Banco Central de Cuba anuncia nuevas medidas de bancarización para reordenar los flujos monetarios
Por Thalía Fuentes Puebla.
El Banco Central de Cuba (BCC) dispuso un conjunto de nuevas medidas para favorecer los procesos de bancarización, que tienen como principio mantener la igualdad para todos los actores de la economía nacional y, como principal meta, el reordenamiento de los flujos bancarios.
La Gaceta Oficial No. 55 Extraordinaria, del 2 de agosto de 2023, aprueba las normas bancarias sobre límites para los cobros y pagos en efectivo en moneda nacional, su depósito, extracción y tenencia.
Autoridades del Banco Central de Cuba anunciaron este miércoles en conferencia de prensa nuevas medidas de bancarización en el país, que se implementarán de manera paulatina a partir del 3 de agosto.
Alberto Quiñones Betancourt, vicepresidente del BCC, explicó en un primer momento que la bancarización es el uso de los canales de pago electrónicos para las operaciones bancarias. Este proceso, agregó, se hace bajo el principio de mantener la igualdad entre todos los actores económicos.
Según la Resolución 111/2023 emitida por el Banco Central de Cuba, el incremento del uso del dinero en efectivo en las transacciones económicas y financieras ha provocado un retroceso en los niveles de bancarización e inclusión financiera en el país, a lo que se adicionan los elevados costos asociados a su emisión, trasportación, procesamiento y almacenaje, así como la demanda en los cajeros automáticos para extraer efectivo.
Por esos motivos, es necesario incrementar la bancarización de las operaciones a través de los canales electrónicos de pago.
Quiñones Betancourt agregó que este proceso se hará de forma gradual, apegados a las normas internacionales, ya que los pagos electrónicos son cotidianos en la vida de los ciudadanos de cualquier país. Además, según el vicepresidente, este proceso de avance y dualidad está determinado por las experiencias acumuladas en Cuba, a partir de la existencia de un grupo de condiciones que permiten avanzar.
Paulatinamente, se crean las condiciones y capacidades para la bancarización de las transacciones de cobros y pagos entre todos los actores de la economía y con la población, facilitando el uso de los medios de pago, dispositivos y pasarelas de pago electrónicos existentes, además de potenciar la utilización de los títulos de créditos y otros medios de pago vigentes, reduciendo el dinero en efectivo.
Quiñones Betancourt reconoció que dado el nivel de obsolescencia y explotación de los cajeros automáticos, el servicio que hoy prestan es ineficiente. “Todas las relaciones de cobros y pagos entre los actores económicos se deben sustentar en los métodos de pago establecidos por el BCC, priorizando los canales electrónicos” dijo.
Entre las acciones aprobadas se encuentra el límite máximo 5.000 CUP por operación para los cobros y pagos en efectivo entre empresas, mypimes, trabajadores por cuenta propia, cooperativas y demás formas de gestión. Además, para proteger a la población, en la red de cajeros solo podrán usar las tarjetas asociadas a pensiones, cuentas de ahorro, salarios, y haberes personales.
Los actores de la economía pueden solicitar el efectivo requerido para su actividad en las sucursales bancarias donde operan sus cuentas corrientes o fiscales, ajustándose a las condiciones pactadas con el banco y en correspondencia con los niveles operacionales y fiscales.
Por otro lado, se está trabajando con Xetid, ETECSA y los Ministerios De Comunicación, Comercio y Economía y Planificación, para que todos los comercios que brinden bienes y servicios tengan incorporados los canales de pagos electrónicos, aunque también se pueda utilizar el efectivo. Que sea la población la que elija la forma de pago.
Además, todos los actores económicos deben tener contratados los servicios de las pasarelas de pago Transfermóvil o EnZona, o terminales de Puntos de Venta (POS). Además, es una premisa incentivar la utilización de bonificaciones.
“Estos canales permiten operaciones más seguras, rápidas, y es importante que económicamente reporten un beneficio para la población”, refirió el vicepresidente al tiempo que dijo que se está estudiando para ampliar esos beneficios.
Por su parte, Julio A. Pérez Álvarez, Director General del BCC, comentó que en el país hay más de 15 millones de tarjetas y por medios electrónicos transitaron el pasado año 200 millones de operaciones bancarias.
“En estos momentos puede que en algunos lugares no tengamos todas las condiciones, por eso en la norma se reconoce como plazo hasta seis meses para que se continúen haciendo operaciones en aquellos lugares y por los clientes que no tienen las condiciones creadas”, explicó el directivo.
O sea, en esos casos puntuales se pueden seguir haciendo extracciones de efectivo en pesos cubanos que exceden el límite establecido para efectuar pagos a trabajadores por concepto de salario, gratificaciones, y otras retribuciones al trabajo, siempre y cuando no se cuente con la nómina domiciliada. Además, los subsidios a otras prestaciones de seguridad social, las pensiones alimenticias, anticipos de dieta y los pagos de prestaciones a estudiantes pueden seguir haciéndose en efectivo.
Por otro lado, las extracciones de efectivo para el pago de salarios, subsidios y otras prestaciones de seguridad social como máximo deben realizarse tres días hábiles antes de la fecha de ejercer el pago.
Los ingresos en efectivo en pesos cubanos que reciban los actores económicos serán depositados en su cuenta corriente, a más tardar al siguiente día hábil bancario a la fecha de su recepción, aún más cuando la recaudación sea significativa, señala la resolución.
Los directivos aclararon que se mantienen los pagos en efectivo.
Tomado de Cubadebate/ Video: Canal Caribe/ Foto de portada: Maxence/ Flickr.