Venezuela: En Caracas, la base del PSUV se prepara para el congreso
Por Geraldina Colotti.
“Uh, uh, Ubch, corazón del Psuv“. Así inicia, con una consigna dirigida a la base del partido, el discurso de la diputada Tania Díaz, quien en nombre de la dirección del PSUV, al que pertenece, encabezará el proceso de elección de los delegados en Caracas. En rueda de prensa anterior, el vicepresidente del partido, Diosdado Cabello, había ilustrado las reglas de esta nueva elección de las y los delegados (sobre la base de la igualdad de género y alta representación juvenil), propuesta por consenso o por mayoría (pero sólo como último recurso).
Partido Socialista Unido de Venezuela
Venezuela y Rusia afianzan lazos de cooperación en beneficio de ambas naciones. Este miércoles, el presidente Nicolás Maduro recibió en el Palacio de Miraflores al vicepresidente del Gobierno de la Federación rusa, Yuri Yuri Ivanovich Borisov para afianzar lazos de cooperación en beneficio de ambas naciones.
“No somos un partido cualquiera”, dijo Tania al recibir el micrófono de manos de la alcaldesa de Caracas, Carmen Meléndez, y presentar a los demás ponentes en la mesa de un abarrotado mitin en todas las gradas del gran Teatro Municipal de Caracas: además a la alcaldesa de Caracas, había la ministra de las Comunas, Noris Herrera, Nahum Fernández, jefe de Gobierno del Distrito Capital, y los jóvenes del partido como Carmen Zerpa, Beatriz Rodríguez o David Graterol. No, el PSUV no es un partido cualquiera, un partido de cuadros y movimiento, el más grande de América Latina. Y no sólo por las cifras, que registran más de 8 millones de militantes.
La participación extraordinaria en el encuentro «decidido de la noche a la mañana» -explicó la dirigente – aparece como una de las cartas ganadoras del PSUV, que actúa según el imperativo de Simón Rodríguez (el maestro del Libertador): «O inventamos o erramos». Si de la noche a la mañana se puede convocar un entramado militante puesto a prueba por el feroz bloqueo económico-financiero impuesto por Estados Unidos y sus aliados, significa que la movilización es permanente, que la fuerza es grande. Significa que no se ha perdido la orientación de la base, aunque el imperialismo lo ha dado todo. Significa que el proceso de formación permanente, fruto de la acción y la reflexión, ha continuado, a diferencia de lo que ha sucedido en otros países de América Latina.
Un proceso que avanzó de manera original, en el sentido de que logró transportar y traducir la esencia y la lección del siglo pasado, el siglo de las revoluciones, a las complejas condiciones de este siglo. Esa fue la grandeza de Hugo Chávez a la que incluso este congreso del partido que el quiso (con un año de preparación, a partir de 2006), dará créditomel día de su «desaparición física», el 5 de marzo de 2013. No por casualidad, Tania Díaz, reconocida periodista que decidió acompañar desde un inicio el proyecto chavista, recordó que el Comandante decidió dejar al partido heredero de la rebelión cívico-militar del 4 de febrero de 1992 (MBr200), con el que había ganado las elecciones presidenciales, para construir algo diferente y más adecuado a la situación: un partido -recordó Tania- que indica, desde el mismo nombre, uno de los conceptos clave en los que se basa, la unidad.
Un legado precioso y un combustible imprescindible para avanzar en las actuales aguas infestadas de tiburones, que por todas partes intentan devorar el barco bolivariano, sabiendo que constituye un bote salvavidas para cuantos y cuantas saben que no hay que rendirse al fétido viento del modelo capitalista. En un emotivo crescendo abierto por las canciones de lucha y el himno motivador del Psuv, Tania tocó todos los aspectos de la heroica resistencia del pueblo chavista, que realmente la vio en todos los colores: desde el sabotaje total a la red eléctrica, hasta invasiones mercenarias y a los ataques con drones contra el presidente Maduro y todos los líderes del gobierno, a la constante campaña de descrédito, que apunta justamente a la conciencia del pueblo, para desorientarlo y convertirlo en lo contrario.
El 23 de febrero se cumplirá el tercer aniversario de la “batalla de los puentes”, cuando el pueblo bolivariano rechazó un intento de invasión del imperialismo en las fronteras, disfrazado de envío de “ayuda humanitaria”. Tania recordó episodios inéditos de esa heroica resistencia, enfrentada a un poderoso aparato, desplegado a todos los niveles: cultural, mediático y, por supuesto, militar. Un ataque poderoso y bien sustentado de los países del continente subordinados a Washington, que acompañaron a los halcones del Pentágono: desde Colombia hasta Brasil, pasando por Argentina, como mostró la reciente investigación del periodista Horacio Verbinsky, revelando las implicaciones al más alto nivel del ejército argentino.
Como vicepresidenta de la Comisión de Comunicación Propaganda Agitación del PSUV, Tania Díaz analizó la guerra mediática, que a pesar de la asimetría de entre las fuerzas revolucionarias y las del imperialismo, ha marcado puntos importantes a favor de la revolución, sobre todo en la batalla de las ideas. Si hay una lucha real, si hay un ejercicio real del poder popular que se encamina hacia la transición al socialismo, de hecho, todavía es posible traspasar la pantalla de la mentira, o en todo caso contener sus efectos. Efectivamente, analizar el cambio que se ha producido en esta fase de la comunicación es un elemento fundamental para orientarse.
Al respecto, el presidente Maduro ha propuesto un plan de relanzamiento basado en las «3 R.net» (Resistencia, Renacimiento, Revolucionando todo), colocando en el centro del análisis a la «revolución digital», que necesariamente debe ser abordada tanto en las transformaciones económicas que en el de la guerrilla digital. “Propongo un nuevo sistema de transición al socialismo 2022-2030 -dijo Maduro- basado en la práctica, la verdad y nuestros sueños. Las 3 Rnets: resistencia a las agresiones imperialistas, Renacimiento del espíritu original de la Patria y Revolucionar permanentemente, hacerlo todo mejor”.
Sobre esta base, Tania ha puesto el dedo en el azote de las debilidades del partido, que el PSUV ha enfrentado abiertamente: la corrupción, el oportunismo, la adulación. “No te quedas en el partido para tener beneficios económicos, no te quedas con soberbia y afán de poder. Estás ahí con humildad y sentido de lo colectivo, como enseñó Chávez”, dijo Tania entre aplausos. Hay que predicar con el ejemplo, como lo hicieron Diosdado Cabello y el difunto Darío Vivas en la batalla de los puentes. Se tiene que hacer como enseñó el inolvidable maestro Aristóbulo Istúriz y como sigue haciendo Nicolás Maduro: dando ejemplo.
¿Quiénes son los militantes y militantes del PSUV? Representan “los cientos de árboles que componen el inmenso bosque de la revolución bolivariana”, escribe el director del semanario Cuatro F Gustavo Villapol, analizando el próximo congreso del PSUV. Un congreso, dice, en el que el partido “debe asumir el papel de vanguardia para plasmar las ideas y prácticas más avanzadas en este momento histórico, desde sus células básicas hasta la Dirección Nacional, pasando por un proceso de análisis de este realidad. Y de allí surgirán propuestas que apoyen la construcción de esa sociedad socialista de prosperidad y equilibrio que todos soñamos para esta etapa”.
Tomado de Resumen Latinoamericano Argentina.