Bolivia acusa a oposición de Santa Cruz de alentar la violencia
El conflicto liderado por el gobernador Fernando Camacho y el cívico Rómulo Calvo es alentado con un discurso de odio y regionalismo que se manifiesta en hechos de violencia, discriminación y racismo contra los pueblos indígenas como el ayoreo, denunció la ministra de la Presidencia de Bolivia, María Nela Prada.
Las declaraciones de Prada se produce luego que avanza el paro impuesto por los grupos de derecha del departamento de Santa Cruz, incluido el gobernador de la entidad, Luis Fernando Camacho, que aumentan los enfrentamientos y heridos en diversos puntos.
Por otra parte, una gran marcha ingresará este lunes por los cuatro puntos cardinales de la ciudad de Santa Cruz, para protestar contra el paro indefinido promovido por autoridades y cívicos de esa región, informó el ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño.
En ese marco, el funcionario del Estado lamentó los enfrentamientos registrados en inmediaciones de la refinería de Palmasola, donde había camiones cisterna para proveer de combustible a diferentes surtidores de esa ciudad.
La vocera de la Central Ayorea Nativa del Oriente Boliviano (Canob), Rocío Picanere, denunció que son cinco comunidades ayoreas en el municipio de Concepción, departamento de Santa Cruz, que sufrieron la quema de sus viviendas, golpizas, agresiones y la vulneración de sus derechos.
“Repudiamos contundentemente el abuso y atropello que venimos sufriendo como uno de los pueblos más vulnerados que formamos parte del Estado Plurinacional de Bolivia”, dijo la dirigente indígena.
La ministra Prada sostuvo que eos grupos también apela al miedo, con amenazas como la declaratoria de “muerte civil” a quienes piensan distinto a su línea de acción.
“Pretende silenciar la voz de quienes piensan distinto, es a través de estas amenazas de decir que se declarará con muerte civil en Santa Cruz o quien no está de acuerdo es traidor a Santa Cruz”, denunció en Bolivia Tv.
Camacho y Calvo lideran un paro que empezó el sábado 22 y que hasta el momento se caracterizó por hechos de violencia y racismo en un medida de carácter político contra el Gobierno por diferencias en cuanto a cuándo celebrar el censo nacional.
Mientras las autoridades centrales dejaron la decisión a una comisión técnica para decidir la fecha, el movimiento cruceño sostiene su postura de que el censo sea en el año 2023, mientras el Gobierno ha manejado la postura de que se realice en 2024.
Tomado de TeleSUR/ Foto de portada: Europa Press.