África: Extractivismo y migración
Por Valeria Rodríguez.
Los últimos hechos acontecidos en Níger nos demuestran la conexión existente entre el extractivismo furtivo por parte de los países europeos al continente africano que se traduce en un hartazgo y que conecta casi directamente con la migración a cualquier precio, incluso con la pérdida de miles de personas en las costas mediterráneas.
No es casualidad que Francia cese momentáneamente su represión hacia su propia población y gire su mirada al continente africano que en las últimas semanas ha estado más activo que nunca con la toma del poder en Níger por parte de un comité militar que exige la soberanía y el posicionamiento a favor por parte de Burkina Faso, Mali y Guinea que conformaron un frente antiimperialista.
Una de las medidas más polémicas y disonantes que ha realizado Níger fue la suspensión inmediata de venta de uranio y oro a Francia, teniendo en cuenta que Níger es el cuarto productor de uranio del mundo y desempeña un papel fundamental para la produccion de energia en Francia ya que es lo que utilizan los reactores nucleares franceses.
En 2021, Níger suministro casi el 25% del total de importaciones de uranio en la Unión Europea, permitiendo que millones de hogares franceses obtengan energía siendo que en Níger tan solo el 19.25% de la población tiene acceso a ella y producen el 44% de su propia energía mientras que lo restante lo importan.
La expoliación de África llega a niveles grotescos, tan solo hay que observar el manejo de empresas privadas como es el caso de la empresa Orano que estuvo involucrada en la extracción de uranio en Níger desde 1970 y el pasado mes de mayo firmó un acuerdo con el depuesto gobierno para invertir 85 millones de euros en el “desarrollo de la actividad minera” a cambio de una serie de programas educativos, capacitación, generación de puestos laborales y la reducción de la huella de carbono junto con el desarrollo de empresas estatales, Cabe destacar que tan solo el 1,2% de las ganancias por el uranio forma parte del presupuesto de Níger.
Hay que destacar algo sumamente importante que tiene que ver con la moneda con la que comercia Níger con Francia que es el Franco CFA, que es una moneda que deviene de las ex colonias francesas, el detalle está en que se imprime en Francia y Níger tiene que pagar un impuesto por dicha impresión. Por lo tanto, Francia “compra” uranio con papeles que ni siquiera utiliza en su propio país ya que como todos sabemos se utiliza el euro, además de ello, cobra un impuesto por los mismos papeles con los que comercia a cambio del uranio que le termina saliendo prácticamente nada, el negocio es redondo.
Es interesante tener en cuenta que esta moneda nació en 1945, justo durante el proceso de descolonización tras la firma del acuerdo de Breton Woods a través del cual se le dio origen al Banco Mundial y al Fondo Monetario Internacional que son los principales difusores del neoliberalismo.
La narrativa de la miseria y la superficialidad
Si se piensa en África inmediatamente se nos viene a la cabeza la foto de un niño con la panza hinchada acechado por un cuervo, y con eso nos quedamos “hay pobreza y miseria en el continente africano” pero en realidad eso es la superficialidad del problema real, es parte de la narrativa que el colonialismo creó durante años para que se produzca una legitimidad internacional que acepte que África es subdesarrollada, salvaje, que no puede pensar por sí misma y que es fundamental educarla para generar las bases de una sociedad civilizada. Para ello, se comenzó a utilizar la estrategia de mirar con lástima al continente y luego utilizar la ayuda humanitaria como herramienta de poder que puede utilizarse al antojo del mismo occidente que cuando cree que debe penalizarse por actuar de una manera que no corresponde.
Recientemente tanto Estados Unidos como Francia expresaron su intención de retirar las ayudas humanitarias si no se restituye la “Democracia” en Níger y aquí debemos detenernos a pensar que es lo que se entiende por el concepto de democracia ya que su existencia y difusión fue por muchos años herramienta de poder para imponer políticas coloniales el ejemplo más claro de ello es la invasión a Iraq y su posterior proceso de “democratización” que no fue más que la intromisión de los Estados Unidos en la política interna del país arabe incluso beneficiándose con acuerdos militares espurios y la aparición de organizaciones terroristas como Daesh que curiosamente apareció en 2014 y fue la misma Hillary Clinton quien aceptó que Estados Unidos estuvo implicado en la creación de tal movimiento y no solo eso sino que también obtuvo financiación por parte de empresas extractivistas y cementeras como es el caso de Lafarge Holcim que en 2017 fue sancionada por demostrarse la financiación por parte de tres directivos al grupo terrorista Daesh.
En la cumbre “África Rusia” el actual representante de Burkina Faso, Ibrahim Taore, quien asumió al poder en octubre de 2022, tras una intervención militar, hizo referencia en su discurso a la imposición de la democracia occidental sin tener en cuenta la lógica cultural de cada país y criticó la colonialidad del concepto además de hacer referencia a la importancia de los recursos naturales y como estos son expoliados por empresas funcionales a occidente.
África y la migración
Cuando hablamos de migración tenemos que tener en cuenta que es un derecho que se apoya en la declaración de los derechos humanos y en el Pacto mundial para una migración segura, ordenada y regular, entre otras resoluciones internacionales.
Según las estadísticas del Ministerio de inclusión, seguridad social y migraciones, en 2022 África fue uno de los principales generadores de migrantes a España siendo Marruecos el principal país emisor con un total de más de 800.000 residentes, y le sigue Senegal con más de 72.800, todas estas estadísticas contabilizan a los migrantes regulares, por lo tanto se estima que aquellos que se encuentran en irregularidad son muchos más.
Por su parte, según la Agencia de la ONU para los Refugiados,contabilizó el ingreso de los migrantes irregulares durante los nueve primeros meses de 2020 y los marroquíes supusieron el 20,3% del total de hombres y mujeres que entraron de manera irregular a España con el fin de trasladar su residencia fuera de su país de origen, mientras que los argelinos representaban casi el 40% y los senegaleses representaron cerca del 5% de los inmigrantes irregulares que llegaron a España entre enero y septiembre del 2019 .Así,en todo el año 2020 llegaron a España 41.861 migrantes irregulares, unos 9.000 más que en 2019.
Pero llegar a España no es fácil, en muchos casos es un proceso que requiere al menos tres años y tienen que pasar por situaciones de extrema violencia, pagar sumas exorbitantes para cruzar en patera poniendo como garantía su propia vida.
Como contrapartida de estos movimientos migratorios, la situación ecológica que deviene del extractivismo es una de las razones por las que muchos africanos deciden buscar otros rumbos, podemos señalar a modo de ejemplo, la expansión de la industria de aceites y harinas de pescado que ha crecido exponencialmente durante los últimos años.
Mauritania importa el 70% de su producción y en Senegal, el grupo Corpfin Capital, principal accionista de la española Grupo Barna, ha invertido en una nueva fábrica de harinas y aceites en Cayar, Senegal, esto afecta directamente al sector pesquero artesanal y obliga de alguna manera a que muchos emigren buscando su propia subsistencia.
Según Greenpeace, más de 500.000 toneladas de pequeños peces se extraen cada año de África occidental y se convierten en alimento para la acuicultura y la agricultura, suplementos dietéticos, cosméticos y productos alimenticios para mascotas.
La excusa de las empresas que acuerdan muchas veces con los gobiernos es el desarrollo, la creación de puestos de trabajo pero eso no es otra cosa que la utilización de un continente rico en recursos naturales que es expoliado a cambio de unas monedas que beneficia a unos pocos y aumenta un negocio de consumo masivo para un tipo de sociedad que alimenta la masividad y que afecta directamente no solo al ser humano sino también al medio ambiente y a su vez agrega otro punto más que es la crisis migratoria.
Tomado de Resumen Latinoamericano – Argentina.