Palestina: Habla activista poítico Watan Jamil Alabed: “La Resistencia ha vuelto a poner la causa palestina en el plano internacional”
Por María Torrellas, desde Venezuela, Resumen Latinoamericano, 28 de abril de 2024.
Con motivo de nuestra cobertura de la jornada electoral de las Comunas bolivarianas, en Venezuela, nos encontramos allí con el doctor Watan Jamil Alabed, médico palestino graduado en Cuba, en la Escuela Latinoamericana de Medicina. Watan es a la vez activista político y un activo integrante de la solidaridad, que desde la diáspora palestina, se tiene con el pueblo que lucha fronteras adentro. En Venezuela, Watan visibilizó por todo lo alto la causa Palestina en los foros que intervino, y recibió como devolución el afecto del pueblo bolivariano y su dirigencia revolucionaria. Con él pudimos dialogar sobre la actual situación en Gaza y Cisjordania ocupada.
-¿Está bien caracterizar lo que sucedió el 7 de octubre pasado como una rebelión generalizada, un “basta ya” de todo lo que el Pueblo Palestino ha sufrido por décadas? Aquí en Caracas, en las charlas decían ustedes que es la consecuencia de “más de cien años de lucha”.
-Las muestras de solidaridad con Palestina aquí en Venezuela, tienen que ver con un sentido propio de los venezolanos; porque como ya sabemos, hubo una Revolución bolivariana que educó a la gente, concientizó al pueblo e hizo propias las causas justas del mundo. Y las muestras de apoyo, de cariño, no eran solamente de los dirigentes de acá sino también de un pueblo humilde al que fuimos a visitar en varias comunas. Siempre se mostraban interesados en saber cómo estábamos, cómo están nuestras familias, nuestros amigos y qué está pasando allá, y al mismo tiempo apoyando la resistencia, sabiendo qué significa ser un país colonizado. En cuanto a la pregunta, decirte que el 7 de octubre marca un antes y un después. El 7 de octubre es la respuesta natural de cualquier ser libre, que ha sido explotado, colonizado, ocupado, maltratado, asesinado, sacado de su tierra. Sufrimos demoliciones, arrestos domiciliarios, arrestos administrativos, torturas. O sea, es una respuesta natural. Sí, llegó en un momento histórico que nadie lo esperaba, incluso los “aliados” de la Resistencia Palestina. Y esto se debe ya a una etapa histórica y difícil que vivía la causa palestina. El sionismo mundial trataba de liquidar la causa palestina a través de los acuerdos de “normalización” con los países árabes. Nosotros hemos dicho siempre que es una ley física: para cada acción hay una reacción en dirección contraria, y que hace la misma fuerza o más. La respuesta del 7 de octubre cumplió con la tercera ley de Newton. Y la que gestó la reacción mundial, es más alta de lo que nosotros esperábamos. Esto es algo que muestra el carácter humano e internacionalista de la causa palestina. Jamás visto -desde la guerra de Vietnam- que en EEUU decenas de universidades son tomadas por sus estudiantes, ya van varios días de ello. Hemos visto cómo los cuerpos policiales de Nueva York y otras ciudades, entraron a las universidades a arrestar jóvenes estadounidenses. Esta es una reacción que yo creo que ningún conflicto, ningún evento o acontecimiento internacional tuvo tanta reacción de masas en todo el mundo. Incluso en Europa: la Europa que es aliada y filial de EEUU, hay jóvenes ocupando, y cuando digo jóvenes, que es el cuerpo que está moviendo todas las masas, jóvenes que supuestamente estaban perdidos, ya no tenían causa, estaban sin rumbo. Pero encontraron en la causa palestina una unión de todo el mundo, a partir de saber que esta causa los libera a ellos también.
-¿Qué balance hacen Uds. como FPLP de cómo se están dando los acontecimientos ahora?
-Nosotros somos como Frente, como partido marxista leninista, parte de las masas, del pueblo palestino, tenemos nuestras decisiones, nuestra línea política, inspirada por el pueblo. Desde nuestra fundación -hace más de 55 años ya- abogamos por una Palestina democrática, libre desde el río hasta el mar; y siempre creímos que la lucha armada es el único camino para liberar a Palestina. Y al mismo tiempo creemos que la entidad sionista no es una entidad con la que se puede dialogar o se puede negociar, o perdonar incluso. El balance viene siendo en las alianzas que tenemos nosotros con las otras organizaciones y destacamentos de resistencia; aunque no compartamos la misma ideología, pero compartimos la misma estrategia para liberar a Palestina.
-¿Cómo han logrado hacer esa unidad a pesar de la diversidad ideológica?
-La unidad pesaba primero, el primer factor es el odio al imperialismo, odio al sionismo, odio a la ocupación. El segundo factor es que todos tenemos el mismo objetivo, que es luchar contra estas fuerzas oscuras para tener una Palestina libre. Ya después de que uno tiene a su patria libre, trabaja sobre las diferencias internas. Ya cuando uno tiene su espacio geográfico libre veremos qué hacemos con nuestras diferencias políticas, ideológicas. Pero el 7 de octubre borró todas las diferencias, o sea, debe borrar todas las diferencias. Cualquiera que tiene dos dedos de frente ya no tiene por qué tener diferencias políticas con cualquier otra facción; sabiendo también las características de este tipo de colonización, donde el enemigo no tiene problema en matarte. Y las diferencias políticas y los conflictos internos dentro del estado sionista son mucho mayores que los conflictos internos dentro de las facciones políticas palestinas, pero a ellos los une el genocidio. Entonces, nosotros siempre teníamos nuestra línea política ideológica y nuestros aliados nunca han cambiado; a pesar de que tienen su línea política ideológica islámica, pero compartimos siempre la misma forma de lucha.
-En este balance que yo te preguntaba, estamos sintiendo ese dolor del Pueblo Palestino por tantas personas asesinadas. Se dicen treinta y cuatro mil, pero hay muchas más; porque hay miles de personas desaparecidas entre los escombros o en sitios de exterminio. Entonces,¿ustedes pensaban que la respuesta sionista iba a generar este genocidio?
-Siempre es esperado un hecho así. O sea, el Che decía el imperialismo es el que bestializa al hombre, lo convierte en fiera, bestia. Y el sionismo es la expresión más alta, superior de lo que es el imperialismo, el fascismo. Y esto no lo digo yo; esto está probado por historias, por anécdotas, por lo que está la gente viviendo. Y también nuestros compañeros europeos, latinoamericanos que van a misiones internacionalistas a Palestina lo vivieron en carne propia; por ejemplo Manu Pineda, un eurodiputado, Jefe del Departamento de Relaciones Internacionales del PC español. Él estuvo varias veces en Gaza, y en Cisjordania ocupada, en Belén, en Hebrón. Él cuenta – no lo cuento yo, lo cuenta un europeo- que ellos en muchas ocasiones tenían que trabajar como escudos humanos porque el soldado sionista no los mataba, porque mata por racista, mata por el hecho de que uno es palestino. Entonces tenían que pararse frente a las ambulancias y anunciar que iba un europeo para que no lo mataran. O sea, esto te muestra que este estado practica el apartheid. En Hebrón hay calles que son para colonos, y otras en mal estado que son para palestinos. Uno para ir de un lugar a otro tenía que cruzar a la acera de enfrente, pero estaba prohibido pasar porque tenía un punto de francotirador y entonces lo podían matar. Tenía que darla vuelta una hora. Sabíamos nosotros que, por las características, la naturaleza de este sionismo, se puede esperar cualquier cosa. Pero eso al mismo tiempo no te hace dar marcha atrás, al revés, te da más energía, más fuerza para salir adelante, sabiendo el riesgo que uno puede correr y la sangre que se puede derramar. Pero yo creo que vivir en una patria libre puede ser a costa de lo que sea, este es el sacrificio más alto que nosotros tenemos. “Morir por la patria es vivir” no fue una consigna en vano cuando se hizo el himno nacional cubano, porque se vivió lo que es colonialismo. Los palestinos dicen que la muerte es el camino que puede dirigirnos a nuevos caminos en la vida. Entonces, tenemos que ver si tú te mueres por gusto o mueres por un ideal; porque la idea no se muere, incluso a veces con la muerte la idea madura más. Tampoco quiero morirme mañana, o sea, siempre somos más útiles vivos que muertos. Pero cuando no hay otro camino yo creo que el sacrificio más alto que uno puede dar es morir por la patria.
-¿Cómo se posiciona el FPLP ante las posturas colaboracionistas de la Autoridad Nacional Palestina; que sabemos que está llevando a cabo detenciones de gente de la resistencia en la propia Cisjordania?
-El Frente Popular, desde su fundación y hasta el momento siempre ha abogado por la misma línea política; ya eso lo dije antes. Pero al mismo tiempo siempre ha abogado por la unidad de todas las facciones. Cuando ya se pacta en Oslo y antes en la Conferencia de Madrid, nosotros rechazamos los acuerdos; o sea, no formamos parte de ellos. Lo que pasa es que para la unidad nos mantuvimos como miembros porque somos miembros fundadores de la OLP. Y aceptamos ser parte porque uno de los ítems, o sea, de los acuerdos de Oslo era el retorno de todos los refugiados palestinos. Es decir, el retorno de la diáspora palestina -que en el ’48 eran setecientos mil palestinos, en el ’93 eran como tres millones- a sus lugares de origen. No importa si es nacido en la tierra que va a ser ocupada por el colonialismo sionista. Porque después, por guerra demográfica uno le puede ganar y puede llegar a formar su único estado democrático palestino. Y George Habash decía que el retorno de los refugiados palestinos a sus territorios, a sus aldeas, es el primer clavo en el ataúd del sionismo. Porque ellos saben que por guerra demográfica no les van a ganar a los palestinos, que tienen una estructura campesina. Oslo fue un pacto que se hizo a costa de mucha sangre, ha afectado mucho a la causa palestina, se ha perdido más tierra; ha atado el destino del palestino a la ocupación con una dependencia económica impresionante de la sociedad palestina a Israel y a las fuerzas coloniales como Inglaterra y EEUU. Y con el paso del tiempo la Autoridad Palestina ha tratado de cambiar el rol de la OLP. O sea, a través de mucha política corrupta y malas estrategias. La OLP era el órgano que representaba al Pueblo Palestino en todo el mundo y la Autoridad Palestina es un departamento. de la OLP. Lo que hizo el presidente del “estado palestino” es proclamar, muy contentos que es un estado, un estado de l 22% del territorio. Entonces, nosotros decimos que la nueva Autoridad Palestina ha convertido la OLP en un departamento dentro de la Autoridad Palestina; porque ellos han ido reemplazando todas las voces libres, todas las voces de izquierda dentro de la OLP , poniendo sus voceros. Y siempre abogando por la lucha popular, la lucha de masas. Nosotros no estamos en contra de las luchas de masas. Pero volviendo al concepto de masas, estas son el grupo de gente que tiene muchas facciones dentro de él; no comparten el mismo dolor, no comparten la misma causa, o sea que hay muchas diferencias sociales. Nosotros estamos hablando siempre de un pueblo. El pueblo comparte -vamos a decir- más ideología, pues está más dirigido. Hasta el último Congreso del Frente Popular que se ha celebrado hace dos años, nosotros tratamos de reconstruir la OLP por dentro; porque nosotros no podemos también echar a la basura los logros de la OLP, aunque sean muy pocos y empezar de cero, tenemos siempre que acumular y volver a reconstruir de acuerdo a la legislatura celebrada en el ’89, dentro de las leyes, que es la lucha armada palestina desde el rio hasta el mar, etc. En el último congreso nosotros congelamos nuestra posición en la OLP, dejamos de hablar de un objetivo. Teníamos dos objetivos, uno táctico, otro estratégico. El táctico era que en una primera instancia podíamos aceptar la solución de los dos estados, al mismo tiempo no dejar de luchar por un estado; o sea, si aceptábamos los dos estados era aceptarlos bajo la única condición del retorno de todos los refugiados.
-Eso no pasó, Eso nunca se cumplió.
-Nunca se cumplió. Ya nosotros borramos esto de nuestro programa político y siempre estamos hablando de un sólo estado con la misma ideología. Después del Congreso hemos formado una alianza, hemos pedido a varias fuerzas políticas formar una tercera línea política que no sea autoritaria como la de la Autoridad Palestina; o sea, que trate de unir todas las fuerzas para la lucha, incluso entre Ramaláh y Gaza, que teníamos una autoridad de Hamas y otra de Fatah, esto siempre le convenía más al colonialismo que a nosotros. Pero al final, el 7 de octubre llegó y lo hizo a la fuerza; o sea, lo hizo a nuestro favor. Tenemos ahora la mayoría de las fuerzas de resistencia en el mismo bando. La Autoridad Palestina lamentablemente está pensando todavía de una forma reaccionaria, hay que decir las cosas como son. Están todavía buscando una solución política, están todavía confiando en los EEUU, siempre en los discursos lamentando la muerte: que nosotros somos pobrecitos, que no se qué, que no sé cuanto. Nosotros no tenemos que mostrarle al enemigo que somos débiles porque no lo somos. Mi derecho yo lo voy a arrancar; que quede claro, lo voy a arrancar. Y esto es lo que más -yo creo- afecta hoy al nivel de lucha: que tú tienes un sacrificio muy alto en el terreno; tienes una línea política y un objetivo estratégico de la Resistencia muy alto, y tienes representantes a niveles internacionales que tienen un discurso blando que no llega ni a una gota de sangre de un niño palestino, ¿Me entiendes? Por eso, incluso la Autoridad Palestina, Al Fatah, cuando se habla de sacar de la cárcel a Marwan Bargouti, que es un gran dirigente de Fatah, condenado a cinco cadenas perpetuas; a pesar de ser de Fatah, o sea de nuestra derecha, él todavía tiene el ideal de Fatah conforme con nuestra línea política. Tenemos nuestras diferencias, pero no es traidor, porque los otros no tienen otra interpretación que la de ser traidores a la Patria.
-Justo acabas de dar una clave que sentimos desde fuera. Vimos un video con una niña que decía mi sangre es palestina, yo no me voy a ir de aquí. Cada madre, cada joven, cada periodista, cada anciano o anciana que está ahí, que resiste y que despide a sus seres queridos en su forma religiosa o como considere; y que decide seguir luchando y apoya la lucha directa de la Resistencia, son parte de un pueblo entero que lucha, con esa unidad común que decías, con ese objetivo, con esa cultura, con esa espiritualidad, cada cual como la sienta. Entonces la pregunta que cerraría es: ¿A pesar de todo lo que está sucediendo, de los miles de asesinadxs, ¿ustedes siguen siendo optimistas de cara al futuro inmediato?
-Bueno, te voy a comentar la introducción y después te doy la respuesta. Es cierto que hay un pueblo entero que está en lucha. Y de este pueblo nosotros aspiramos nuestra fuerza; nosotros, yo digo no como facción de la Resistencia, sino nosotros como palestinos de la diáspora, aquí en Latinoamérica, en Europa, en cualquier lado del mundo. George Habash decía que los aviones israelíes pueden bombardear nuestros campos, nuestras carpas, nuestros niños, matar a cualquiera de nosotros, pero jamás podrán matar el espíritu de lucha o el espíritu combativo en el palestino. Otro combatiente libanés e internacionalista, Georges Abdallah, que está todavía en cárceles francesas a pesar de cumplir la condena, días atrás mandó una carta desde la cárcel donde ya lleva treinta y pico de años, y a pesar de esto él todavía se mantiene con el espíritu en alto, se mantiene con esa juventud que nos inspira a nosotros, nos da mucha fortaleza. Otro comentario, nosotros tenemos muchos amigos militantes en la parte norte de Gaza, donde más mal está la situación, y un compañero nuestro, médico graduado de la Escuela Latinoamericana de Medicina (Elam), se llama Fayez, la primera vez que hablé con él habían bombardeado uno de los hospitales, Al-Awda , entonces yo lo llamo para apoyarlo, y lo que pasó fue lo contrario, que él me ha apoyado a mí. Estaban todos en un círculo: los médicos, los enfermeros y los pacientes, estaban cantando canciones de lucha. Yo creo que de estos jóvenes uno saca mucha energía para seguir adelante. Nosotros nunca vimos una derrota, la victoria siempre es dura, más en las circunstancias actuales, la Resistencia ha vuelto a poner la causa palestina en el plano internacional. Aunque nosotros hoy estamos luchando por el cese del fuego con movimientos internacionalistas en el mundo, esto no va a parar acá. O sea, no va a parar nada más con el cese de fuego, va a ir hasta liberar todo el territorio palestino: veintisiete mil metros cuadrados. Y no son esperanzas, no son cosas que nosotros decidamos, son cosas que están fundamentadas por la fuerza, el espíritu de lucha nuestro, que estamos luchando por nuestra tierra. Porque tenemos un sentido de pertenencia más alto que el colono que vino de Europa. Lo otro, por los conflictos internos que estamos viendo dentro del Estado sionista, un estado que ha estado viviendo más de dos años con conflictos internos. No han podido elegir un camino que represente a todo el mundo, las inmigraciones inversas que están ocurriendo de la misma ocupación afuera, la crisis de los 80 años que ellos tienen, que algunos rabinos están hablando de que no es ningún “estado judío” porque esto es un estado fascista. Han pasado 80 años, y el miedo que tienen estos colonos es porque cada día las operaciones de la Resistencia son más altas, toman más fuerza, no sólo en Gaza sino en Cisjordania. La ocupación dice ya he tomado tal punto, y al mismo tiempo que declara haber ocupado dicho sitio, un espacio geográfico, sale un combatiente de la Resistencia que nadie sabe de dónde y hace una operación militar allí. O sea, la fuerza de guerrilla que tienen hoy los combatientes es impresionante. Los sionistas mienten y hablan de bajas, de doce mil combatientes de Hamas muertos. Y nosotros creemos que todavía ellos no han podido, teniendo en cuenta a todas las facciones de la Resistencia, dar de baja ni al veinte por ciento de quienes los enfrentan. Tenemos también que ver el otro lado, que ellos no declaran sus muertos. Y por cifras estamos hablando de dos mil quinientos soldados israelíes muertos y el resto son heridos, con discapacidades permanentes. También están aquellos que sufren trastornos psiquiátricos. Se han vuelto locos por las cosas que han visto. En concreto, si esta lucha dura cien años o más, nosotros estamos dispuestos a luchar 100 años o más.
Transcripción : Karina Rodríguez
Tomado de Resumen Latinoamericano Argentina.