Ejes de AGNU 2025: Palestina, multilateralismo y justicia histórica
Delegaciones de distintas regiones urgieron a poner fin a la agresión israelí en la Franja de Gaza, pidieron un alto al fuego inmediato.
El debate general de alto nivel del 80 período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), que finalizó este lunes, tuvo un fuerte protagonismo de los países del Sur Global, que centraron sus discursos en la crisis en Palestina, la necesidad de fortalecer el multilateralismo, el reclamo de paz mundial, la exigencia de poner fin al bloqueo contra Cuba, así como la denuncia de amenazas militares contra Venezuela y demandas de reparaciones históricas desde África y el Caribe.
El tema de Palestina dominó gran parte de las intervenciones de alto nivel, que dieron comienzo el pasado 23 de septiembre. Delegaciones de distintas regiones urgieron a poner fin a la agresión israelí en la Franja de Gaza, pidieron un alto al fuego inmediato y reclamaron la materialización de la solución de dos Estados como vía para una paz duradera.
Rusia y varios países árabes insistieron en que el Consejo de Seguridad debe cumplir con su mandato y detener la escalada de violencia.
El multilateralismo fue otro de los ejes reiterados. Representantes de China, Bolivia y otros Estados alertaron sobre los riesgos del unilateralismo y las sanciones coercitivas unilaterales, señalando que la ONU debe ser el espacio legítimo para resolver diferencias y garantizar un orden mundial basado en el derecho internacional.
En relación con América Latina y el Caribe, Cuba denunció nuevamente el impacto del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, que se mantiene como el principal obstáculo para el desarrollo del país.
Venezuela advirtió sobre maniobras militares en el Caribe y el Atlántico, que consideró una amenaza a la soberanía regional, al tiempo que defendió la importancia de la cooperación a través de organismos como la CELAC, el MNOAL y el grupo BRICS.
Los países africanos tuvieron una voz destacada en esta sesión. Delegaciones como Namibia y otros Estados exigieron reparaciones históricas a las potencias coloniales, incluyendo la restitución de bienes culturales y compensaciones por los daños ocasionados por la colonización y la esclavitud.
Por su parte, Haití utilizó la tribuna para solicitar una respuesta global más contundente ante la crisis humanitaria, política y de seguridad que atraviesa, subrayando que el país necesita apoyo integral para superar la inestabilidad prolongada.
La AGNU también estuvo marcada por la participación de líderes como el canciller ruso Serguéi Lavrov, quien advirtió sobre los intentos de diluir las resoluciones en favor de Palestina; representantes de México, que rechazaron la criminalización de los migrantes; y autoridades del Caribe, que llamaron a la cooperación internacional en defensa de la paz, la justicia y el desarrollo sostenible.
Durante el debate, también se destacaron intervenciones de figuras controvertidas. El presidente estadounidense Donald Trump, en un discurso de fuerte tono antimigrante, vinculó la migración latinoamericana con problemas de seguridad, lo que generó rechazo en varias delegaciones de la región.
Por su parte, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu tomó la palabra para negar la existencia de una crisis humanitaria en Gaza y justificar la ofensiva militar, pero la falta de apoyo y una sala casi vacía evidenciaron el aislamiento de su postura frente a la mayoría de la Asamblea.
Fuente: teleSUR
Foto: EFE

