La Egrem entre yucatecos
Por Pedro de la Hoz.
La primera señal internacional de la agenda conmemorativa por el sexagésimo aniversario de la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (Egrem) tuvo lugar esta semana en el Museo de la Canción Yucateca, en Mérida.
Una exposición de 140 carátulas de fonogramas registrados por la principal casa discográfica del archipiélago antillano a lo largo de su historia, quedó instalada en el recinto ubicado en el centro de la urbe del sudeste mexicano.
Dividida en cuatro secciones, la muestra, titulada Atesorando el patrimonio sonoro, recorre los íconos de la tradición preservada y difundida por la Egrem a partir de sus archivos, la permanente y sucesiva actualización de la trova y el bolero, la impronta de las orquestas y conjuntos, y la atención a los valores emergentes en las dos últimas décadas.
En el pórtico, las siguientes palabras del poeta y etnólogo Miguel Barnet: «La Egrem ha sido y es reservorio y salvaguarda de lo mejor de la música cubana. En sus estudios de grabación, ya históricos, se siente aún la respiración y el trino musical de voces como las de Bola de Nieve, Benny Moré, Celina González, Compay Segundo, Elena Burke, Omara Portuondo, Pablo Milanés y Silvio Rodríguez, y figuras del ámbito internacional. La riqueza del folclor musical encontró allí su caja de resonancia. No es un museo, es una academia de rico aprendizaje. El buque insignia de la cultura cubana, que no es otro que la música, atesora en la Egrem los fondos sonoros de la nación».
Gonzalo González, comisario de la exposición, subrayó el interés de los asistentes por tener a mano un panorama en el que se conjugan los valores patrimoniales y los nuevos desarrollos de la música, con lo que se puso de relieve la sostenida coherencia de la casa editora por materializar los presupuestos de la política cultural del Estado revolucionario.
De la gráfica al disco, la avidez se hizo sentir ante la posibilidad de acceder a ejemplares de álbumes que han marcado pautas, desde las compilaciones de éxitos de Benny Moré hasta las realizaciones de Los Van Van, de Juan Formell.
Para llevar a término esta relevante acción promocional, se concertaron la división de Arte y Repertorio de la Egrem, la labor de la diseñadora Yamilé León y la voluntad de amigos meridanos que tienen en muy alta estima la música cubana, considerada como uno de los vehículos esenciales en las históricas relaciones entre Yucatán y el vecino territorio insular.
Diego Cocom, destacado promotor cultural de la región y director del trío Ensueño, resaltó el aporte de la muestra al reforzamiento de la hermandad entre ambos pueblos, y cuánto pudiera incitar el ejemplo de la Egrem a quienes en Yucatán se proponen alcanzar cada vez cotas más altas en la difusión de los valores lugareños.
Es esta la primera vez, en sus nueve lustros de camino, que el Museo de la Canción Yucateca acoge exponentes foráneos, y ello se explica, de acuerdo con Elsa Fernández Moral, presidenta de la junta directiva de la institución, por la cercanía con la cultura cubana.
El acto de inauguración, al que asistió el cónsul general de Cuba en Mérida, Raisel Calvo Margolles, patentizó los vasos comunicantes entre Yucatán y Cuba, mediante el recital ofrecido por el trío Ensueño.
La creación de la Egrem aconteció el 31 de marzo de 1964. Ante la llegada, el año próximo, de sus seis décadas de ininterrumpida cosecha, la casa ha dispuesto de un programa de lanzamientos, conciertos y reconocimientos a los artistas de su catálogo, grabadores, realizadores audiovisuales, diseñadores, promotores y entidades afines, que prevé iniciativas internacionales y actividades en sus estudios de grabación y centros culturales diseminados en 11 provincias del país.
Tomado de Granma / Foto de portada: Egrem.