Milei apuesta a conseguir financiamiento del FMI para su programa económico
Por Juan LehmannEl presidente argentino busca créditos por 15.000 millones de dólares para levantar las restricciones cambiarias hacia mediados de 2024. Desde las dudas del organismo hasta el margen de negociación del Gobierno: “el FMI es consciente de que no puede quedar asociado a un colapso”, dijo a Sputnik el economista Martín Kalos.
“Si me ponen 15.000 millones de dólares, abro el cepo”: la frase pronunciada por el presidente Javier Milei a inicios de marzo —referida a la eliminación de restricciones para el acceso al dólar oficial, en un marco de escasez de divisas— podría empezar a materializarse en abril, cuando su ministro de Economía Luis Caputo viaje a Washington para reunirse con autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El titular del Palacio de Hacienda participará de las Reuniones de Primavera de las Juntas de Gobernadores del FMI y del Banco Mundial, que tendrán lugar entre el 15 y el 20 de dicho mes. En ese marco, buscará avanzar hacia la rúbrica de un nuevo acuerdo para el desembolso de fondos “frescos” que, según el mandatario, son necesarios para la profundización de su programa económico.
El apremio también estará marcado por la finalización del cupo a las importaciones, esquema que consistió en diferir en cuotas el pago de bienes provenientes del exterior (25% en enero, 50% en febrero, 75% en marzo y 100% en abril). La medida —que supuso la generación de una nueva deuda comercial— vence el 13 de abril, y las consultoras privadas estiman que podría demandar unos 3.000 millones de dólares adicionales.
En ese marco se inscribe el objetivo del Gobierno de conseguir financiamiento externo, no sólo para reforzar las reservas del Banco Central sino también para avanzar hacia la liberalización del mercado cambiario y lograr unificar las distintas cotizaciones del dólar que conviven debido a las restricciones para el acceso a la divisa.
Las dudas en Washington
“Para levantar el ‘cepo’ al dólar se necesitan fondos, por lo que la pregunta central es cómo van a conseguirlos. Milei viene prometiendo desde diciembre de 2023 la llegada de desembolsos frescos, pero hasta ahora no ha habido ningún movimiento concreto que augure que se concrete el desembolso”, dijo a Sputnik Martín Kalos, economista y director de EPyCA Consultores.
“Hay una discusión entre los países del FMI que se resisten a colaborar con Argentina —que es un incumplidor serial de metas— y los más flexibles. Hoy, sin crecimiento, no podemos cumplir con el cronograma de pagos de deuda. Sin embargo, el Fondo es consciente de que no puede soltar la mano al Gobierno y quedar asociado a un colapso“, sostuvo el consultor.
La lectura del investigador se condice con la de las autoridades de la entidad multilateral, quienes vienen advirtiendo sobre los riesgos que conlleva el drástico ajuste fiscal esgrimido por la administración Milei. De hecho, Rodrigo Valdés —director del Departamento del Hemisferio Occidental del organismo— advirtió que “es necesario mejorar la calidad del ajuste fiscal, no la cantidad”.
La manifiesta dependencia hacia el Fondo Monetario responde, según el consultor, al alineamiento irrestricto del Gobierno argentino hacia la Casa Blanca, en perjuicio de alianzas con potencias emergentes. “Milei se adhirió tanto a Estados Unidos que quedó sin margen para negociar. Alejado de China y de los BRICS, ya no tiene alternativa para conseguir prestamistas: no hay plan de contingencia si las condiciones de Washington y del FMI no le resultan razonables”.
“Todo recurso que uno renuncia a usar, es una herramienta menos. El alejamiento de los BRICS es básicamente eso: por dogmatismo, el Gobierno rechaza potenciales alianzas que serían de gran utilidad”.
Tomado de Sputnik/ Foto de portada: Rodrigo Abd / AP