Perú: El afán del fujimorismo por borrar la memoria
Una reciente publicación que exalta el autogolpe de Fujimori podría encajar en la figura de apología del delito, según expertos.
El libro infantil que reivindica el autogolpe de Estado de Alberto Fujimori de 1992 exhibe con claridad el afán del fujimorismo por borrar la memoria de los peruanos.
Lo particular es que esta publicación, obra del Fondo Editorial de Congreso dominado por los fujimoristas, podría encajar en la figura de apología del delito al exaltar las acciones de una persona que hoy purga prisión.
Así lo refiere el constitucionalista Omar Cairo, quien explica que el contenido de “Constitución política del Perú para escolares” es causal del delito mencionado en el artículo 316 del Código Penal.
“El que quien públicamente exalte, justifique o enaltezca un delito o a la persona condenada por sentencia firme como autor o partícipe será reprimido con pena privativa de la libertad no menor de un año ni mayor de cuatro años”, dice el artículo.
Para Cairo, este es el caso de Fujimori, expresidente durante el periodo 1990-2000 que fue condenado por crímenes de lesa humanidad y corrupción cometidos durante su régimen dictatorial.
“Corresponde al Ministerio Público investigar por qué se exalta a una persona que políticamente puede ser criticada o celebrada, pero que está purgando prisión”, le dijo el abogado al semanario Hildebrandt en sus trece.
El polémico libro
El libro “Constitución política del Perú para escolares” desató la polémica luego de que se detectara en la página 22 una viñeta que reivindica y justifica el autogolpe de Fujimori del 5 de abril de 1992.
En la imagen se representa el mensaje a la Nación que dio Fujimori aquel día y se señala que “dejó sin efecto la Constitución de 1979 a fin de devolvernos la paz y reconstruir la economía del país”.
Lo que el texto no dice, sin embargo, es que, en aquel mensaje, significó el quebrantamiento del Estado de derecho pues Fujimori ordenó disolver el Congreso y desmantelar el sistema de justicia.
En otra página, la 23, el libro intenta respaldar la Constitución asegurando que 80 congresistas de diversos partidos participaron en su elaboración y que un 55.3% de los peruanos lo respaldó.
No obstante, una vez más se vuelve a omitir la verdad pues no se dice que 44 de los 80 congresistas eran adherentes al fujimorismo.
Tampoco se menciona que si bien el respaldo llegó al 52.3% —tres puntos porcentuales menos que lo que indica el libro—, casi 3 millones y medio de peruanos se ausentaron en el referéndum para aprobar dicha Carta Magna.
Fondo capturado
Para el fujimorismo no hay verdad que valga si de por medio está su futuro político —con Keiko Fujimori aspirando a una nueva postulación— y el manejo de los recursos públicos que el ser funcionario les ofrece.
Para muestra están las responsables del descarado libro antes mencionado, una obra del Fondo Editorial del Congreso que ha sido capturado por el fujimorismo desde agosto de 2022.
A la cabeza de esta institución están las fujimoristas Milagros Takayama y Milagros Salazar de la Torre, quienes, pese a no tener experiencia en la materia, fueron nombradas jefa y editora general del Fondo Editorial.
Ambas fueron designadas por la también fujimorista Martha Moyano cuando esta era primera vicepresidenta del Congreso y se modificaron las normas para que puedan tomar el control del Fondo Editorial.
Takayama, antes trabajadora en la Comisión de Relaciones Exteriores, hoy gana S/ 16,828 mensuales por su cargo en el Fondo Editorial; mientras que Salazar de la Torre, enfermera de profesión, recibe S/ 13,415.
Tomado de Resumen Latinoamericano – Argentina/ Fuente: Servindi.