Sindicato de Panamá denuncia intervención y toma de su sede ordenada por Mulino
Organización Conato sostiene que el Gobierno quiere acallar las voces contra la corrupción, el desempleo y el deterioro de los derechos laborales.
El Consejo Nacional de Trabajadores Organizados de Panamá (Conato) denunció un grave atentado contra la autonomía sindical, tras la irrupción de un grupo apoyado por el Gobierno en su sede, con el propósito de imponer una directiva paralela al margen de la ley.
El colectivo señaló que la acción, encabezada por Ariano Pinzón y Boris Quesada, fue ejecutada con el aval del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel), cuyo despacho —según los denunciantes— emitió una resolución irregular que los designa como presidente y secretario general del organismo, pese a no contar con el respaldo de las organizaciones afiliadas.
Eduardo Gil, secretario general de Convergencia Sindical, una de las agrupaciones fundadoras de Conato, condenó el hecho, al que calificó como un “asalto a la institucionalidad democrática y un golpe directo a la libertad sindical”.
Gil afirmó que recurrirán a todas las instancias legales para revertir la “maniobra política ordenada desde el Ejecutivo” para acallar a las voces que denuncian la corrupción, el desempleo y el deterioro de los derechos laborales en el país.
El gremio denunció además que la supuesta resolución del Mitradel nunca fue notificada de manera formal ni acompañada de documentos oficiales. La única comunicación que recibieron fue un mensaje de WhatsApp que pretendía sustituir un trámite legal por una simple instrucción digital. “No podemos acatar una directriz informal, sin respaldo legal ni validación institucional”, señalaron.
Ante la gravedad de los hechos, Conato convocó a una asamblea extraordinaria y solicitó apoyo jurídico a expertos en derecho laboral, con el fin de presentar las denuncias correspondientes.
Sistemática persecución contra sindicatos combativos
La profesora Nelva Reyes, dirigente de la Central General Autónoma de Trabajadores de Panamá (CGTP), coincidió en que esta intervención se suma a una política sistemática de persecución contra sindicatos combativos, como los obreros de la construcción, que han protestado contra reformas al sistema de pensiones y el acuerdo de seguridad con Estados Unidos, contrario a la soberanía nacional.
Por su parte, Guillermo Puga, secretario general de la Confederación de Trabajadores de la República de Panamá (CTRP), advirtió que la actuación del Mitradel viola convenios internacionales ratificados por Panamá sobre libertad sindical y negociación colectiva, lo que podría acarrear sanciones del organismo internacional.
El movimiento sindical panameño cierra filas en defensa de Conato, denunciando una peligrosa escalada autoritaria que amenaza la independencia de las organizaciones de trabajadores. “No descartamos acciones legales contra funcionarios que hayan avalado este atropello”, sentenciaron sus dirigentes.
Fuente: teleSUR
Foto: @NReyesBarahona/ X

