El canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, dio la bienvenida este 18 de noviembre a los 361 cubanos residentes en 54 países, que asisten a la IV Conferencia “La Nación y La Emigración”.
“Esta Conferencia constituye muestra afortunada e inequívoca del fortalecimiento continuo e irreversible de los vínculos entre Cuba y sus nacionales en el exterior; resultado del Diálogo iniciado en noviembre de 1978, promovido e impulsado por el Comandante en Jefe Fidel (Castro)”, expresó el jefe de la diplomacia en la isla, citado en su cuenta de la red social X.
Rodríguez Parrilla explicó a los participantes, la actual situación económica complicada que atraviesa la isla, con impactos sociales visibles, que afectan el nivel de vida, la satisfacción de necesidades, los servicios sociales y el bienestar de nuestro pueblo.
“Sufrimos el efecto combinado del recrudecimiento extremo del bloqueo económico, comercial y financiero (impuesto por EEUU desde 1962), las secuelas de la pandemia del COVID-19 y el impacto económico de la crisis global y de los conflictos internacionales en curso”, subrayó el canciller.
A su vez, reiteró el más profundo agradecimiento por los pronunciamientos y ayudas fraternas de los cubanos residentes en varios países del mundo, “tantas veces acompañadas de ese amplio y universal movimiento de solidaridad con Cuba”.
También agradeció los donativos recibidos durante la etapa más crítica de la pandemia del COVID-19, que contribuyeron –dijo— “a garantizar los insumos necesarios para la campaña de vacunación, así como la ayuda enviada ante fenómenos meteorológicos que nos han afectado”.
Por otra parte, el ministro cubano de Relaciones Exteriores subrayó que el gran desafío en política exterior continúa siendo la hostilidad de los gobiernos de EEUU, y su empeño en negar a Cuba su derecho a la libre determinación e independencia política.
“Tenemos la voluntad de construir una relación respetuosa y civilizada con el gobierno de EEUU, pero este carece de la voluntad política para avanzar en esa dirección. Durante los años 2015 y 2016, e incluso 2017, demostramos esa disposición y se constató también que sería algo posible y mutuamente beneficioso”, enfatizó Rodríguez Parrilla.
Destacó además que las dos conferencias “La Nación y la Emigración” celebradas en 1994 y 1995, permitieron profundizar el acercamiento, ampliar la composición de los participantes en el diálogo, procedentes de varios países, no solo de EEUU, y se logró también diseñar con mejor estructura y mayor institucionalidad la política de acercamiento e inserción de los entonces emigrados en la vida nacional.
También resaltó que la participación en la vida nacional de los cubanos que viven fuera del país es cada vez más activa y se expresa en la economía y la actividad comercial, y se amplían las oportunidades para un papel creciente de ellos en el desarrollo del país.
“Nuestra cultura es una sola. Se ilustra en el pensamiento y la creación artística y literaria de todos, en el desarrollo de la ciencia y la vida académica, en el ejercicio del deporte y en otras facetas de la vida nacional”, enfatizó el titular de Exteriores.
Al cierre de la primera jornada, la subdirectora general de la Dirección General de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores, Laura Pujol, expresó que los cubanos residentes en el exterior que asisten a la conferencia “han podido plantear con total transparencia sus inquietudes, así como sus sentimientos patrióticos más hermosos”, en una publicación de cancillería Cuba en la red social X.
Tomado de Sputnik/ Foto de portada: @BrunoRguezP
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