Internacionales

Enrique Dussel

Por Carmen Bohórquez.

En 1492 ocurrió el acontecimiento más devastador en toda la historia de Nuestra América: la invasión iniciada desde el primer día en que Colón y su tripulación ponen sus pies en un territorio del que nunca supieron dar una explicación inteligible más allá de que había oro por todas partes. Lo demás: habitantes y culturas fueron aniquiladas en su mayor parte sin más explicación que su propia incapacidad para entenderlas. Sobre lo que sobrevivió se impuso una inmersión total en esa totalidad invasora y avasallante, al punto de convertirnos en una copia diluida de su Ser triunfante. Desde entonces y casi hasta el día de hoy España, Europa y quien resume todo esa dominación, Estados Unidos, se convirtieron en los carceleros de nuestro pensamiento.

Intentos hubo desde el propio momento de la Independencia de alertar nuestras conciencias, de enseñarnos a construir nuestra propia realidad y a afirmar nuestro propio pensamiento: Miranda, Simón Rodríguez, Bolívar, Martí, Alberdi, Bilbao, José Enrique Rodó, José Vasconcelos, Henriquez Ureña, Salazar Bondy, Leopoldo Zea, Sánchez Vásquez, Arturo Roig y el más original y completo de todos: Enrique Dussel.

En este doloroso día en que nos enfrentamos a su partida física, necesario es subrayar el papel crucial y definitivamente liberador que Enrique Dussel ha jugado en la historia del pensamiento latinoamericano desde la década de los 70 y para toda la historia futura de nuestros pueblos. Dussel no es uno más de los que transitamos por el camino de la Filosofía de la Liberación, Dussel ES el creador por excelencia de la Filosofía de la Liberación. Siendo además su mejor exponente y quien logró introducirla y hacerla respetar en la propia Europa, la que siempre se ha creído cuna de todo pensamiento filosófico. Y la hizo respetar de tal modo, que Habermas y Apel la tuvieron en alta estima y contribuyeron además a difundirla participando en frecuentes debates con Enrique Dussel, tanto en Europa como en América. Como también es el creador de la corriente de pensamiento llamada hoy ‘descolonial’ o ‘decolonial’; y segura estoy de que uno de sus más conocidos exponentes, Ramón Grosfoguel, reconoce a Dussel como su maestro.

Enrique Dussel logró, además, sistematizar ese pensamiento de la liberación al punto de hacer del mismo una verdadera Filosofía. Filosofía que como sistema de pensamiento intenta dar respuesta a todos los problemas del ser humano y en particular del ser latinoamericano; este ser que ha tenido que enfrentar y seguir luchando contra nuevos intentos de colonización que buscan siempre subsumirlo desde todas las perspectivas del saber. Allí están como prueba su Pedagogía de la Liberación, su Ética de la Liberación, su Política de la Liberación, sus Tesis de Economía Política, su visión liberadora de la Mujer y todo cuanto escribió para mostrarnos la verdad de la conquista y colonización de América, desde que los sucesivos amos del mundo occidental pusieron sus ojos codiciosos sobre nuestra tierra; pero sobre todo mostrarnos que todo pueblo encierra en sí mismo las claves de su propia y definitiva liberación.

Honor y gloria para siempre a Enrique Dussel, guía imprescindible en esta lucha permanente por la definitiva y total liberación de Nuestra América.

Tomado de Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad.

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