El bloqueo de Estados Unidos obstaculizó el tratamiento de niños cubanos con la COVID-19
Los efectos del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos en este país, y específicamente en nuestros niños, durante la etapa más difícil de la COVID-19, fueron denunciados por la Sociedad Cubana de Pediatría (SCP).
El bloqueo estadounidense obstaculizó la entrada de insumos sanitarios para combatir la pandemia que afectó a este sensible segmento de la población.
Reportó Prensa Latina que la doctora Berta Lidia Castro, quien preside la SCP, al intervenir en el III Foro de la Sociedad Civil Cubana, bajo el lema Pensando Américas, que se efectuó en la Biblioteca Nacional José Martí, expresó que esa hostilidad de la Casa Blanca no es teoría, es objetiva y concreta.
Manifestó que, pese a ello, Cuba actuó con rapidez, poniendo en marcha un dialéctico protocolo de atención, y contó con los recursos humanos preparados y una notable capacidad organizativa.
Añadió la pediatra que también influyó en el éxito el trabajo multidisciplinario e intersectorial, el papel de la campaña de vacunación anti-COVID-19, y el humanismo, pues en ningún momento un niño con COVID-19 fue separado de su madre.
Según PL, la presidenta de la SCP aseveró que la Mayor de las Antillas tuvo una reducción de la morbilidad, las secuelas, la severidad y la letalidad; solamente en lo que va de 2022 no falleció ningún menor de edad por COVID-19.
Lamentó que muchas organizaciones no puedan asistir a la Cumbre de los Pueblos por la Democracia, que se efectuará paralelamente a la IX Cumbre de las Américas, en la ciudad estadounidense de Los Ángeles, del 6 al 10 de junio, a la cual Cuba no está invitada.
Señaló, además, que sería una buena oportunidad para que la Mayor de las Antillas mostrara los resultados favorables en la lucha contra la COVID-19 en edades pediátricas, gracias a la certera respuesta del Gobierno y el Ministerio de Salud Pública.
En la Declaración Final del Foro, los representantes de la sociedad civil cubana y actores sociales rechazaron la elaboración de un apócrifo Plan de Salud y Resiliencia, que excluyó el aporte que Cuba puede brindar al referido documento, a partir de la autoridad que le asiste en la materia.
«La cooperación brindada en la esfera de la Salud a numerosos países de la región, cuyo ejemplo más reciente es la ofrecida para enfrentar la pandemia de la COVID-19, es muestra inequívoca de la voluntad política del Estado cubano, con la participación activa de las organizaciones civiles y actores sociales, de hacer más resilientes los sistemas de Salud de Cuba y de los países en los que ha practicado este tipo de cooperación Sur-Sur», afirmó el documento.
Tomado de Granma/ Foto de portada: Ariel Ley Royero.