Internacionales

¿Intento de impedir el fútbol femenino en Colombia? Investigan su supuesta cartelización por la Federación y los clubes

La Superintendencia de Industria y Comercio de Colombia (SIC) investiga un presunto boicot entre dirigentes del fútbol profesional para establecer contratos perjudiciales para las jugadoras, además de atentar contra el desarrollo de esta disciplina deportiva. 

La pesquisa apunta a la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), la División Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor) y varios equipos de la liga. La noticia llega un poco más de un mes después de la destacada actuación del seleccionado de mujeres en el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, en el que llegó a los cuartos de final. 

Se presume que las autoridades de dichas entidades deportivas habrían acordado unas tablas salariales lo más cercanas posible al salario mínimo para ofrecerlas a las jugadoras, así como contratos de corta duración.

 

La SIC formuló un pliego de cargos contra las entidades y 29 equipos de fútbol femenino por su presunta participación en un cartel de contratación. 

“La decisión se sustenta en que habrían desarrollado un sistema orientado a obstaculizar la promoción y el desarrollo del fútbol profesional femenino en el país”, informó la entidad en un comunicado. 

“Entre las presuntas prácticas anticompetitivas identificadas por la SIC estaría la fijación de una tabla de salarios para que la mayoría de las jugadoras profesionales ganaran entre el salario mínimo y un tope de 4.500.000” de pesos colombianos (1.142 dólares).  

Por otra parte, el informe señala que la Dimayor, con el consentimiento de los clubes investigados, firmó un contrato con la empresa Win Sports para la transmisión de los torneos bajo condiciones que habrían perjudicado el desarrollo del fútbol profesional femenino, porque “estipularon la obligación de transmitir 10 partidos de fútbol de las competiciones masculinas y solo uno de los partidos de la Liga Profesional Femenina”. Además, se pactó que el partido de la liga femenina podía reemplazarse por cualquier otro, incluso por los de las competiciones de fútbol masculino.

“Esta conducta habría resultado idónea para limitar el crecimiento del fútbol profesional femenino, pues la transmisión de los torneos genera incentivos para que los aficionados consuman fútbol y, a su vez, los patrocinadores inviertan en la liga”, señala la SIC.  

De comprobarse esta conducta, la SIC “podrá imponer multas de hasta 116.000.000.000 de pesos (29.453.908 de dólares) por cada infracción a las personas jurídicas involucradas”. 

Otro de los puntos importantes de la investigación tiene que ver con la financiación de la actividad. “La Federación Colombiana y la Dimayor han afirmado que el nivel de desarrollo que tiene el fútbol femenino en Colombia, que solo tiene liga una vez al año, obedece a falta de recursos y financiación. Estamos investigando si, a pesar de eso, la Federación y la Dimayor, con anuencia de los 29 clubes, se habrían negado a ofrecer los dineros púbicos que el Gobierno ha ofrecido para promocionar el fútbol femenino en nuestro país”, dijo Melo Rodríguez, superintendente delegado para la protección de la competencia.

En la tarde de este viernes, el presidente de Dimayor, Fernando Jaramillo, ofreció una rueda de prensa en la que rechazó las acusaciones y señaló que se ocupará de demostrar que la entidad no ha actuado de forma irregular. 

 
“Los equipos profesionales que conforman la Federación Colombiana de Fútbol reafirman nuestro compromiso con el fútbol femenino desde el año 2017, con esfuerzos que han rendido fruto y muestra de ello son los resultados deportivos a nivel internacional, así como la proyección de las futbolistas que crecieron en nuestra Liga y al día de hoy se encuentran contratadas en el exterior”, argumentó Jaramillo.

El titular del ente se refirió también a la posibilidad de que la FIFA intervenga en el conflicto. “Obviamente, está pendiente del desarrollo del fútbol colombiano en toda su extensión, de la selección, del fútbol profesional y seguramente está enterado de lo que está pasando. El presidente [de la FCF] Ramón [Jesurún] tiene una reunión muy pronto con el presidente [de la FIFA] Gianni Infantino y seguramente se van a tratar estos temas”, indicó.

Por su parte, Eduardo Méndez, presidente del club Independiente Santa Fe, aseguró en diálogo con Semana que las jugadoras de la institución, la que consigue más triunfos a nivel de país en el ámbito femenino con tres estrellas, están contentas con el proceso y no han presentado ninguna queja respecto a sus contratos. 

El dirigente advirtió además de que una posible multa, en los términos mencionados por la SIC, pondría en riesgo financiero al club, que está en proceso de reorganización desde 2019. 

La Liga Profesional de Fútbol Femenino fue creada en 2016 y comenzó a jugarse al año siguiente, aunque desde entonces los torneos han sido cortos, intermitentes y han padecido la falta de recursos económicos. 

La gran actuación del seleccionado en el último mundial, donde logró el mejor resultado de un conjunto sudamericano en 12 años, volvió a poner en tela de juicio el trato desigual de las autoridades de este deporte respecto de la actividad masculina.   

Colombia fue elegida como sede del Mundial de Fútbol Femenino sub-20 para la edición de 2024, y el mes pasado fue escogida como anfitriona de la Copa Libertadores 2023.

Tomado de RT/ Foto de portada: La defensora de la selección colombiana Daniela Arias / William West / AFP.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *