Cómo blindó Bolivia su economía ante la crisis global que causan las sanciones a Rusia
Por Sebastián Ochoa.
Bolivia es el país latinoamericano más preparado para sobrellevar la crisis global causada por las sanciones a Rusia a raíz del conflicto en Ucrania, según un estudio de The Economist. Sputnik hablo con analistas bolivianos que explicaron los motivos de esta fortaleza económica.
El presidente Luis Arce manifestó que las condiciones favorables de Bolivia para enfrentar las consecuencias de la crisis ucraniana se deben a las decisiones soberanas tomadas por su Gobierno, que no permite intromisiones extranjeras al momento de decidir cómo maneja su economía ni qué tipo de relaciones lleva con otros países, como Rusia.
“Es un orgullo que la comunidad internacional nos coloque entre los países mejor preparados para enfrentar las consecuencias del impacto de un conflicto bélico armado como el de Ucrania, que nace del intento imperialista de sentar hegemonías para continuar explotando y oprimiendo nuestros pueblos”, dijo el presidente.
“Esta, nuestra visión, explica nuestro voto en las Naciones Unidas“, sostuvo Arce durante un acto en la academia militar de la ciudad de La Paz, el pasado 17 de mayo. Hasta el momento, Bolivia evitó votar en contra de Rusia en cuatro sesiones, en las cuales se pretendía acusar solamente a este país por el conflicto en Ucrania.
Para el presidente, votar en ámbitos internacionales sin ceder a presiones de otros gobiernos “nos muestra también como país soberano, no alineado con los intereses del imperialismo”.
Según Arce, ahí está la clave para mantener los buenos números macroeconómicos del país: “Gracias a esta política soberana, a diferencia de otros países, en Bolivia no hay inflación galopante ni tenemos escasez de alimentos”. Bolivia concluyó 2021 con una inflación del 0,9%, la más baja de América Latina. En lo que va de 2022, acumula una tasa del 0,4%.
El buen modelo
Omar Yujra, diputado del Movimiento Al Socialismo (MAS), preside la Comisión de Planificación, Política Económica y Finanzas. También es economista.
En diálogo con Sputnik, Yujra destacó que “hace tiempo ya habíamos señalado que la implementación del Modelo Económico Social Comunitario Productivo da buenos resultados porque nos enfocamos en el mercado interno, la distribución de excedentes, la inversión pública y políticas sociales como los bonos, transferencias y otros, que han permitido que se potencie el mercado interno”.
El diputado recordó que este modelo estuvo suspendido entre 2019 y 2020, cuando rigió el Gobierno de facto de Jeanine Áñez. Con la recuperación de la democracia, en noviembre de 2020, “Luis Arce vuelve a implementar el Modelo Económico Social Comunitario Productivo. Esto da nuevamente resultados, lo cual refleja el estudio de The Economist”.
Yujra contó que Arce había vaticinado el contexto actual años atrás, cuando aún era ministro de Economía del Gobierno de Evo Morales (2006-2019). “Haciendo un análisis de las crisis del capitalismo, las crisis que azotaban al mundo y todavía continúan, detectamos la volatilidad de los mercados internacionales”, explicó el diputado.
“Por eso nos centramos, de manera soberana, en el mercado interno, precisamente en la lógica de potenciar tanto el lado de la oferta como el de la demanda, involucrando a todos los agentes económicos en el mercado interno”, agregó.
El diputado indicó que esto se logró “a través de inversión pública, a través de políticas sociales, que han permitido a Bolivia tener crecimiento y estabilidad, aspectos que también refleja el estudio”.
La inflación dominada
Sobre la tasa inflacionaria de Bolivia, que no pareciera de este planeta, el diputado comentó que “ahorita en el mundo se está suscitando un incremento de precios. Varios países tienen tasas de inflación incluso de más del 10% y tienen fuertes problemas en sus mercados internos”.
Yujra dijo que el estudio de The Economist también sopesa que “la deuda externa de Bolivia representa el 31% del PBI (Producto Bruto Interno), es una de las más bajas de la región. Eso implica que Bolivia es solvente, tiene sostenibilidad en sus finanzas públicas”, además que la balanza comercial de 2021 registró un superávit de 1.500 millones de dólares en relación de exportaciones versus importaciones.
“Pero lo que es relevante en este caso, más allá de los sectores tradicionales, como la minería y los hidrocarburos, es que hubo un repunte en la industria manufacturera y la agroindustria“, aclaró.
Bolsillos blindados
Mike Gemio, uno de los analistas de Economía más destacados del país, coincidió con el diputado al momento de valorar el modelo económico iniciado por Morales y continuado por el presidente Arce.
“El modelo prácticamente ha generado una protección al bolsillo del ciudadano de a pie, eso es fundamental”, dijo Gemio a Sputnik. Y agregó: “la política del Gobierno está centrada en dejar de proteger los bolsillos de los que más tienen, para empezar a pensar en la mayoría, la gente que trabaja al día, que generalmente tiene problemas económicos”.
Para Gemio, la dedicación del Gobierno en cuidar los bolsillos de las y los trabajadores se evidenció días atrás, cuando injustificadamente los productores aumentaron los precios de la carne de pollo y cerdo, con el argumento del conflicto en Ucrania, que disparó el precio del maíz en varios países.
Pero según datos del Gobierno de Arce, Bolivia produce más maíz del que se consume anualmente. Por ello inició controles a los silos de los agroindustriales del oriente del país, que en algunos casos guardaban el alimento para especular con su precio.
“Cuando hay precios internacionales altos, generalmente el empresariado privado prefiere vender los productos en el exterior antes que en el mercado interno. Sin embargo, actuamos rápidamente para que esto no suscite un desabastecimiento de productos en el mercado interno”, comentó el diputado Yujra.
Y aseguró que el Gobierno de Arce “precautela la soberanía y seguridad alimentaria. Es decir que primero abastecemos al mercado interno y luego los excedentes se pueden exportar con tranquilidad”. Pero “los empresarios no lo entienden de esta manera y prefieren más el interés de su bolsillo ante que velar por el bien común”, consideró.
La intervención del Gobierno fue eficaz, porque a los pocos días de controles logró que el precio de estas carnes volvieran a su cifra anterior.
“Entre el 60 y 70% de los recursos de las familias de clase media-baja son usados en alimentación. La mayoría de habitantes de Bolivia dejan gran parte de sus ingresos en la alimentación. Si subes un poquito el precio de algunos alimentos, generas un desequilibrio en la familia”, indicó Gemio.
Y subrayó que desde 2006, cuando asumió Evo Morales, “se buscan mecanismos para que la familia mantenga niveles aceptables de consumo”. En este sentido, “los mecanismos que se tienen mantuvieron la estabilidad en el consumo y en los precios de la canasta familiar de manera aceptable. Con eso logras que a la población no afecten mucho lo que ocurra con el mercado internacional”.
Desde la implementación de estas políticas, “hemos sacado a 3,5 millones de personas de la pobreza, que representan un tercio de la población”, dijo el analista.
Tomado de Sputnik/ Foto de portada: Marco Ugarte/ AP.