La CIA y los proyectos mediáticos contra Cuba, nada nuevo bajo el sol
Por Raúl Antonio Capote* / Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano.
Puede que, para muchos, el trabajo que los servicios especiales estadounidenses y europeos realizan, hoy en día, en los medios corporativos, sitios digitales y las redes sociales es una novedad, pero no es así, les propongo retroceder unos pocos años en la historia de la CIA.
En 1948, un señor nombrado Frank Wisner, fue designado director de la Oficina de Proyectos Especiales (OSP), al año de creada la CIA.
El jefe de la OPC creo en 1948 un programa destinado a influir, y de ser posible, controlar a los medios de comunicación domésticos y foráneos, cuyo jefe de operaciones fue Richard Helms.
En la década del 50 al menos 3000 empleados asalariados de la CIA estaban destinados solo a propaganda.
Docenas de agencias de prensa y periódicos en lenguas extranjeras respondían a este modo de financiamiento y operación. La CIA tenía inversiones en la mayoría de los grandes medios del mundo.
Hubo una fuerte infiltración en el Servicio de Prensa de Editores de América Latina. Era propiedad de la CIA el Continental Press Service, con sede en Washington, dirigido por un oficial de los servicios especiales estadounidenses, que tenía entre sus principales tareas la de proveer de credenciales de prensa a operativos que necesitaran una cobertura oficial urgente. Se apropiaron igualmente de Visión, la revista noticiosa semanal que era distribuida en toda Europa y América Latina.(1)
El director de la International Organizations Division (IOD), Thomas Braden, revelaría años después:
“Si el director de la CIA en el presente quiere atacar a alguien, por ejemplo en Europa a un líder laborista, usa 50 000 dólares de los que no tiene que dar cuenta a nadie. Simplemente no tiene límites y no hay personas que estén fuera de su alcance en esta guerra, la guerra secreta…” (2).
En 1964, la editorial Random House publicó el libro Invisible Government, de David Wise y Thomas Ross, todo un bestseller en aquellos años. El libro exponía el papel desempeñado por la CIA en la política externa de los Estados Unidos.
Lo que incluía los planes en Guatemala (Operación PBSUCCESS) e Irán (Operación Ajax), además de la Invasión de Playa Girón o Bahía de Cochinos (Operación Pluto), como le nombran en los EE.UU.
En mayo de 1967, Thomas Braden escribió un artículo titulado “Estoy feliz de que la CIA sea inmoral”, en el Saturday Evening Post. Allí defendía las actividades de la División de Organizaciones Internacionales de la agencia.
La Agencia actuaba con absoluto desprecio de las leyes, no rendía cuentas, ejecutaba sus planes con total amoralidad en defensa de los intereses del verdadero poder. “Alguien tiene que hacer el juego sucio”, como acostumbran a decir sus más encumbrados jefes.
La campaña contra el gobierno de la Unidad Popular en Chile fue “generosamente” financiada por la CIA. “…Además de financiar a los partidos políticos, el Comité 40 (3) aprobó grandes sumas para sostener a los medios de oposición y para mantener así una campaña de oposición implacable. La CIA gastó un millón setecientos mil dólares para apoyar a El Mercurio, el principal periódico del país y el canal más importante de propaganda contra Allende.
En la conjura contra Cuba y sus cinco heroicos combatientes antiterroristas, Gerardo, René, Fernando, Antonio y Ramón, se puso en evidencia la verdad del trabajo de la inteligencia yanqui con los medios de comunicación.
“La presencia de periodistas de Miami en las nóminas de pago del gobierno de EE.UU., va a lo más intrínseco en la injusta condena de los Cinco, quienes no solo fueron víctimas de una acusación por causas políticas, sino también de la operación de propaganda realizada por el gobierno”.(4)
Decenas de millones de dólares se han utilizado y se utilizan para intentar mancillar a la Revolución Cubana, no solo mediante el pago de periodistas y medios de prensa del mundo entero, sino también para fabricar y financiar a los llamados medios digitales independientes, como El Toque, CiberCuba, Cubanos por el Mundo, Dime Cuba, Periódico Cubano y compañía.
No hay nada nuevo bajo el sol. Cuba ha denunciado denunció varias veces las campañas difamatorias fabricadas desde los Estados Unidos por la CIA, para intentar el aislamiento internacional de la Revolución.
1 http://www.lajiribilla.cu/2003/n092_02/092_19.html
2 Thomas Braden, interview included in the Granada Television Program, World in Action: The Rise and Fall of the CIA. 1975.
3 Organismo de los servicios secretos norteamericanos.
4 http://mesaredonda.cubadebate.cu/noticias/2011/05/09/documentos-revelan-periodistas-de-miami-eran-pagados-para-orientar-juicio-cinco-cubanos/
(*) Escritor, profesor, investigador y periodista cubano. Es autor de “Juego de Iluminaciones”, “El caballero ilustrado”, “El adversario”, “Enemigo” y “La guerra que se nos hace”.
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