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Manifiesto del Día del Socialismo Feminista

Un fantasma recorre NuestraAmérica: el fantasma del socialismo feminista. Todas las fuerzas del capitalismo patriarcal se han unido para acosar a este fantasma: La cúpula de la Iglesia y el Departamento de Estado, las potencias imperiales y las burguesías locales, las transnacionales de la comunicación, la banca y la gran industria.

Una región condenada al subdesarrollo y la servidumbre, sometida mediante la colonización y el neoliberalismo, ha despertado y se ha levantado con la fuerza de un gigante para combatir todas las formas de dominación del viejo mundo. La rebelión nuestraamericana es el optimismo de los pueblos, y esta esperanza se encuentra sostenida por las manos de las mujeres, que en cada rincón de la región motorizan la organización comunitaria que avanza contra todo revés.

El patriarcado, como estructura de dominación sobre las mujeres, es el sistema político-económico de mayor permanencia en la historia de la humanidad. El capitalismo lo ha perfeccionado, sofisticado, e integrado tan plenamente a su lógica que constituye una de sus principales fuentes de acumulación de riquezas y de garantía de poder. Su naturalización ha tenido tal carácter hegemónico que sus cimientos se tornan intangibles, por ello su transformación puede ser considerada una utopía.

Lejos de ser así, el orden patriarcal forma parte fundamental de la economía y de la estructura política del capitalismo, y sin la abolición de esta lógica estaría incompleta la desaparición del sistema de clases, por lo que superar el orden patriarcal no es sólo necesario, sino inevitable.

  • Para comprender este planteamiento, basta revisar algunas de las formas patriarcales que implementa el capitalismo para su afirmación:
  • La condena de la familia al ámbito privado –lejos de los espacios colectivos que permiten la organización comunitaria,
  • la economía doméstica y la esclavitud de la mujer en el hogar –como sostén de la reproducción de la mano de obra cotidiana y generacional,
  • la explotación de las mujeres en la industria capitalista por menos salario,
  • la mercantilización del cuerpo femenino,
  • el despojo de las mujeres de su carácter de sujeto para otorgarles la figura de objeto,
  • entre otros numerosos mecanismos de acumulación de poder.
  • Así lo planteaba el Comandante Hugo Chávez, cuando en histórica alocución del 25 de octubre de 2008 –durante la celebración del noveno aniversario del Instituto Nacional de la Mujer, esbozó el carácter estratégico de la unión entre el socialismo y el feminismo como construcciones que garantizarían la plena emancipación humana y la conquista de la igualdad social.

Hoy, la bandera del socialismo feminista es alzada por todos los rincones de NuestraAmérica. Los movimientos de mujeres tienen en la conquista del socialismo la esperanza de la igualdad, y el proyecto del socialismo nuestroamericano toma al feminismo como una de sus causas fundamentales.

En la Venezuela revolucionaria, se decretó en el año 2017, el 25 de octubre como el *Día del Socialismo Feminista; oportuno homenaje al vanguardista pensamiento del Comandante Chávez y al glorioso e incansable Pueblo Mujer que construye la revolución cotidiana.

La celebración de esta fecha no sólo motiva su permanencia en la historia, sino que se convierte en un importante impulso a su estudio, profundización e implementación. La voz del Comandante Chávez se alza por todo el continente en su imborrable grito:
«¡Qué viva el feminismo socialista!, ¡Y que viva el socialismo feminista!»

¡VIVAN LAS MUJERES QUE LUCHAN!

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Foto de portada: Radio Cable.

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