¿El Fin de la USAID? Contradicciones y revelaciones sacuden a la agencia
Por Raúl Antonio Capote*/ Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano.
Desde la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, la USAID ha sido sometida a intenso escrutinio, según plantea la nueva administración debido a fallas en la organización, falta de transparencia en el financiamiento a organizaciones globales y dudas sobre la capacidad de la Agencia para alinear sus programas con “el interés nacional estadounidense”.
En días recientes, la administración Trump identificó programas de USAID, que iban desde la distribución de anticonceptivos en Afganistán hasta el financiamiento a programas de armas biológicas.
En medio de toda la debacle que ha provocado tal situación, se conoció que la organización internacional, canalizaba fondos regularmente a causas vinculadas al imperio de George Soros.
Por ejemplo, registros de gasto del gobierno estadounidense muestran que el East-West Management Institute, respaldado por la Open Society Foundations de Soros, recibió más de 260 millones de dólares en subvenciones de USAID para, entre otras cosas, promover el estado de derecho en Georgia, fortalecer la sociedad civil en Uganda y avanzar en las negociaciones de adhesión de Serbia a la Unión Europea, según reporta la AP.
Un programa similar fue respaldado por Soros en Macedonia, donde una filial local llamada Foundation Open Society-Macedonia recibió fondos de USAID a través de las Open Society Foundations para impulsar «una agenda progresista».
Otras organizaciones vinculadas a Soros que recibieron financiamiento incluyen el Centro Anticorrupción de Ucrania y Transparencia Internacional.
Tras el cierre temporal de los fondos de la USAID, se conocieron otros proyectos financiados por la Agencia, por ejemplo 1,5 millones de dólares para medidas de diversidad en Serbia, 70.000 dólares para un musical sobre Diversidad, Equidad e Inclusión en Irlanda o los increíbles 15 millones de dólares en condones enviados a Afganistán.
Agrega AP que el ente supervisor de la agencia advirtió en un duro memorándum de enero que USAID había creado «vulnerabilidades» graves y determinó que las subvenciones eran insuficientemente monitoreadas.
En ese orden de cosas se conoció que, Mahmoud Al Hafyan, quien dirigía una ONG siria, recibió 122 millones de dólares de USAID entre 2015 y 2018, destinados a kits alimenticios para refugiados sirios. Sin embargo, se alega que Al Hafyan desvió millones para el Frente Al-Nusra, en Siria.
La realidad puesta sobre la mesa demuestra además que miles de toneladas de granos financiados por USAID para alimentar a civiles terminaron en manos de grupos armados.
Veremos que en que termina esta historia, pero ya queda claro para muchos que no solo huele a podrido, la descomposición es total por esos reinos del Tío Sam.
(*) Escritor, profesor, investigador y periodista cubano. Es autor de “Juego de Iluminaciones”, “El caballero ilustrado”, “El adversario”, “Enemigo” y “La guerra que se nos hace”.