Argentina: La policía de Bullrich y Milei sigue con la idea fija de reprimir manifestantes / Tercer día de gas pimienta, balas de goma y detenciones
Una nueva represión tuvo lugar en las inmediaciones del Congreso, luego de la aprobación en general del proyecto de Ley Ómnibus.
Por la noche se produjeron más corridas de la policía Federal y fueron detenidos militantes del FOL y comunicadores populares.
Tras la aprobación en general el proyecto de Ley Ómnibus por 144 votos a 109, las fuerzas de seguridad reprimieron manifestantes frente al Congreso. Es el tercer día de represión en igual cantidad de días de debate parlamentario.
Granadas de gas lacrimógeno, gas pimienta y bastonazos fueron usados por los agentes para dispersar a los manifestantes, quienes respondieron con el lanzamiento de piedras y botellas.
Efectivos de las fuerzas de Seguridad cargaron contra manifestantes y los obligaron a retirarse de las calles adyacentes al Parlamento, en su empeño por hacer cumplir el protocolo antipiquetes que prohíbe la interrupción del tránsito durante las protestas.
Los militantes, en su mayoría de agrupaciones izquierdistas, organizaciones sindicales o de movimientos sociales, tuvieron varios choques con los miembros de la Gendarmería, la Policía Federal Argentina (PFA) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) que tomaron parte en el operativo.
Los agentes de seguridad avanzaron en formaciones compactas contra la multitud que se había congregado en cercanías del Congreso y los obligaron a retirarse hacia la Plaza, con el apoyo de carros hidrantes y motos que realizaban maniobras para rodear a los manifestantes.
Los uniformados arrojaron gas pimienta a un grupo de jubilados que protestaban contra la media el proyecto de ley, mientras se escuchaban detonaciones en medio del avance de las fuerzas de seguridad.
En tanto, los manifestantes se reagruparon en la Plaza y comenzaron a entonar consignas como «La patria no se vende/ La patria no se vende».
A la protesta acudieron miles de autoconvocados y militantes que se agruparon frente al Parlamento sobre la plaza, sin cortar la avenida Entre Ríos, donde cientos de efectivos de la PFA se apostaban para evitar que se obstaculice la calle, a quienes luego se sumaron agentes motorizados y un carro hidrante, como sucedió en las anteriores dos jornadas y que ayer finalizó con trabajadores de prensa heridos por balas de goma.
Cerca de las 19 se registraron los primeros incidentes sobre la avenida Rivadavia, la única arteria que comenzó a ser obstruida por manifestantes, sobre quienes avanzaron en distintas ocasiones las fuerzas de seguridad, en cumplimiento del protocolo antipiquete dispuesto por el Ministerio de Seguridad.
Entre ellos, un grupo de personas con una bandera de Jubilados Insurgentes que fueron desplazados de la calzada por efectivos de la PSA, quienes portaban escudos y arrojaron gas pimienta sobre los presentes.
«Acá hay personas adultas mayores, hay jóvenes. Están empujando. Estamos en la vereda, en Callao y Rivadavia. Esta es una movilización pacífica y estamos en democracia. No hay necesidad», indicó la diputada de Unión por la Patria (UxP) Julia Strada a la prensa presente en la manifestación.
Las agrupaciones y gremios que protestaban son la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma (CTA-A), el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (Sutna), el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), Polo Obrero, Partido Obrero, Libres del Sur, Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST), Izquierda Socialista.
También Asambleas de Zona Oeste, Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Merlo, ATE Capital, Somos Barrios de Pie, Movimiento Evita, Movimiento Teresa Rodríguez, Resistencia Socialista, Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), entre otras.
«Es muy nociva esta ley, la patria está en juego. Creemos que esta ley esta hecha a medida de las grandes corporaciones. Lesiona el medio ambiente y vienen por los derechos de los trabajadores. Viene a desguazar y desmantelar el Estado», dijo desde la Plaza Congreso el secretario General de la CTA Capital, Pablo Spataro, en un video difundido por la propia central obrera.
Minutos antes de las 18, desde un camión improvisado como escenario ubicado frente al Congreso, distintos artistas comenzaban a dar una serie de espectáculos organizados por el colectivo Unidos por la Cultura, con el apoyo de diferentes organizaciones de izquierda.
Entre los artistas que participan de este «festivalazo cultural», que forma parte de un «plan de lucha en defensa de la cultura y contra la ley ómnibus y el DNU», se encuentran Las manos de Filippi, Peteco Carabajal, Arbolito, Juli Laso, Barbarita Palacios, Alto Guiso, Alta Gama, Invisibles y Javi Casalla.
Al comienzo del festival se dio lugar a la Intersindical de Radio Nacional, conformada por sindicatos con representación en la emisora de todo el país.
La delegada de Radio Nacional y dirigente del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba), Micaela Polak, afirmó que «somos parte de este espacio de cultura porque Radio Nacional es la cultura de este país, es la que difunde, produce en cada rincón del país generando esa identidad nacional que nos une e identifica».
«Eso es lo que hacen los medios públicos, lo que hace la TV Pública, Télam y esto es lo que venimos a exigir que defiendan esos legisladores que saben bien como funcionan los medios públicos, porque gran parte de ellos son representantes de pueblos muy pequeños de nuestro país y saben que no tienen voz en otro lado que no sea en los medios públicos», agregó, para luego dar paso a Cecilia Bari de Asociación de Trabajadores de Radio Nacional (Atrana) y Fernando Piana de ATE.
En tanto, el diputado de Avanza Libertad (AL), José Luis Espert, cuando se retiraba de la Cámara de Diputados rodeado de policías que lo custodiaban, fue increpado por un puñado de manifestantes, mientras el legislador levantaba su brazo derecho con el puño cerrado.
Por otro lado, autoconvocados realizaron un «bocinazo contra la Ley Ómnibus» desde Avenida de Mayo y Perú en una caravana de «autos, camiones, motos, bicicletas o cualquier tipo de rodado para ocupar todas las calles».
«No queremos enojar a la ministra Patricia Bullrich, por eso, nos ponemos creativos. Convocamos a un bocinazo para manifestarnos dentro de lo reglamentado en contra de la ley ómnibus», se detalló en una convocatoria que comenzó a circular en redes sociales.
Tomado de Resumen Latinoamericano Argentina / Fotos: Diego Diaz.