Cuba condena plan de ocupación de «Israel» en la Franja de Gaza
El Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, en nombre de su nación condenó el plan del estado sionista israelí de ocupar la Franja de Gaza.
La acción criminal, violatoria del Derecho Internacional intensificará el genocidio contra la población palestina.
«Rechazamos estos planes que agravarán la crisis humanitaria y atentan los derechos inalienables de ese pueblo», afirmó el canciller cubano.
Ante la aprobación el pasado viernes del plan criminal aprobado por el Gabinete de Seguridad de Israel, crece el rechazo internacional al plan del primer ministro Benjamín Netanyahu para establecer una ocupación militar completa de la ciudad de Gaza.
La medida se produce en medio de un conflicto que, según cifras citadas en el informe, ha resultado en la muerte de al menos 61 258 personas en Gaza, la gran mayoría de ellas civiles, incluyendo un número desproporcionado de mujeres y niños, como consecuencia de la ofensiva militar israelí desencadenada tras los ataques del 7 de octubre.
La respuesta internacional fue rápida y crítica. El alto comisionado de las Naciones Unidas para los derechos humanos, Volker Türk, instó a una detención inmediata de los planes de ocupación militar total.
“Los planes de ocupación militar total de la Franja de Gaza por parte del Ejército de Israel deben detenerse de inmediato”, advirtió Türk, subrayando que dicha acción constituiría una violación clara del derecho internacional humanitario.
Además, advirtió, “van en contra del fallo de la Corte Internacional de Justicia en el que se establece que Israel debe poner fin a su ocupación lo antes posible, así como contra la solución acordada de dos Estados y contra el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación”.
Türk predijo consecuencias catastróficas: un nuevo “desplazamiento forzado masivo” para los aproximadamente 800 000 residentes de la ciudad —muchos ya desplazados previamente de otras zonas de Gaza— y más “así como en más asesinatos, más sufrimiento insoportable, destrucción sin sentido y crímenes atroces”.
El Reino Unido expresó su profunda preocupación a través de su primer ministro, Keir Starmer. Starmer sostuvo que la ocupación israelí de Gaza “solo acabará desembocando en más derramamiento de sangre”. Y agregó: “La decisión del Gobierno israelí de intensificar aún más su ofensiva en Gaza es errónea, y le instamos a que la reconsidere de inmediato”.
Alemania anunció acciones concretas. El canciller Friedrich Merz declaró la suspensión inmediata de las exportaciones de armas con destino a Israel que puedan ser utilizadas en Gaza.
“El Gobierno alemán no autorizará ninguna exportación de equipo militar que pueda utilizarse en la Franja de Gaza hasta nuevo aviso”, dijo.
Merz también exigió que Israel garantice “el acceso integral a la ayuda humanitaria, incluso para las organizaciones de la ONU y otras instituciones no gubernamentales” e instó “urgentemente” a la suspensión de los planes israelíes para expandir asentamientos en la ocupada Cisjordania.
Turquía emitió una condena enérgica, calificando el plan de Netanyahu como una extensión del “genocidio” contra los palestinos.
“Cada paso del gobierno fundamentalista de Netanyahu para continuar su genocidio contra los palestinos y expandir la ocupación supone un grave golpe para la paz y la seguridad internacionales, exacerba la inestabilidad regional y profundiza la crisis humanitaria”, denunció la cancillería turca.
“La ocupación israelí debe detener de inmediato sus planes de guerra, aceptar un alto el fuego en Gaza e iniciar negociaciones para una solución de dos Estados”, añadió.
China, a través de su portavoz de asuntos exteriores Guo Jiakun, instó a Israel a cesar sus “peligrosas acciones”. Guo reafirmó que “Gaza pertenece al pueblo palestino y es parte inalienable del territorio palestino”, subrayando que la única vía para aliviar la crisis humanitaria es mediante «un alto el fuego inmediato”.
España, representada por su ministro de Asuntos Exteriores José Manuel Albares, también condenó con firmeza: “Condenamos con firmeza la decisión del gobierno israelí de escalar en la ocupación militar de Gaza. Solo provocaría más destrucción y sufrimiento. Urge un alto el fuego permanente, la entrada masiva e inmediata de ayuda humanitaria y la liberación de todos los rehenes”.
La Autoridad Palestina, por su parte, denunció el plan israelí como un “crimen absoluto” y una continuación de la política de “genocidio, asesinatos sistemáticos, hambruna y asedio”, representando una “flagrante violación del Derecho Humanitario y las resoluciones de legitimidad internacional”.
Advierten específicamente sobre el desplazamiento forzado de al menos 800 000 palestinos.
La Autoridad Palestina anunció que inició “contactos urgentes con los organismos internacionales pertinentes”, incluidos el Consejo de Seguridad de la ONU, la Organización para la Cooperación Islámica y la Liga Árabe, para solicitar “medidas urgentes y vinculantes que cesen estos crímenes”.
La aprobación del plan de ocupación total por parte de Israel enfrenta así un rechazo internacional unánime y creciente, aumentando la presión diplomática sobre el gobierno de Netanyahu mientras la devastación humanitaria en Gaza continúa agravándose.
Con información de agencias.

