Cuba: Yo Voté Sí
Por Yaimi Ravelo / Resumen Latinoamericano Corresponsalía Cuba.
La Habana, 25 de septiembre de 2022.- Las nubes se tornan rojas, vislumbran el amanecer. Betty se detiene a contemplar el paisaje habanero junto a sus compañeros de escuela, reflexionan sobre la belleza de la vida y el motivo que los despertó en las primeras horas de este domingo.
Beatriz Eugenia Jerez Cuello tiene 17 años y es estudiante de 11no grado del Preuniversitario “Saúl Delgado”. En su familia hay personas con diferente orientación sexual, que de alguna forma han sido rechazadas por sus padres, por sus hermanos, por la sociedad.
En Cuba este domingo 25 de septiembre se lleva a referéndum popular un nuevo Código de la Familia y Betty siente que hoy puede tener un gesto de amor hacia sus familiares, amigos discriminados y hacia todas las personas que luchan por la igualdad de derechos ante las leyes de la nación.
“Este es un código que nos representa a todos, lo leímos. Sabemos qué implica votar Sí o votar No, yo creo que todos los jóvenes revolucionarios votaremos Sí, yo voté Sí”.
“Sí por nuestros derechos, por nuestros hermanos, por nuestros padres, por nuestros abuelos, por nosotros mismos que vamos a envejecer algún día”, -expresó Betty con la ilusión saberse haciendo lo correcto.
A la velocidad de los nuevos tiempos, las nuevas generaciones sentían que a la constitución cubana le faltaba otro empuje para parecerse más al tiempo que se vive. La ciencia avanza, se fortalece el espíritu de la nación.
Corresponde el nuevo código llevado a referéndum al principio básico de igualdad de derechos y libertad plena que recogen los artículos de la carta magna cubana.
Para la joven cubana este código por el cual votó-, “es un código inclusivo porque no importa el género, orientación sexual ni el color de piel de las personas. Creo que todos deberíamos tomar la mejor decisión, con la libertad de expresión que existe en nuestro país, siempre sobre la base del conocimiento y sabiendo que es lo mejor para nuestra sociedad que cada día avanza un poco más”.
“Estuve decidida desde que me levanté a votar Si, por Cuba, por los jóvenes, por nuestra Revolución”, -dijo.
“Este código ha ayudado a las personas a aceptarse, a comprenderse y demostrar que no son una oveja negra ni de la sociedad ni de la familia. La orientación sexual no define a la persona, sino los sentimientos y las cualidades morales. Este es un código de mucho amor y sé que se va aprobar, saltaremos de alegría y celebraremos. La Patria os contempla orgullosa por el futuro de nuestras familias”.