Elecciones en EE.UU: a pocos días del desenlace crece la incertidumbre
Por Raúl Antonio Capote* / Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano.
A pocos días de las elecciones del 5 de noviembre en EE.UU., la batalla por ocupar la sala oval de la Casa Blanca, se torna cada vez más cerrada, algunos datos interesantes comienzan a aparecer en los medios y crece la incertidumbre acerca de los resultados finales.
Como es común en las elecciones estadounidenses, donde se realizan votaciones anticipadas, alrededor de 33 millones de electores en Estados Unidos, han emitido ya su voto, tanto por correo (17,8 millones) como de manera presencial (15 millones) en los estados donde esta opción ya está disponible.
Texas, Florida y California encabezan las cifras con 3,3 millones de votos cada uno, mientras que Georgia y Carolina del Norte también superan los 2 millones de votos, reseña EFE.
Un elemento notorio en esta oportunidad es que, el volumen de votantes, ya supera el de cualquier elección previa, lo que indica una posible participación histórica.
Datos recientes revelan una considerable movilización entre los republicanos, en estados clave como Arizona, Carolina del Norte, Nevada y Pensilvania, en sintonía con los llamados del expresidente Donald Trump a sus seguidores, para participar antes del día oficial de las elecciones.
No obstante, camino al día 0, las encuestas publicadas últimamente sobre las presidenciales, muestran un resultado reñido entre los candidatos Donald Trump y Kamala Harris.
El candidato presidencial republicano y su rival demócrata, registran un empate, con un 47% cada uno, entre los posibles votantes, según la encuesta nacional de CNN publicada este viernes.
Resultado que coincide con un sondeo nacional del diario The New York Times’/Siena College, publicada también el viernes 25, donde Harris y Trump están empatados con el 48%.
Por otra parte, el promedio de las encuestas nacionales elaborado por ABC News/538, indica que el apoyo a Harris se encuentra en torno a 48%, mientras que Trump tiene un 46%.
Hay que tener en cuenta que esos sondeos hacen referencia a la intención de voto de los ciudadanos, pero en Estados Unidos el presidente no es elegido a través de votación directa, por lo que el llamado voto popular no permite anticipar el resultado que arrojarán las elecciones.
El presidente es escogido a través de un mecanismo de elección de segundo grado, gracias al cual el vencedor resulta ser, el que obtiene, en un número suficiente de estados, la mayoría de los votos en el llamado colegio electoral.
Los decisivos estados pendulares
En total, hay 538 votos a repartir por lo que para que un candidato resulte electo presidente tiene que obtener 270 votos.
Según el patrón de votación que resulta de los sondeos, los demócratas cuentan con 21 estados que suman unos 230 votos del colegio electoral, mientras que los republicanos cuentan con 23 estados que suman 215 votos.
Una valoración realizada por el Siena College sobre los estados pendulares, cuatro son liderados por Harris y tres por Trump, por solo un punto de diferencia.
Trump aparece adelante en Carolina del Norte, Georgia y Arizona, mientras que Harris lidera en Pensilvania, Nevada, Wisconsin y Michigan.
Sin embargo, en otros estados la ventaja es mucho más clara, Kamala Harris lleva 6 puntos por delante o más en Minnesota, New Hampshire o Virginia, mientras Trump, tiene la misma ventaja en Texas, Florida y Ohio.
En ese sentido, los estimados de las encuestadoras señalan que, por ese camino, la candidata demócrata, podría obtener 276 votos electorales, frente a 262 el candidato republicano.
Con todo, la diferencia entre ambos no es lo suficiente grande, como para vaticinar un triunfo del partido azul. La gran cruzada se está dando en estos momentos por la conquista de los votantes indecisos, elemento sumamente importante en unos sufragios tan apretados.
El expresidente y actual candidato, Donald Trump, cuenta con el apoyo decidido de sus bases, por ejemplo, en el llamado Cinturón Bíblico, un extenso territorio ubicado en el sur de Estados Unidos, que incluye al menos nueve estados de mayoría protestante, en el que Trump arrasó en las últimas elecciones presidenciales y se espera que suceda igual en las actuales.
Al mejor estilo de las llamadas repúblicas bananeras
Las autoridades de EE.UU. investigan el incendio de un buzón del Servicio Postal (USPS) con papeletas de voto anticipado y tres ataques a la sede de campaña de la vicepresidenta Kamala Harris, en hechos ocurridos en Arizona, como también el robo de boletas electorales en Florida.
Otro incidente ocurrió en Phoenix, en donde un hombre de 60 años, fue acusado de tirotear una oficina de campaña del Comité Nacional Demócrata, en un suburbio de la capital de Arizona.
Decenas de armas, miles de municiones y un lanzagranadas fueron recuperados por las autoridades en la casa del perpetrador, que también está acusado de dejar bolsas de polvo blanco en varios lugares de la ciudad de Temple.
Entretanto, en el centro de Florida, en el condado de Orange, las autoridades investigan el robo de varias boletas de un buzón del USPS, supuestamente por una persona que tenía una llave maestra. Las boletas fueron encontradas cerca de un desagüe pluvial.
Quedan pocos días para que concluyan unas elecciones, que son presentadas ante el mundo como modelo de democracia y libertad, pero donde, quien nombra al ganador, no es el soberano, es en realidad el poder real, ese que pone el dinero y sus intereses sobre la mesa.
Fuentes: Los Ángeles Time, NYT, CNN.
(*) Escritor, profesor, investigador y periodista cubano. Es autor de “Juego de Iluminaciones”, “El caballero ilustrado”, “El adversario”, “Enemigo” y “La guerra que se nos hace”.
Foto de portada: John Moore.
