Una tasa de cambio para el peso: ¿Dictada desde EEUU?
Por Raúl Antonio Capote
La estrategia cocinada en Estados Unidos para estrangular la economía de la familia cubana pretende sumar una nueva herramienta de manipulación, a partir de las limitaciones coyunturales con la disponibilidad de efectivo de moneda nacional en los bancos del país.
La nueva «jugada» se propaga como un peligroso virus entre la gente, buena parte de la cual sucumbe ante la oferta impune y oportunista que puede encontrar en redes sociales: «Si transfiere 30 000 pesos, puedes recibir 25 000 en efectivo».
El «negocio» hace frotar las manos a esa especie de inescrupulosos especuladores que se jacta de transar con la necesidad de los cubanos; a sabiendas de que hace el juego a la guerra económica que financian nuestros «preocupados» vecinos del Norte.
¿Evidencia de la manipulación? Resulta que el mismo sitio web que se ha encargado de autonombrarse como regulador de las tasas de cambio en el mercado ilegal de divisas en la Isla, ha incorporado en su «tablita de referencias» un valor para nuestra moneda nacional: a tantos pesos el peso cubano.
Vaya intención la de querer capitalizar el control de este nuevo fenómeno, con el único afán de sumar zozobras a las que ya se derivan de la manipulación oportunista de los valores de cambio del MLC, el dólar y el euro, a contrapelo de las capacidades adquisitivas reales de la familia.
La página de marras, vocera de todo cuanto sirva a la contrarrevolución, es fruto de la articulación mediática «perfeccionada» por orden del expresidente de EE. UU., Donald Trump, en febrero de 2017, para actuar en el ciberespacio cubano, mediante la creación de una Fuerza de Tarea Especial.
Sin embargo, en el frente financiero no tienen créditos de originalidad, pues son copia del ensayo que contra Venezuela significó el tristemente célebre Dolar Today, que cumplía la misión de definir el precio del dólar paralelo, según dictaban los laboratorios de subversión económica en Washington.
Recordemos que en esta guerra el enemigo no actúa frontalmente, sino a través de sus tanques de pensamiento, grupos de presión, lobbies financieros, con apoyo de una bien articulada –por bien pagada– red de medios afiliados a los grandes conglomerados mediáticos y a los servicios especiales, para generar procesos de desestabilización económica operando desde las sombras.
La situación que enfrentamos, según especialistas en el tema, poco tiene que ver con el control cambiario en términos de «proceso económico, es una decisión política que quieren presentar como un «proceso natural» provocado por las leyes del mercado, cuando se sabe que forma parte de la estrategia para asfixiar al país.
Tomado de Granma/ Foto de portada: Cubadebate