Cuba

Cuba siempre contigo, voces de la solidaridad

Por Deisy Francis Mexidor */ Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano-Cuba

Pese a la lluvia que persistió en ser una participante más, cerca de un centenar de representantes de organizaciones políticas, solidarias, no gubernamentales y movimientos sociales de Estados Unidos se congregaron frente a la embajada de Cuba en Washington DC para repudiar el reciente ataque terrorista contra esa sede diplomática.

Dejen vivir a Cuba” fue el clamor común, unánime, entre los presentes en esta jornada de condena, en la cual fueron más de una decena los oradores.

Todos reiteraron, como dijo la activista política Gloria La Riva que estaban y estarían siempre junto a Cuba.

La Riva recordó que el Gobierno de Estados Unidos ha practicado el terrorismo sistemático contra la nación antillana desde el comienzo de la Revolución cubana.

A lo largo de estos años -subrayó- Cuba ha sufrido invasiones mercenarias, bombas en aviones, guerra biológica, y muchos otros ataques al pueblo cubano.

De los tres mil 478 fallecidos por el terrorismo contra Cuba -subrayó- “73 tuvieron una muerte aterradora en el vuelo 455, el 6 de octubre de 1976”, cuando detonaron en el aire el avión civil cubano que trasladaba de regreso a su patria a un equipo de esgrima.

Los presentes en esta manifestación pacífica espontánea, que colocaron flores sobre la cerca perimetral de la embajada, repitieron consignas contra el bloqueo de Estados Unidos y pidieron eliminar la designación de Cuba como patrocinador del terrorismo.

La joven Calla Walsh, copresidenta de la Red Nacional de Solidaridad con Cuba, señaló que ella es parte del vecindario donde está ubicada la legación diplomática antillana y ellos, y el pueblo estadounidense en general no toleran “estos actos de intimidación y violencia contra Cuba”.

Walsh exigió que el “Gobierno de Estados Unidos condene este ataque y lo investigue como un acto terrorista”.

En su intervención Medea Benjamín, cofundadora de CodePink, refirió que este es el segundo ataque en tres años y que del anterior, cuyo autor fue un tirador con un AK-47 todavía están las huellas de bala en las paredes de la embajada.

Benjamín añadió que el odio no es el que caracteriza a la comunidad de cubanoamericanos y reitero que Cuba ha digo víctima del terrorismo por años.

Por su parte Brian Becker, de la coalición Answer, también declaró a esta agencia de noticias que “este no es un incidente aislado porque ha habido más de 60 años de acciones terroristas contra el Gobierno cubano, sus recintos diplomáticos, contra funcionarios cubanos” y el pueblo estadounidense se opone a eso.

Samira Addrey, una joven afroamericana graduada en la Escuela Latinoamericana de Medicina, que trabaja con IFCO-Pastores por la Paz, calificó de “inaceptable” este ataque y solicitó que se haga justicia.

Esto es un ejemplo de lo que hace el odio en vez de aceptar amor”, subrayó Addrey al insistir que “cuando se agrede a nuestros amigos muy cerca de la Casa Blanca (por la ubicación de la embajada de Cuba) eso no da buen sabor a nadie”.

El pueblo de Estados Unidos está muy en contra de la política del bloqueo contra el pueblo de Cuba. Todos los pueblos tienen el derecho de determinar su propio destino”, enfatizó.

Agazapado en la noche, un individuo lanzó dos cocteles molotov el pasado 24 de septiembre contra la embajada. No hubo que lamentar, afortunadamente, daños humanos, pero como advirtió Addrey acciones como esa ponen en peligro la vida del personal diplomático.

La jefa de la Misión de Cuba en Estados Unidos, Lianys Torres, escribió en su cuenta en X que las autoridades fueron notificadas de inmediato y que se les dio acceso a la sede “para la toma de muestras de los cocteles molotov”.

El canciller cubano, Bruno Rodríguez, al informar sobre lo sucedido recordó que “es el segundo ataque violento contra la sede diplomática en Washington”.

“Los grupos anticubanos acuden al terrorismo al sentir impunidad, algo sobre lo que Cuba ha alertado a autoridades estadounidenses reiteradamente”, advirtió.

El 30 de abril de 2020, también en la noche, un individuo de origen cubano, “parado en plena calle de la capital estadounidense y haciendo uso de un fusil de asalto, disparó en ráfaga treinta cartuchos contra el edificio”, subrayó una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba.

Afortunadamente, tampoco hubo en esa ocasión lesiones al personal que se encontraba dentro del edificio, pero sí hubo perjuicios materiales de consideración”, destacó el pronunciamiento.

“Es una ironía que Cuba esté de manera injusta en una lista de países terroristas y al mismo tiempo, en suelo estadounidense, se cometan actos terroristas contra la embajada y el personal diplomático cubano”, dijo el movimiento Puentes de Amor.

Resulta “sumamente preocupante que este acto terrorista ocurra el último día de la visita del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, a Estados Unidos”; además, “es muy triste y perturbador” que mientras el mandatario abogaba ante cientos de norteamericanos por la construcción de puentes de amor entre los dos países, unas horas más tarde “un terrorista lanzara dos explosivos” contra la representación de la isla.

“Exigimos que caiga sobre los culpables todo el peso de la ley”, exhortó por su parte la Asociación Cultural José Martí, de Estados Unidos, tras conocerse acerca del atentado.

No saben qué daño hacer para tratar de empañar la opinión generalizada de rotundo éxito de la reciente visita del presidente de Cuba, subrayó el grupo.

También el movimiento NEMO (No al Bloqueo) protestó por “el salvaje ataque con cocteles Molotov” a la sede de la representación de a isla y recordó que mientras se mantiene a Cuba en “una lista espuria de promotores del terrorismo, la embajada de nuestro país en la capital estadounidense sufrió dos atentados en este trienio”.

¿Dónde está la protección a las sedes diplomáticas establecida por la Convención de Viena a la cual está obligado a dar cumplimiento el gobierno de Estados Unidos?”, expresó por su parte el Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos.

Esta es la segunda ocasión que esa misión, ubicada a menos de diez cuadras de la Casa Blanca, sufre un ataque terrorista, apuntó el Comité, que se suma a las múltiples expresiones de rechazo reportadas dentro y fuera de Estados Unidos.

Al menos 581 actos de terrorismo de Estado -de acuerdo con datos oficiales- se produjeron contra representaciones diplomáticas de Cuba desde el triunfo de la Revolución, en enero de 1959.

Fotos y Video: Deisy Francis Mexidor

(*) Periodista cubana, colaboradora de Resumen Latinoamericano.

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