Culturales

En el aniversario de una emblemática composición musical del maestro Frank Fernández, ¡felicidades Raúl!

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Por Noel Domínguez*.

Un viejo amigo, lo de “viejo” solo atribuible a sus ya casi 70 años de fructífera vida artística y ya sin casi, de 80 de edad, me visitó, y juntos rememoramos hasta los mínimos detalles lo transcurrido en un Junio de hace alrededor de 28 años, en que él estrenó a público abierto y con teatro lleno una de su más emblemáticas y sin embargo casi desconocida obra musical intitulada “EL ROBLE” (dejaré a la perspicacia de los lectores los elementos implícitos del por qué). Enseguida les cuento.

En el ahora lejano 1996, alguien suficientemente facultado para hacerlo, decidió que la Dirección General de la Contrainteligencia del MININT, asumiera en unión con la Dirección Política (antes solo lo hacían estos) la organización y ejecución del acto central por la conmemoración de un nuevo aniversario cerrado de la institución, el 35 de entonces.

Motivaciones pudieran haber muchas, unas de las cuales emanada de aquello que un día de 1959 nos soltara el CHE, con su peculiar, ríspido y didáctico estilo… “ustedes valen menos que un saco de malanga”, o a lo mejor, tendiente a no continuar solo viendo los lados oscuros de la sociedad, ni creernos el ombligo del mundo. Lo cierto que así, por vez primera y en contra de todos los pronósticos, ocurrió, y el Jefe de la Dirección de aquellos momentos nos encomendó esa desacostumbrada organización de atípica actividad para nosotros, chequeándonos su ejecución rigurosamente.

Fuimos avanzando y dando traspiés, con algunos pocos aciertos, ocurriéndosenos realizar la actividad el día 3 de Junio en lugar del concebido 6, tratando de enmascarar y/o disimular por supuesto el motivo real cumpleañero, (el primer gestor desde antes de la Sierra, de las labores de proteger la vida a FIDEL) dado de que si trascendiera, él, fiel a su eterna modestia, no aceptaría presidir el acto como estaba anunciado. En términos criollos y comprensibles para nuestros jóvenes lectores de la INTRANET de hoy en día, era un intento de “encerrona” solo conocida por unos muy pocos.

Como si no fueran bastantes los controles y chequeos a los que estábamos sometidos, se nos apareció el día antes del ensayo general, el 2 de Junio, alguien para nada previsto, el mismísimo Viceministro Primero del MININT de aquellos instantes, hacedor incansable del principio organizativo que establece, “confiar pero comprobar” o el de “tocar con las manos los asuntos importantes”, a quien acompañé en su recorrido por lugares tan inusitados tanto para él como para mí como tramoyas, bambalinas, luces, micrófonos, cortinas, consolas de audio, etc., del escenario de la Sala Avellaneda del Teatro Nacional.

Entre los claroscuros del ambiente el Maestro Frank (Fernández, Premio Nacional de Cultura y emérito pianista internacionalmente consagrado), terminaba de ensayar e impetuoso como siempre, sin acertar aún ver a los ocasionales concurrentes, encandilado por las luces que le iluminaban de frente, casi que gritó: “…me dicen que por ahí anda “El diente” Noel supervisando una vez más lo que hago… ¿Donde carajo estas metido, hijo de la gran puta?” “Aquí Maestro” -dijo sonrojado el otro- “acompañando al Viceministro Primero del Ministerio del Interior que quiere saludarlo”, respondió el aludido.

Posteriormente, ante una pregunta inquisitiva del dirigente, después de la presentación de rigor, Frank contestó: “es una canción dedicada a él y la denominé ‘EL ROBLE’; la compuse hace muchos años, de la cuál Elizabeth (de Gracia, cantante reconocida con distinciones importantes, la principal de ellas la Orden Ana Betancourt) la vocaliza magistralmente”. Después, a una segunda pregunta respondió: “Yo realmente no sé a ciencia exacta si él la aprobó o no, lo que sí sé, es que la interpreté una vez en la salita de conciertos del Colegio de Dolores de Santiago de Cuba delante de él y de Vilma”.

Arribó entonces otro no previsto, el entonces Capitán de Navío Julio Cesar Gandarilla (Bermejo, quien se desempeñaba como Jefe de Escolta del Ministro de las FAR después Jefe de la CIM y antes de su desgraciado fallecer fungió como Ministro del Interior).Tuve que excusarme y atenderlo, lo cual hice jubilosamente porque pensé entonces que su presencia estaría garantizada.

Pero…cuál no fue mi fiasco el día de la verdad… A teatro Nacional repleto, desbordado de combatientes entusiastas que aplaudían efusivamente como muestra de reconocimiento y admiración la presencia de dos héroes de la República de Cuba, el Comandante de la Revolución y ex Ministro del Interior Ramiro Valdés Menéndez y el entonces actual Ministro General de Cuerpo de Ejército Abelardo Colomé Ibarra, ambos miembros del Buró Político de nuestro glorioso Partido Comunista.

Aquél día 3 del sexto mes del año 1996, en la “conmemoración oficial” (de lo otro, el importante cumpleaños número 65 que se pretendía asociar enmascaradamente, no se hablaba) del 35 Aniversario del Ministerio del Interior, para mi peculiar desolación y la de otros pocos confabulados, el Maestro Frank y Elizabeth incluidos, había un gran ausente.

No se presentó. Pudo más su perenne olfato de guerrillero acostumbrado al asedio y a eludir las “emboscadas”, así como su sempiterna modestia y discreción, que terminaron por imponerse.

Nota: Someto hoy después de más de 28 años transcurridos a la consideración de todos y todas, gracias a la cooperación del Maestro Frank Fernández y de Elizabeth de Gracia, dos muy buenos amigos desde muchos años, la letra CASI INEDITA de este himno, dedicado a la modestia y la consagración de un verdadero e integro hombre y revolucionario pleno. Ahí les va:

“ EL ROBLE ”

(Letra y música de Frank Fernández, vocalizado por Elizabeth de Gracia)

Con ternura de hermano, y firmeza de Jefe,

el palmar y el terruño es su tierra mambí.

Sabia de roble noble es su sangre azarosa,

y en el puño de olivo, oda al roble mayor.

Su añeja vida es espontánea leyenda,

mezcla necesaria de actuar como roble robusto,

dando sabia de fuego y amor.

Dura raíz y retoño martiano de esperanza al futuro,

para el rocío eterno de aquella mañana de la Santa Ana.

Con ternura de hermano, y firmeza de Jefe,

el palmar y el terruño es su tierra mambí.

Sabia de roble noble es su sangre azarosa,

y en el puño de olivo, oda al roble mayor.

Roble que sonríe vida y derrama confianza,

y en follaje aguardado, su sensible pasión.

(Se repite estribillo)

Con ternura de hermano, y firmeza de Jefe,

el palmar y el terruño es su tierra mambí.

Sabia de roble noble es su sangre azarosa,

y en el puño de olivo, oda al roble mayor.

Roble que sonríe vida y derrama confianza,

y en follaje aguardado, su sensible pasión.

(Se repite estribillo)

Con ternura de hermano, y firmeza de Jefe,

el palmar y el terruño es su tierra mambí.

Sabia de roble noble es su sangre azarosa,

y en el puño de olivo, oda al roble mayor.

Roble que sonríe vida y derrama confianza,

y en follaje aguardado, su sensible pasión.

(*) Periodista de Prensa Latina y escritor. Reedición de artículo del mismo autor publicado el 3 de Junio de 2011, en esta ocasión dedicado al aniversariosta vez dedicado al 93 del cumpleaños del líder de la Revolución Cubana Raúl Castro Ruz, el 80 del maestro Frank Fdez y el 63 del MININT.

Video: Centro Fidel Castro

Foto: TRT / Archivo

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