Los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos
Por REDH-Cuba.
Con estos versos de Alí Primera honramos la memoria de un gran compañero que ha partido. Iroel Sánchez fue un militante. Su vida y su obra son un gran acto de amor al servicio de los oprimidos. Intelectual lúcido, supo combinar las tareas de dirección con la necesaria batalla de ideas. Los chacales del odio no podrán mancillar su memoria. Los que consagran su vida al servicio de las causas justas y de los pueblos acceden al panteón de la Memoria. Iroel no se ha ido, sigue con nosotros, como parte del capítulo Cuba y de la REDH en su conjunto. Sus camaradas de todas partes del mundo tenemos el deber de seguir en la lucha por él y por todos los que, como él, nunca se cansaron.
En esta hora de duelo hacemos nuestros los inmortales versos de Alí:
«Los que mueren por la vida
No pueden llamarse muertos
Y a partir de este momento
Es prohibido llorarlos…»
¡Hasta la victoria siempre, compañero!
Secretaría Ejecutiva de la Red en Defensa de la Humanidad
Tomado de REDH-Cuba / Foto de portada: El Necio.