Cuba

El derecho a soñar

Por Yaimi Ravelo / Resumen Latinoamericano Corresponsalía Cuba.

-¡Buen día mis niños!

-¡Buenos días!

La algarabía ensordecedora estremece la pequeña aula. Tal vez los adultos lo hayan olvidado, pero son éstos los buenos días más esperados por las niñas y los niños después de las largas vacaciones de verano.

-Estoy tan encantada de que todos estén aquí, soñé con este primer día todos los días de las vacaciones. Yo quiero saber si ustedes soñaron lo mismo que su maestra.

-Siiii.

-Pero así no, quiero que cada uno me cuente como se siente, qué hicieron en las vacaciones y por qué tenían tantos deseos de comenzar nuevamente en la escuela.

La disciplina y el orden regresa a las mesas pero persiste la alegría y el brillo de los inocentes ojos, alzan las manos, todos quieren contar, abrazar con palabras la bienvenida de la maestra Maritza.

En el aula de 3er grado de la escuela primaria Vo Thi Tang habita el mundo mágico de la infancia, tal vez los adultos olvidaron que una buena maestra es cazadora de sueños. No es solo cosa de matemáticas, español e historia, es mostrarles el camino para ser mejores seres humanos. Las palabras mágicas de Maritza son, respeto, amistad, solidaridad, amor, Patria.

-A ver Roberto, permiso, cuéntanos todo.

Roberto y sus compañeros ríen.

-Uf, yo estaba que me explotaba por venir, me gusta mucho la escuela.

-A mi también me gusta la escuela, -interrumpe Enzo.

-Enzo ya que interrumpiste a Roberto dime por qué tenias ganas de comenzar las clases.

-Quiero aprender cosas nuevas, -dice Enzo después de ser sutilmente regañado.

-Recuerden todos que cuando un compañero está hablando todos debemos escuchar, es de mala educación interrumpir una conversación. Ahora Lauren levanta la mano, vamos a escucharla.

-Yo tenia muchas ganas de venir porque me gusta todo lo que usted nos enseña y tenia muchas ganas de verla.

-Muchas gracias Lauren, yo también tenia muchos deseos de verlos a todos ustedes, era mi gran sueño. Escuchemos ahora a Sergio.

-A mi me gusta venir a la escuela porque están todos mis amigos y tengo las mejores clases con la mejor maestra del mundo.

Maritza López Saez está emocionada, todo el amor del mundo esta ahora mismo entre sus manos en un espacio mágico de paredes adornadas por símbolos patrios. Recomponiendo su voz, disimulando la lágrima camina cerca de Mauro y éste le susurra “maestra yo estaba muy aburrido en la casa, aquí nos divertimos mucho más”. Todos explotan de risa y la algarabía se apodera nuevamente de la pequeña aula.

-Pues le tengo una muy buena noticia, este curso nos vamos a divertir mucho más. Y como sorpresa busquen entre sus libros “El mundo en que vivimos”, este año vamos a descubrir maravillas de la historia de nuestra Patria.

Los pioneritos hojearon el libro, todos ya saben leer, a lo lejos se escucha el eco de las exclamaciones: Maceo! Mariana! Martí! El Ché! Mira a Fidel!…

El aula de 3er grado de la escuela Vo Thi Tang está en otra dimensión, en esa que solo se construye cuando se ejerce con amor la profesión de educar. Puede existir en Cuba el más difícil obstáculo: pandemia, bloqueo, listas, campañas mediáticas, medidas, crisis; sin embargo, el mundo de los niños se resguarda, se protege del contexto cruel que hoy hace historia.

Las escuelas cubanas este 4 de septiembre abrieron sus puertas al curso 2023-2024. Son tiempos duros para las familias cubanas, pero hay una esperanza, un rayo de luz, cuando sus hijos vestidos con pañoleta reparten sueños con la sonrisa más bella que sale del alma.

Fotos: Yaimi Ravelo / Resumen Latinoamericano Corresponsalía Cuba.

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