Internacionales

¡Desde México, al habla los médicos y médicas cubanas!

Tlaxcala. Parte 2

Por Maribel Acosta Damas* / Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano.

… Desde que ustedes llegaron, yo me siento más feliz

La enfermera Gloria

En ese pequeño estado mexicano que es Tlaxcala, la brigada médica cubana llegó desde hace tres meses,  precedida por una feroz campaña mediática que intentaba desacreditar a los galenos e indisponerlos con sus colegas mexicanos, sus familias y pacientes.  Pero hay refrán popular que dice que la sangre puede más que cualquier cosa. Y eso se cumple aquí. La sangre y algo más: la profesionalidad y el amor.

El doctor Yokjarnes Hall Marín es un mulato imponente, oncólogo, cienfueguero de 42 años, director de los servicios de oncología de la provincia cubana. Tiene un reto mayúsculo: no hay servicios de oncología en Tlaxcala. “Me fui incorporando a las interconsultas de medicina porque sí existe la enfermedad oncológica pues prevalecen enfermedades renales crónicas y la diabetes. Y esto también atenta sobre el sistema inmunológico. Entonces es donde aparecen las enfermedades oncológicas. Los servicios de oncología se encuentran en Ciudad de México, es cerca pero hay pacientes que no pueden acceder de Tlaxcala hasta la  capital”.

Dr. Yokjarnes Hall Marín.

“Creo que es un reto implementar un servicio de quimioterapia en nuestro hospital de Tlaxcala.  Ese es mi afán. Me impactó cuando me dijeron que venía para México porque este país tiene muy buena medicina y muy buenos especialistas, en particular en el área oncológica. Y extender esos los servicios de excelencia a todo el país es el propósito de este gobierno”.

Maribel Acosta Damas- ¿Cómo es su relación con los colegas mexicanos?

Dr. Yokjarnes Hall Marín- Ya yo cumplí misión en la República Bolivariana de Venezuela y formé parte del proyecto Más médicos para Brasil. Esta es mi tercera misión de cooperación médica. No hemos tenido ninguna contradicción con los profesionales mexicanos, intercambiamos opiniones sin barreras, aclaramos dudas, hacemos interconsultas de manera formal e informalmente.  A veces en un pasillo nos detienen y nos piden opiniones, sin resistencias y sin prejuicios. Eso fue de las cosas que me impactó porque yo vine en el segundo grupo y ya los compañeros del primer grupo, cuando yo llegué vi que había una química y me quedé asombrado y me dije ¡¿Con tan poco tiempo que llevan mis compañeros, ya tienen esta familiaridad?!!!! Y eso me dio más confianza y seguridad. Uno viene pensando que no nos querían, pero no fue así.  Al contrario. ¡Fue una alegría inmensa!

Maribel Acosta Damas- ¿Cómo es tu día a día?

Dr. Yokjarnes Hall Marín- Yo quisiera más… Acostumbrado en Cuba corre y corre por los pasillos buscando cosas, aendiendo urgencias… aquí me siento flojo… por ahora… pero bien, con voluntad de ayudar.

… Tengo tres hijos, mi esposa, mis padres… Aquí estoy… ¡Confianza, familia!

Una mujer joven cumple misión por primera vez. La Doctora  Lianne Valcarcel es especialista de primer grado en gastroenterología. “Agradezco mucho a mi país por haberme enviado a esta tierra hermana a brindar colaboración médica a los más necesitados. Antes de formarme como médica fui Licenciada en enfermería, me dieron la oportunidad de estudiar medicina después y al terminar, por vía directa hice la especialidad en gastroenterología”.

Dra. Lianne Valcarcel.

Maribel Acosta Damas- ¿Cómo te ha ido en esta primera vez para ti?

Dra. Lianne Valcarcel- Al principio tenía el temor de cómo nos recibirían pero todo ha ido muy bien. Para los necesitados estamos aquí, vinimos a servirles. Los pacientes hablan bien de nosotros y cuentan siempre sobre la forma en que los examinamos y en que les correspondemos como ellos se merecen.  Yo tengo una familia que me apoya y velo la noche para comunicarme con ellos… Apenas llevo veintiséis días aquí… Allá tengo a mi hijo de once años, a mi mamá, a mi esposo. ¡Ellos me extrañan, pero están firmes ahí!

Especialista de Tercer grado en nefrología,  la Doctora Zoraida Rodríguez es una cátedra de la nefrología en Cuba con treinta y dos años de experiencia. Santiaguera  de pura cepa, hilvana las palabras con la música de su tierra.

“Esta es mi tercera misión. Estuve prestando servicios en el Hospital universitario Korle-Bu de Acra, Ghana durante dos años y fue impactante.  Trabajé en Venezuela durante cuatro años dirigiendo  el Hospital Simón Bolívar, allí teníamos también una sala para la atención de los colaboradores cubanos. Durante la pandemia de Covid 19 estaba allí, todo un reto profesional y humano. Y ahora aquí en México.”

Desde el punto de vista médico, en Tlaxcala me llama la atención la gran cantidad de pacientes enfermos renales: los pacientes dialíticos; los que están en pre diálisis, ya diagnosticados pero aún no están en la etapa final de la enfermedad y otros aún pendientes de diagnóstico.”

“Casi al minuto de llegar, he tenido la posibilidad de estar en las consultas, en las salas de hospitalización y en el Departamento de diálisis y verdaderamente me he sentido acogida: por el amor, el cariño y la sensibilidad al dirigirnos hacia pacientes y colegas. Se ha dado la posibilidad de trabajar en equipos multidisciplinarios y atender a los pacientes con enfermedades renales con otros  especialistas de nuestra brigada médica. Eso ha sido un gran aporte porque la atención de las enfermedades renales requiere de la participación de cardiólogos, endocrinólogos y cuantos puedan complementar la atención y el tratamiento.”

Dra. Zoraida Rodríguez.

“Pienso que nuestra historia aquí está por escribirse. Se hace camino al andar en este ejército de batas blancas. Yo di mi paso al frente… sin importar la campaña en contra que algunos estaban haciendo, porque donde nosotros llegamos, no hablamos. Con nuestro quehacer y trabajo  cambiamos los sentimientos.

Como brigada médica tenemos el reto de ofrecer nuestros conocimientos, atender a nuestros pacientes, colaborar con los colegas mexicanos… brindar amor…

Maribel Acosta Damas- ¿Quién es en Tlaxcala su mejor amiga o amigo?

Dra. Zoraida Rodríguez- Le voy a hablar con la sinceridad de mi corazón: Gloria, mi enfermera mexicana de diálisis es mi mejor amiga. Ella es una conocedora de todos sus pacientes. Yo soy una preguntadora, para saberlo todo y poder ayudar y Gloria lo recuerda todo de ellos, los conoce y sabe los detalles. Todos los días de esta vida nos vemos y es como si la conociera de siempre. Incluso, a las mujeres de la brigada cubana nos llevó a la peluquería para que estuviéramos – según ella- más bonitas. Ya nos trae a sus  familiares cercanos para que los atendamos, una muestra de extrema confianza. Y otro día me dijo: Antes tenía un carácter muy introvertido pero desde que llegaron ustedes yo me siento más feliz. Y cada día nos da un abrazo de bienvenida y de despedida de la jornada.

(*)  Periodista cubana, especializada en televisión. Es profesora de la Facultad de Periodismo de la Universidad de La Habana y   Doctora en Ciencias de la Comunicación.

Fotos: Maribel Acosta Damas.

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