El abuso, comercio y tráfico sexual de menores en Miami (IV)

Por José Luis Méndez Méndez * / Colaboración Especial para Resumen Latinoamericano.

Los casos de abuso, comercio y tráfico sexual de menores en Miami abundan. El proceso de otra ex prostituta, quedó expuesto cuando ella se inició en el tráfico sexual por primera vez sin siquiera saber lo que era eso. En su testimonio anónimo, explicó que abandonó su casa a los 15 años junto con su hermana por rebeldía. Su hermana empezó a trabajar como dama acompañante y ella puso atención a los beneficios, aunque no sabía cómo se llamaba lo que veía. “No era glamoroso, pero estaba asombrada por el dinero. Ella siempre tenía mucho dinero”, relató.

Hay casos de niños o niñas a quienes secuestran y los obligan a iniciarse al tráfico sexual, en la mayoría de los casos los seducen hombres, que los hacen sentir amados y les ofrecen otras variedades de estabilidad, dijo María Clara Rodríguez, supervisora de divulgación y educación de Kristi House, un centro dedicado a combatir el abuso sexual infantil.

Comentó: “Las niñas no se ven como víctimas. ‘Es mi novio; vamos a casarnos; me prometió el cielo y las estrellas’. Ellas lo creen”, dijo. Una vez que entran en el negocio del sexo, su esperanza de vida es de siete años, ya que la tasa de muertes por homicidio y sida es la más elevada, dijo Rodríguez.

El caso comentado, tenía 17 años la primera vez que le pagaron por sexo. Recuerdo sentir remordimientos, pero volvía a caer. Una amiga la invitó a un hotel cuando tenía 18 años. “Ella sabía lo que ocurriría, pero yo no”.

Resultó que su amiga era reclutadora de un proxeneta y ese día la dejaron a solas con un hombre y “se sintió obligada” a regresar al mundo de la prostitución. A eso siguieron las drogas y el alcohol, y finalmente ella misma, se encontró reclutando a otras chicas para el proxeneta. Escapó de esa vida cuando las autoridades la atraparon en el acto. Ahora, está embarazada y quiere regresar a la escuela y dedicarse a criar a su hija. Su ex proxeneta es el padre de su bebé.

Por su parte, Kat Rosenblatt, activista que lucha contra el tráfico de personas, empezó a compartir su historia hace cinco años, cuando se dio cuenta de que los niños que vivían en ese mundo se identificaban con ella y querían salir.

“El problema es tan grave que no se puede cuantificar”, dijo Rosenblatt. “Las cifras que encontramos ahora son mayores de lo que se haya reportado antes”.

Rosenblatt ha llevado a cabo labores de difusión en paradas de autobús, escuelas, prisiones y clubes de striptease, en donde ha encontrado a muchas víctimas del tráfico sexual infantil que están dispuestas a enfrentar su situación.

También descubrió que las víctimas del tráfico sexual provienen de todos los estratos socioeconómicos, y de todas las razas y grupos étnicos. Rosenblatt ha aislado un patrón de niñas vulnerables a causa de las drogas, el alcohol, el abuso sexual o la violencia intrafamiliar.

El principal método para atraer a chicas nuevas al tráfico sexual es usar a otras niñas para reclutarlas, dijo Rosenblatt. Su historia comenzó cuando tenía 13 años y dejó su casa con su madre para escapar de un padre abusador. Ambas se mudaron a un hotel, en donde la ahora activista estaba a menudo sola mientras su madre trabajaba. Conoció a una chica mayor en la alberca del hotel.

La chica le presentó a un hombre; la pareció interesante pero se daría cuenta más adelante de que era un proxeneta. Él le prestó atención y actuaba de forma que llenaba el vacío que había quedado al alejarse de su padre. Poco después, la chica mayor intervino para que Rosenblatt vendiera su virginidad por 550 dólares, la pareció justo y accedió. Lo que siguió la hizo cambiar.

Se han sucedido hechos de abogados dedicados a la defensa de las víctimas de delitos sexuales, que han utilizado su profesión para beneficiarse e incluso participar en el delito, un caso ocurrió en West Palm Beach, localidad donde acusaron a un letrado de 53 años que representaba a víctimas de abuso sexual infantil. Según los fiscales, el sujeto se dedicaba a la  pornografía infantil, tenía videos, fotos, revistas en su apartamento de en West Palm Beach, allí descargaba abundante material de abuso sexual infantil utilizando Internet. Según los investigadores, se recuperaron casi 2,000 imágenes y vídeos de pornografía infantil de sus dispositivos. Las imágenes y los vídeos mostraban a niñas de tan sólo 5 años.

El empleado jurídico era un depravado sexual, al ser procesado su teléfono en busca de evidencia,  se encontró desbloqueado con una imagen de fondo en la que aparecía una mujer de entre 16 y 25 años manteniendo relaciones sexuales con dos hombres a la vez.

En su perfil estaba registrado como socio de Cohen Milstein en Palm Beach Gardens y jefe del equipo de abuso sexual, tráfico sexual y abuso doméstico del bufete. Tenía doble imagen, una de próspero y exitoso representante legal y la otra de pedófilo infantil. Después de la detención fue excluido del catálogo del mencionado bufete. Los registros del Colegio de Abogados del Estado también hacen referencia a su empleo en el bufete, pero un portavoz de la firma, consultado confirmó a los medios de comunicación “ya no trabaja aquí”.

“La firma está asombrada y entristecida por estas terribles acusaciones”, dijo el portavoz en un comunicado, fue despedido y ya no está afiliado a nosotros. Estamos enfocados en atender las necesidades de nuestros clientes y personal, y continuar cooperando plenamente con la investigación”.

Él había logrado múltiples veredictos multimillonarios en juicios para sus clientes, así como numerosos acuerdos para sobrevivientes de delitos sexuales, incluyendo víctimas infantiles y adultas, y adultos sobrevivientes de abuso sexual infantil. También desempeñó un papel fundamental en ayudar a aprobar la legislación de Florida, que derogó todos los estatutos de limitación para el enjuiciamiento civil y penal de abuso sexual infantil. Así se anuncia en LinkedIn.

El perfil añade “aporta a su trabajo la perspicacia y el compromiso de un superviviente, habiendo sido él mismo víctima de abusos sexuales cuando era joven a manos de un depredador sádico. No sido un caso excepcional, de ese tipo abundan en la “capital del sol”.

(*) Escritor y profesor universitario. Es el autor, entre otros, del libro “Bajo las alas del Cóndor”, “La Operación Cóndor contra Cuba” y “Demócratas en la Casa Blanca y el terrorismo contra Cuba”. Es colaborador de Cubadebate y Resumen Latinoamericano.

Foto de portada: Revista Semana.