salvo a su abuela. Ella fue la primera que, según él, le inculcó las ideas de derecha que hoy vocifera con los ojos desorbitados arriba del escenario. En un documental que filmó en 2023, y en el que casi el único entrevistado que habla por más de dos horas es él, cuenta que cuando era chico iba a un colegio “bien militante y comunista” en el que le hablaban de “el heroísmo del Che Guevara”, y dice que eso le parecía raro. Entonces, cuenta Laje, después de clase iba a la casa de su abuela y ella, “con el modelo socrático”, lo hacía pensar “de manera crítica”. Fue la señora, cuenta, la que le habilitó, cuando él estaba cursando el colegio secundario, un libro del abogado Nicolás Márquez denominado “La otra parte de la verdad”.

 
Marquez, tal como Laje lo haría un par de años después de terminar la secundaria y de publicar su libro: “Los mitos setentistas: Mentiras fundamentales de la década del ‘70”, estudió “contraterrorismo” en el centro William J. Perry de la National Defense University en Washington, una institución que, cómo dice su nombre, pertenece al departamento de Defensa de los Estados Unidos. Una vez de regreso a la Argentina, a Córdoba, Laje estudió en la universidad católica Ciencia Política y, luego viajó a España para cursar una maestría en Filosofía en la Universidad de Navarra, una institución perteneciente a la prelatura del Opus Dei.

El Gordo Dan y la bendición de las Fuerzas del Cielo
 
En Balcarce 50 valoran y respetan a Laje, de hecho, él fue el que encabezó el video institucional de la Casa Rosada por el 24 de marzo en el que reivindicaba el accionar de los genocidas. Dicen, también, que quieren que él sea el próximo gobernador de la provincia de Córdoba, y que trabajarán para eso. El cordobés es cercano a las Fuerzas del Cielo, que lidera el asesor del presidente Santiago Caputo, y un símbolo de que esa alianza está sellada es que en este acto en Córdoba participó Daniel Parissini, alias “El gordo Dan”.

Golpeados por haber quedado relegados por Karina Milei y los Menem de los armados territoriales y fuera de las listas en la Provincia de Buenos Aires, la “patrulla digital” de la Casa Rosada quiere hacer pié en el territorio y estos eventos le sirven para eso. De hecho, varios de los que pululan todos los días por los pasillos de la casa de gobierno estaban entre el público exaltados.

Fuente: Página/12

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