Argentina: A 47 años de la masacre de la familia Lanuscou
El 3 septiembre de 1976 el Comando Zona IV Campo de Mayo conjuntamente con refuerzos del Batallón 601 de Boulogne y Policía de la Provincia de Buenos Aires, atacó la casa de la familia Lanuscou, en la localidad de Martínez. Como resultado de cinco horas de intenso bombardeo fueron asesinados Roberto Lanuscou y Bárbara Miranda, y sus hijos Robertito y Barbarita de cuatro y seis años. La hija menor del matrimonio, Matildita, aún sigue siendo buscada.
Amelia nació el 15 de febrero de 1950 en la ciudad capital de la Provincia de Córdoba. Tenía dos hermanos varones mayores. Le decían Bárbara, ya que su mamá también se llamaba también Amelia. Su primera infancia transcurrió en la localidad de Unquillo. En 1955, el padre viajó a la Provincia de Buenos Aires buscando trabajo. Poco después, toda la familia se trasladó primero a Quilmes y luego a Ranelagh. Los tres hermanos estudiaron en la Escuela Nº 6 de esa localidad. Años más tarde, Bárbara cursó sus estudios secundarios en la Escuela Normal de Quilmes (2º 2ª / 1968).
Era delgada y de cabellos castaños claros. Era muy linda, dulce y pizpireta. Le gustaba salir y arreglarse bien. Después, ya militante, se volvería sencilla y reservada.
Bárbara conoció a Roberto en unas vacaciones familiares en Los Gigantes, Córdoba. Cuando los Miranda volvieron a Buenos Aires, se escribían, hasta que Roberto fue a buscarla. Se casaron y se fueron a vivir a Córdoba. Roberto ya militaba y Bárbara comenzó también su militancia política en la misma organización que él.
Roberto tenía dos hermanos varones. En la familia le decían “Otito“. Era hincha de Talleres, buen mozo y dulce, de piel blanca y cabello negro. Estudió Ciencias Económicas en la Universidad Nacional de Córdoba, carrera que dejó en cuarto año. Su militancia comenzó en grupos católicos. Militó en barrios como Bárbara, pero principalmente en el ámbito universitario. Trabajó en un estudio contable.
El 30 de agosto de 1970 nació el primer hijo de la pareja, Roberto. El 9 de febrero de 1972, la segunda, Bárbara. Matilde nació el 30 de marzo de 1976 en Río Tercero, Provincia de Córdoba, cuando la familia ya estaba ocultándose de las fuerzas represivas del aparato estatal. Finalmente, se mudaron a la localidad bonaerense de San Isidro, donde el 4 de septiembre de 1976, el hogar de la familia Lanuscou fue asaltado por fuerzas del Ejército y la Policía.
Al día siguiente, el Comando de Zona 4 informaba que “Fuerzas Conjuntas detectaron una reunión de delincuentes subversivos” y que “finalizada la acción, se comprobó que en el interior del edificio existían cinco delincuentes muertos”. Se labraron cinco actas de defunción N. N. y se los inhumó en el Cementerio de Boulogne.
La casa de la familia Lanuscou se encontraba en la esquina de Asunción y Catamarca, San Isidro, que fue destruida a balazos y saqueada
Con las primeras informaciones recibidas, las Abuelas de Plaza de Mayo se presentaron ante el Juzgado de Menores Nº 2 de San Isidro, a cargo de Juzgado del Dr. Fugaretta, quien no investigó los hechos denunciados, aunque uno de los mensajes decía que uno de los niños estaba vivo.
En 1984 se logró que se ordenara la exhumación de los cinco N. N. que podían ser los Lanuscou por la similitud de fechas y circunstancias. Al realizar las pericias forenses, se descubrió que en la tumba que correspondía a Matilde sólo se encontraba el ataúd con sus ropitas, una manta, un osito y un chupete.
Se estableció científicamente que ninguno de los cinco ataúdes contenía los restos de la beba (Matilde). Las fuerzas represivas habían simulado su muerte para apoderarse de la pequeña.
Roberto y Bárbara Lanuscou, hijos de Amelia y Roberto, asesinados junto a sus padres el 3 de spetiembre de 1976
Amelia junto a sus hijos Roberto, Bárbara y Matilde, quien continúa aún hoy desaparecida
Los padres y los dos niños mayores fueron asesinados. Matilde continúa desaparecida. La familia Lanuscou es querellante contra la Sra. Ernestina Herrera de Noble en la causa penal por sustracción de menores.
Ernestina Herrera de Noble junto a sus hijos adoptivos Felipe y Marcela, por quien se llevó adelante el juicio por apropiación contra la familia Herrera – Noble
Compartimos a continuación un escrito de David A. Lanuscou, recordando la fecha de esta masacre, en la búsqueda de Memoria, Verdad y Justicia 47 años después.
Fue un 3 de Septiembre de 1976, cuando se acercaba la Primavera. En esta canción, que titulamos “Matilde de Seis Lunas“, quiero recordar a mi hermano Roberto de 28 años y su compañera Amelia de 26, Montoneros, héroe y heroína de la resistencia y la lucha por la justicia social, asesinados por la dictadura cívico- militar Oligárquica Imperialista junto a dos de sus hijos: Robertito de 6 años y Barbarita de 4 años, en su domicilio de barrio San Isidro, Buenos Aires, en la calle Asunción esquina Catamarca.
En este trágico y cruel hecho, de una perversidad típica de esa Dictadura (76-83) secuestraron a la hija más pequeña de tan solo 6 meses de vida, Matilde, posible hija adoptiva (Marcela Noble) de la oligarca exdirectora del diario Clarín Ernestina de Noble, que como tío sigo en una constante e inclaudicable búsqueda.
Los restos fueron encontrados en tumbas NN en el cementerio de Boulogne, provincia de Buenos Aires, en enero de 1984. En el quinto cajón que tendrían que estar los restos de Matilde, los genocidas confundieron a la opinión pública dando a conocer por todos los medios, en especial diarios La Prensa, Nación y Clarín.
El parte militar (sin ir en ningún momento a constatar en el lugar de los hechos), dando la falsa noticia de que “fueron abatidos cinco subversivos“. Una mentira monumental de los represores asesinos, en el quinto cajón solo huesos de adultos, para desorientar a la pesquisa, la ropita y el chupete de Matilde. Este fue un hecho emblemático de dicha Dictadura ya que hubo asesinato y robo de niños.
Al final de esta simple grabación casera se puede leer una breve historia de la masacre. También la autora y el compositor de la letra y música y del montaje fotográfico.
Agradezco el reenvío para que las nuevas generaciones conozcan la verdad histórica de la gloriosa, digna y valiente resistencia a la cruel, perversa y genocida dictadura.
Resistir y luchar es vencer!
Los pueblos que pierden la memoria vuelven a repetir la historia! La resignación no hace historia!
Familia Lanuscou, presentes.
Hasta la victoria siempre, ahora y siempre!
Con información de Abuelas de Plaza de Mayo , Colectivo Expresos Políticos y Sobrevivientes – Rosario y Memoria Abierta.
